Ahora tengo ...

Cap 25

Su cabeza subía y bajaba, sus dedos entraban y salían, cada acción provocaba espasmos en su cuerpo, que culminaron en su éxtasis que la dejo casi sin aliento.

–(E-ella... ¿No termino?)– miró el gran miembro de Luz, que permaneció erecto, como si no hubiera pasado nada, pero eso sí, con las babas de Willow cubriéndolo por completo.

Con solo verlo sentía su cuerpo calentarse nuevamente, y el jugó de amor de su intimidad comenzó a fluir como si estuviera empezando la provocación. Con la mente en blanco por la excitación, se despojo rápidamente de su falda y ropa interior, que volaron por la habitación hasta caer frente a la puerta.

Se colocó sobre el gran miembro, sosteniendolo con la mano derecha mientras lo frotaba con su apertura chorreante de jugos. Lista, lo introdujo lentamente, poco a poco bajando hasta llegar a la base que la hizo sacar la lengua y poner los ojos en blanco. Inhaló y exhaló, antes de subir y, bajar con todas sus fuerzas, buscando penetrar su útero, acción que consiguió.

–(Ll-llegó hasta el fondo, se siente... Se siente bien)

Su mente divagaba en el placer interminable que recibía cada vez que bajaba, gimiendo más y más fuerte sin importarle ser escuchada.

–Que bien, que bien, que bien, ¡Que bien!– con un grito de placer había llegado al éxtasis, aún teniendo el miembro de Luz dentro de ella.

Las piernas de Luz y las sábanas se habían mojado por el gran orgasmo de Willow, pero algo la molestó, y era el frío de su estómago que la corrida de Luz había dejado en su ausencia.

–¿P-por qué?– se preguntó confundida y frustrada, anhelaba el líquido de Luz en ese momento.

Se dispuso a salir del miembro de Luz, pero al levantarse solo un centímetro, sus piernas flaquearon y un fuerte gemido salió de ella, cayendo nuevamente en la base del miembro de Luz.

–Hahh... Hahh...– su respiración se volvió pesada, no podía salir de allí, no tenía de otra que intentar despertar a Luz.

Aguantando lo sensible que se encontraba su cuerpo, se estiró hacia adelante, golpeando ligeramente con su palma el rostro de Luz.

–L-luz... Luz...– no despertaba, aplicó un poco de fuerza a sus golpes pero fueron en vano.

Pero algo había llegado a su mente, y habían sido las palabras de Boscha.

–(Sus orejas...)– lentamente se estiró aún más hacia adelante, logrando que su rostro estuviera cara a cara con el de Luz, preocupada por la manera en la que ella lo estaba doblando.

Se acercó a su oreja, soplando suavemente sobre ella, llevándose una sorpresa al notar como el cuerpo de Luz se erizaba. Consiente de lo eficiente que era, uso su lengua, lamiendo desde el lóbulo hasta la parte superior; otro espasmo provocó en el cuerpo del Luz, incitandola a seguir. Sus lamidas continuaron, nublando su objetivo al disfrutar de las reacciones de Luz, desde un pequeño gemido hasta una leve expresión.

–Mmm...– pero su diversión se vería interrumpida por su mismo entretenimiento.

Luz comenzó a mover el cuerpo por su cuenta, señal de que estaba apunto de despertar. Willow solo la veía, esperando; cuando la vista de Luz se aclaró por completo, solo miro fijamente a Willow para después ladear su cabeza.

–Si querías hacerlo, ¿Por qué no me despertaste?

–Ehh...– le sorprendió un poco que Luz no se molestará, tanto que su excitación había disminuido un poco, haciéndola olvidar su necesidad –T-te quedaste dormida y yo... Ehh... S-solo me dió... Curiosidad .– esa última palabra la dijo con su vista en otra parte, aparentemente avergonzada de decirla.

Luz sonrió, pero de una manera algo siniestra.

–Ok... Si curiosidad es lo que sientes...– Luz abrazo firmemente a Willow tomándola por sorpresa –Haré que se vuelva una necesidad...– la acercó aún más a ella, teniendo contacto piel con piel.

Willow no sabía que estaba pensando Luz, sin embargo, al sentir como era elevada permitiendo que gran parte del miembro de Luz saliera de ella, comprendió lo que estaba apunto de suceder. Sin previo aviso, Willow recibió la fuerte estocada de Luz que la obligó a sacar de lengua de puro placer.

La emoción en ese instante se apoderó de ambas, Luz volvió sus movimientos más violentos mientras que Willow lo único que podía hacer era aferrarse fuertemente al cuello de Luz. Jadeos y el fuerte sonido de piel con piel chocando rebotaron con las paredes de la "habitación", llegando a ellas que se exitaban aún más de solo escucharlas.

Treinta minutos habían pasado y su posición había cambiado, siendo Willow la que ahora yacia recostada mientras se encontraba de pie, sosteniendo las piernas de su compañera ligeramente elevadas.

–¿Lista?– preguntó con una sonrisa dejando a la vista sus dientes.

–S-¡Sí! ¡Dámelo!

–Ok. Aquí...– alejó un poco sus caderas, sin perder de vista la intimidad de Willow, quién, al ver su pequeña acción, sus pupilas se contrajeron, asustada por lo que estaba apunto de venir.

–L-luz, esp...

–¡Voy!– un fuerte golpe resonó en la "habitación", callando las palabras de Willow, quién se quedó con la boca abierta, mirando fijamente el techo.

–A-ah... Ah, a-ah...– las palabras no salían de ella, su atención se había perdido, pero su cuerpo, emanaba más calor que antes.

–Bien, vamos a divertirnos.

Sus embestidas comenzaron fuertes y rápidas, aunque Luz demostrará todo lo contrario, no se le veía cansada, era como si esa velocidad rápida, en realidad fuera lenta. Así que, insatisfecha, aumento aún más la velocidad, regresando en sí a Willow, quién comenzó a gemir sin contenerse sosteniendo sus piernas en un intento fallido de querer abrazar el cuello de Luz.

Su sexo se volvía más intenso, los pechos de ambas no dejaban de rebotar, y sus intimidades no dejaban de gotear jugos de amor. Luz ya se encontraba al límite, estaba apunto de acabar después de dos horas, mientras que Willow estaba apunto de acabar por décima vez.

–Wi-willow, ya estoy ll-llegando... ¡Mm!

–Y-yo igual... Estoy... ¡Ah!

Estaba a segundos de terminar: 3... 2...

|Toc, toc|

El golpeteo de la puerta las hizo parar, frustrando enormemente a Willow quién solo bufó.

–¿Quién será?– se preguntó mientras sacaba su miembro de Willow, dejando caer un gran charco de los jugos de su compañera sobre el suelo.

Tomó sus pantalones y se los colocó, dejando sus pechos solamente cubiertos por su camiseta que ella misma sostenía. Se acercó a la puerta dispuesta a abrir, Willow rápidamente se levantó y se envolvió con las sábanas, cubriendo su cuerpo desnudo.

Al abrir la puerta, Luz se encontró con una de las azafatas del avión.

–Di-disculpe, señorita...– se notaba que su edad estaba entre los treinta, reluciendo su desarrollado cuerpo que era cubierto por su uniforme hasta las piernas, que eran decoradas por unas medias negras, de las que Luz no pudo apartar la mirada –E-emm... L-le quería decir que aquí no puede hacer eso y... Y qué muchos de los pasajeros se quejaron por ruidos provenientes de esta zona...– se notaba que la azafata estaba nerviosa y las gotas de sudor de su frente la delataba, después de todo el olor a sexo era más que evidente.

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