Cuando lo vió por primera vez, estaba tan sorprendido por el poder mágico que brotaba de la grieta que no se fijó en él. Pero mientras conversaba con Lorna, una fugaz mirada hacia ese lugar le produjo una extraña sensación.
Demasiado denso y oscuro. ¿Era así antes?
Aunque las sombras eran intrínsecamente oscuras y densas, había algo claramente diferente en ésta. Mientras entrecerraba los ojos, preocupado de que pudiera ser señal de una grieta, Lorna lo llamó con voz desconcertada.
"¿Sir Aile? Parece que ha visto todo lo que había que ver. ¿Hay algo extraño?"
"Esa sombra en la grieta... ¿No se ha vuelto un poco extraña?"
"¿Perdón?"
Lorna entrecerró los ojos, una mirada de concentración en su rostro.
"Um.... ¿Qué es exactamente lo que parece extraño? Parece ser lo mismo que antes".
"..."
Yuder fue incapaz de responder. Incluso cuando se le preguntaba qué era lo extraño, no tenía palabras precisas para describirlo. Lorna, que había estado esperando una respuesta, suspiró y palmeó el hombro de Yuder.
"Parece que estás excesivamente preocupado por un posible problema relacionado con la fisura. Hoy no es el único día. Puedes volver mañana y comprobarlo de nuevo. Volvamos ahora".
"¿Volverás mañana?"
"Por supuesto. Seguiré viniendo a comprobarlo mientras esté bien. No puedo dejar que este lugar se dañe, aunque otros lugares puedan estarlo".
Después de empaquetar el diario compartido de los magos que quedaban en el puesto de guardia, Lorna cerró el círculo mágico protector que cubría el Manantial Mágico. Yuder se quedó mirando el Manantial Mágico, que se desvanecía poco a poco como un espejismo, mientras se esforzaba por mover su poder mágico.
"¿Siempre hay que abrir y cerrar la formación para entrar ahí?".
"Sí. Si no lo hacemos, podría ser invadido por otros o por monstruos. Pero estoy preocupada, la formación de control central se ha debilitado demasiado debido a los daños. Tengo que repararla pronto, pero no estoy segura de tener fuerzas..."
Tras cerrar la formación, Lorna afirmó que casi había agotado el poder mágico acumulado del día. Desde que se convirtió en maga en su infancia y se sometió a un entrenamiento constante durante muchos años, era una de los muchos magos que luchaban por mover incluso una sola formación, lo cual era algo habitual en este mundo.
'Deficiencia de poder mágico'.
Yuder reflexionó sobre un problema que nunca antes había considerado seriamente.
Para convertirse en un mago, uno tenía que nacer con el talento de sentir el poder mágico, pero entre los seleccionados, sólo unos pocos podían lanzar magia de atributos. Aún menos podían realizar poderosas magias de ataque o defensa, y los que podían hacerlo recibían un trato no inferior al de la alta nobleza, independientemente de sus orígenes plebeyos. Esta era la razón por la que las herramientas mágicas, que podían utilizar magia grabada con una ligera cantidad de poder mágico, eran cada vez más populares.
Yuder siempre había pensado que era natural que la magia que podían realizar los magos actuales fuera menos potente que los milagros que se decía que habían realizado los legendarios Archimagos. Al fin y al cabo, las leyendas solían exagerar la realidad.
Pero ellos creían sinceramente que podían salvar esta distancia. Yuder recordaba las emociones que parpadeaban en el rostro de Lorna cuando sonreía, le preguntaba si alguna vez se había sometido a una prueba de capacidad de respuesta a los poderes mágicos y le inundaba a preguntas sobre sus poderes, parecidas a las de los atributos, cercano a sus poderes, similar a la magia atributo.