Tolerare todo lo que sea...

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Kai ya estaba cansado...

Ya había perdido la noción del tiempo aquí encerrado en esta oscura, húmeda y pequeña bodega de cargamento que, no tan amablemente, sus secuestradores lo habían retenido contra su voluntad.

¿Cuál era la peor parte?

Que estos secuestradores eran parte del grupo que traficaba Vengstone ilegalmente.

Los ninjas se habían topado con este grupo cuando la policía reporto un enfrentamiento en uno de los muelles de la ciudad de Ninjago, resulta que estos secuestradores se querían robar el cargamento que ellos mismos habían traído para entregárselo a su proveedor, quien se lo entregaría a su verdadero jefe, quien es el que había solicitado la extracción de la Vengstone.

El grupo del proveedor y el grupo de los secuestradores habían iniciado una pelea por que los secuestradores se querían quedar con la mitad de la Vengstone, pero el proveedor no lo permitió ya que su jefe quería toda la Vengstone, los secuestradores no aceptaron esto e iniciaron una pelea, eran criminales contra criminales, pero una vez que llegaron los ninjas se convirtió en una verdadera batalla campal, pero como oyeron que la policía se acercaba los secuestradores en un rápido movimiento se abalanzaron contra Kai y se lo llevaron ya que los secuestradores supusieron que los ninjas tendrían más información sobre la Vengstone ya que siempre interceptaban las cargas ilegales del mineral por todo Ninjago.

A pesar de los numerosos intentos de Kai para liberarse, su esfuerzo no dio resultado ya que los secuestradores eran más y Kai solo era uno, además, lo tenían esposado con cadenas de Vengstone, las cuales también habían robado los secuestradores antes de huir con el Ninja Rojo.

Así que el fuego de Kai era inútil.

Lo ataron a una silla y Kai ya olvido el transcurso del tiempo que llevo ahí, prácticamente los secuestradores comenzaron con interrogarlo sobre la ubicación de la Vengstone. Kai obviamente no sabía de qué estaban hablando, pero claro, Kai aun así no les diría nada. Además, Kai sabe que la Vengstone es difícil de localizar y solo sabían como interceptar los cargamentos ilegales gracias a la información de algunos ciudadanos, la policías y los inventos de Pixal que podían rastrear el material de la Vengstone a varios kilómetros de distancia.

Pero aun así, Kai y los demás no sabían exactamente de donde se extraía tanta Vengstone, incluso era algo que aún estaban investigando junto con la policía de Ninjago.

Sin embargo, los secuestradores no estaban conforme a las respuestas de Kai, así que su líder, un hombre mayor, con barba y una gran cicatriz en el rostro, decido tomar medidas extremas...

El líder nuevamente entro en la habitación donde tenían encerrado a Kai, el Ninja Rojo aún se encontraba sentado y encadenado a la silla donde lo tenían confinado. Kai parecía algo cansado ya que las horas pasaron y después de tantas preguntas obviamente se sentía exhausto.

- De acuerdo, Ninja Rojo, más te vale que hayas reflexionado con cuidado y me des ahora una respuesta favorable para mis chicos y para mí. ¡¿Dónde podemos encontrar más Vengstone?! – grito al acercarse violentamente hacia el rostro de Kai, quien aparto su rostro ignorando completamente al hombre.

- Como si fuera a decírtelo. Y te daré la misma respuesta: Púdrete – escupió Kai con desprecio sin darle la más mínima atención al hombre corpulento frente a él.

- Esta bien, Ninja Rojo, trate de hacerlo por las buenas, pero ahora lo hare por las malas... - con una mirada oscura el hombre hizo tronar los nudillos de ambas manos, y sin previo aviso le cesto un fuerte golpe a Kai en el rostro.

Gimiendo, Kai miro con ira al hombre quien tenía su puño levantado.

- ¡Si te quieres ahorrar más golpes en tu lindo rostro más te vale que me digas donde puedo encontrar más Vengstone! – exigió de nuevo el líder, listo para dar otro golpe.

Ninjago One-Shots (AU Y UA)Where stories live. Discover now