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   Estaba con Hitoshi, la había llevado a un acuario al no poder darle un regalo como era debido, aunque para ella ese pequeño gesto era maravilloso.

   Los peces de colores nadaban de aquí para allá, la luz azul del agua reflejada en el cristal lo hacía ver aún más atrayente. Todos los animales acuáticos que veía llamaban su atención. Realmente no pensó que en epocas próximas de invierno los acuarios podían estar abiertos, es por eso que disfrutaría como pudiese.

   El animal que capto su atención fue la tortuga que nado en frente de su rostro, por instinto puso su palma, sintiendo el frío del vidrio que los separaba.

   Shinsou sonrió al ver su mirada brillosa, como si fuera una niña.

   Le compro un peluche, le regaló un poster de una ballena jorobada e incluso le dio un llavero en forma de estrella marina. La consintió lo más que pudo, quiso hacerla feliz, aunque ella no lo mostrase sabía que se sentía así. Y eso lo comprobó cuando lo abrazó desprevenido.

   Hikari no pudo estar más que bien el resto que le quedaba del día. Cuando Shinsou se fue de la residencia por cosas personales, se quedó sola, aunque la clase no tardo en desearle un feliz cumpleaños y regalarle uno que otro dulce.

   Hoy era un buen día, hacía sol y el clima estaba agradable, ni tan frío ni tan caliente. Eso era bueno ya que el invierno estaba próximo a llegar.

   Miró por su ventana, visualizando a lo lejos una cabellera de rubio intenso. No tardó en bajar y recibirlo con amabilidad.

─¡Yamae! ¡Feliz cumpleaños!

─Gracias

─¡Te tengo una sorpresa! ¿Vienes? Te va a encantar, en serio

   Asintió, agarró un gorro y salió a su lado, dirigiéndose a la clase A. Denki no paró de hablar en todo el trayecto, decía y hacía cosas que ya se habían vuelto típicas de ver y escuchar.

   Estando en la puerta se sobresaltó al sentir el tacto de sus manos tapando sus ojos.

─Confía en mi─ dudo, pero al final accedió.

   Empezó a avanzar de manera lenta, entrando con cuidado para evitar tropezar con algo. Mantuvo sus ojos cerrados ante las súplicas del rubio, estuvo así por un tiempo cuando le indicó que ya podía abrirlos.

   La luz repentina la hizo entrecerrar los ojos, enfocó mejor al centro de la sala, viendo al resto de la clase sonriendole y mostrandole el pastel que habían hecho. Era de degradados azules, casi como. . .

   Sus manos sudaron, su mirada por inercia volvió a Kaminari. Él le dedicó un asentamiento de cabeza para que avanzará, algo que no hizo porque sintió que no merecía aquello. Sentía que le estaban dando mucho en un día como cualquier otro.

   Se asusto al sentir la mano de alguien tomar la suya, era una chica de coleta alta y cabello azabache, igual que el suyo. Yaoyorozu la tomó con suavidad, guiandola hasta la mesa.

   Ver las sonrisas cálidas y emoción en sus caras por festejar algo que ni para ella tenía tanta importancia, se sintió simplemente bien.

   La agarraron por los hombros y la juntaron para la foto. Un curso que no era suyo y no sabría si pertenecería allí en el futuro le hacía este tipo de cosas, ni siquiera su propio salón llegó a eso.

   Se limitaba a ver como reían y probaban bocadillos de la mesa. Lo veía todo en cámara lenta, intentando guardar este momento para siempre. Era su primer cumpleaños celebrado como era debido, con comida, con pastel, con regalos. . . Con amigos.

ᴄᴏɴᴇxɪᴏɴ | ʙᴀᴋᴜɢᴏ ᴋᴀᴛꜱᴜᴋɪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora