────❛Casandra Swan se convirtió en la nueva sensación sobrenatural cuando salió de Forks y llegó a Mystic Falls con un bebé híbrido en el vientre. Mitad vampiro y mitad humano.
Y Klaus Mikaelson no puede evitar sentirse atraído por la idea de otros...
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────❛el otro lado❜
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LA CORTINA de la tienda de abrió y Casandra junto a Bella pudieron ver a Rebekah salir usando un atuendo fabuloso. Casandra bebía de su vaso con sangre mientras Bella chateaba con Bonnie, Elena y Caroline para avisar que estaban secuestradas en una tienda de ropa.
—¿Y este? —preguntó modelando frente a un espejo.
—quitate la pañoleta, no combina —negó Casandra bebiendo de nuevo y Rebekah arrugó la nariz pero lo hizo.
—sabes de moda, me gusta —asintió tirando la pañoleta a un rincón sin importarle.
—sé de aberraciones de moda. Bella es especialista —sonrió viendo a su hermana que blanqueó los ojos —¿qué? Cuando se trata de ropa, no eres lo mejor.
—Tiene razón —Rebekah miró con desdén a Bella.
—oye, no la mires así. Yo sola puedo tratarla así —Casandra le pidió —por favor.
Rebekah solo revoloteó las pestañas y se volvió a meter para seguir vistiendose. Casandra sintió una extraña sensación, como si alguien la estuviera observando, pero en la tienda solo estaban ellas tres y la vendedora que solo aparecía para alimentar a Rebekah, totalmente hipnotizada por la vampiro -algo que a las hermanas Swan les horrorizaba-.
Miró su brazo, el mismo en que tenía la venda que tapaba las garras que Jacob le había dejado, profundas, en una enorme cicatriz manchando su piel, y más abajo la mordida que James le había hecho.
Quiso levantarse, pero su brazo pareció sujeto al sofá.
—Ah, Bella... —susurró confundida y Bella la miró.
De repente, la marca de la mordida de James comenzó a abrirse y Casandra empezó a gritar del dolor, era como si alguien la estuviera mordiendo en ese mismo lugar, otra vez.
Rebekah salió rápidamente del vestidor al oír el sufrimiento de Casandra, viendo cómo se retorcía y su brazo comenzaba a sangrar por la marca de una mordida en su muñeca.