AMORES ENEMIGOS[mikellino]

capitulo 22

Toc
Toc

El líder se detuvo al escuchar el golpeteo de la puerta.

Music: “¿Qué ocurre?” Dijo con molestia.

Trollino: “tiene reunión con la agencia número cuatro” habló desde el otro lado de la puerta.

Se le había olvidado esa reunión, recordaba que era más tarde… dirigió sus ojos al chico bajo de él. El rostro del rubio era una mezcla de confusión y vergüenza viva, no comprendía ni la más mínima idea de lo que ocurría. Music sonrió victorioso, pronto regresaría para seguir con lo que habían quedado.

Music: “voy” respondió “Nos veremos después, descansa” se despidió para irse del lugar.

Mike se sentó, esa extraña interacción entre jefe y empleado, estaba sumamente fuera de lugar. Aunque claro, su líder mencionó que era porque él era especial, pero no quitaba el hecho que era incómodo.

Los pasos ajenos acercándose hacia él le llamó la atención, miró hacia delante para encontrarse con esos inusuales ojos celestes.

Trollino: “¿Todo bien?” Se sentó a su lado.

Mike: “si”

Trollino: “veo que te dieron pastillas…” mencionó al ver un frasco en las manos del rubio.

Mike: “el señor Music dijo que podría estar teniendo alucinaciones” dijo intranquilo.

Trollino: “el exceso de trabajo, mala alimentación y pocas horas de sueño, pueden provocarlos” explicó “puede que sea eso”

Mike: “lo más probable…” afirmó las palabras del peli negro “¿Cómo estás de tu nariz?” Se burló levemente.

Trollino: “solo fue un golpecito, no fue gran cosa” sonrió con burla.

Mike: “¿Golpecito? Te estaba sangrando la nariz”

Trollino: “ claro que no” negó rotundamente.

Mike: “pff” río empujando suavemente al agente “eres pésimo perdedor”

Trollino: “y tú pésimo ganador” bufó.

Mike: “¿Ah?”

El rubio se seguía burlando entre risas, mientras que el peli negro observa como reía su compañero, esa risa tan alocada, llena de burla, que provocaba que las mejillas del mitad perro se tiñeran de un rojo suave, de tanto carcajear, que achinaban esos grandes ojos al acompañar la comisura de esa hermosa sonrisa.

El agente de ojos celestes no pudo evitar sonreír apacible, sin dudas, aunque no lo admitiera directamente, amaba esa bella expresión alegre del rubio.

Manu: “oh, veo que están aquí” dijo entrando al lugar.

Trollino: “has llegado antes de tiempo de tu misión”

Manu: “si, tuve unos… ‘inconvenientes’” sonrió de lado.

Trollino: “¿Inconvenientes? Tu nunca los tienes”

Desde que conocía al peli verde, siempre tenía éxito en sus misiones, era realmente raro que tuviera problemas ¿Y qué rayos era esa sonrisa? Había fallado en la misión, seguramente el jefe lo regalaría, pero ahí estaba sonriendo como un tonto, como si hubiera disfrutado su maldita derrota.

Trollino: “¿Por qué estás tan herido?”
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Manu: “bien… solo tengo que esperarlo aquí”