Lujuria | Christopher Vélez y Tu [+18]

Capitulo 2

Narra Christopher

—¿Qué te pasa? ¿Por qué tan serio? — preguntó Zabdiel, quien es mi único amigo.

—Nada — respondí — estoy cansado, ando de malas.

—¿Por qué? Déjame adivinar, no pudiste tener sexo en tu fin de semana — bromeó, solamente lo mire por el espejo y levante mi ceja —Lo siento, se me olvidaba que nadie le dice que no a Christopher Vélez, ¿Cuántas fueron?

—No tengo idea, perdí la cuenta cuando iba en la quinta chica — respondí.

—Diablos, no sé cómo no tienes una enfermedad — dijo y ambos reímos —Mejor respóndeme porque estas tan molesto.

—Porque necesito dinero, ser mesero no deja buenas ganancias, Zabdiel. Si no fuera por el dinero que me da el estado por mis buenas notas en administración, estaría en la calle — suspire cansado.

—Sabes que siempre tendrás mi casa.

—Lo sé, pero tú también necesitas comodidad, y la verdad que un integrante más en tu casa no sería óptimo — contesté.

—Tienes razón, ¿Qué harás? — preguntó Zabdiel.

—No tengo idea, de momento puedo vivir un mes más de las propinas, de las fiestas y el alcohol gratis que me invitan las chicas. Todo era más fácil cuando

Ni siquiera puedo terminar la frase, no quiero recordar ese nombre.

—Cuando estaba Fernanda — terminó Zabdiel por mí.

—No la nombres, por favor— dije enojado.

—Lo sé, ha pasado un año, no puedo creer que sigas pensando en ella — comentó un poco disgustado.

—Cambiemos de tema mejor — dije colocándome enfrente de el —¿Cómo me veo?

—Decente — sonrió —A todo esto, tengo un conocido que trabaja en una de las empresas Morgan y me dijo que una de sus hijas se haría cargo de una parte de la empresa, pero que no iba a poder con la universidad, la tesis y la empresa.

—¿Eso que tiene que ver conmigo, Zabdiel? — pregunte confundido —¿quieres que vaya a desestresarla?

—No, idiota. Está buscando candidatas o candidatos a oficinistas, podrías presentarte —contestó.

—¿Un secretario? Zabdiel, ¿a veces escuchas lo que dices? — pregunte más confundido que antes por las estupideces que decía —Eso es de mujeres.

—Estudias administración, Christopher. La mujer estudia economía, si te quedas con el puesto, ambos pueden hacer mejor la empresa y te ascenderían de puesto muy rápido si te poner a trabajar, piénsalo — dijo Zabdiel.

La verdad sus palabras retumbaban en mi cabeza, es una buena idea.

—Lo pensare, Zabdiel, ¿Cuándo es la entrevista? — pregunte con interés.

—Es

—Da igual, iré ahorita mismo — dije sin dejarlo responder —Estoy desesperado por dinero.

Comencé a cambiarme de ropa de nuevo, tenía que verme formal para lograr ese trabajo. Una vez vestido, le pregunte a Zabdiel como me veía.

—Creo que tu madre estaría orgullosa de ti — comentó una vez que termino de examinarme — Es momento de ir por esa mujer.

Mire por última vez el espejo, realmente me veía bien. Sin querer mientras bajábamos las escaleras del edificio, me pregunté si alguna de las chicas con las que estuve, se fijó en mi más que un solo pedazo de carne. Deje de pensar un momento cuando me acorde de la única chica a la que le había entregado mi corazón y termino siendo todo para nada.

—¿Te pasa algo? — pregunto Zabdiel sacándome de mis pensamientos.

—No — mentí — Vamos a tomar ese taxi.