What If - Branch Gris

Un Poco de Animo

Espero que les guste~

Branch no necesitaba mirar para saber que su cola se agitaba con ligero nerviosismo, sintiéndose un poco más calmado entre más se alejaban de las miradas pero sin poder estar del todo tranquilo. Acaricio con aire ausente al murcielago, quien en realidad parecía disfrutar de la atención, mirando de reojo a su acompañante. Cooper estaba extrañamente callado, sus orejas aun bajas, y él solo sabía que se había sentido un poco herido por el comentario del rey.

-Oye...- dudo, sintiéndose fuera de lugar. Años de aislamiento y soledad lo habían vuelto socialmente torpe, algo que no parecía que fuera a cambiar muy pronto. -...no hay nada de malo con ser diferente- una de las orejas ajenas se agita apenas en señal de estar escuchando.

-El rey no parece pensar lo mismo- suspiro y era la primera vez en toda su vida que el mayor veía a ese troll en particular tan triste. Se sentía mal, incorrecto casi.

-Lo sé- hizo una mueca, sabiendo a lo que se refería. -Escucha, el rey es tan viejo como la historia que nos acaba de contar...- Cooper tropieza con sorpresa notable y es bueno ver esa expresión decaída siendo reemplazada por ojos bien abiertos que lo miran ahora. -...y no me sorprendería que su cerebro fuera piedra a estas alturas...- un bufido, el más alto apenas conteniendo una risa, y Branch se sintió victorioso por un segundo. -...así que no debería importarte la opinión de alguien así- baja la vista, triste de ver su piel gris sobresalir entre el blanco del murcielago. -Sé que ser diferente puede ser difícil, pueden decir lo que sea sin conocerte y a nadie le importa como puedes sentirte por eso...- coloca a la criatura en su hombro una vez más, deteniéndose en la entrada de su bunker. -...pero no tienes que sentirte mal, porque ser diferente te hace único y especial de una manera que nadie nunca va a entender- alzo la vista para mirarlo, solo por un segundo, sintiéndose demasiado avergonzado y raro como para poder mirarlo en todo momento. -Eres diferente para los de este pueblo pero estoy seguro de que hay más como tu...- bufo, recordando la extraña figura de recortes que había visto. Lucia familiar, de cuello alto y cuerpo rechoncho, quizás en representación de pelaje o algo así. -...o quizás una tribu entera- agita apenas las orejas, escuchando algo que lo hizo alzar la vista, abriendo los ojos con horror. -¡N-No es necesario llorar!- agita las manos con pánico ante las grandes lagrimas que corren por las mejillas ajenas.

-...lo siento- Cooper aprieta los labios temblorosos. -Todos te tratan tan mal pero eres tan bueno...- Branch siente las mejillas arder ante eso. -...y yo soy tan malo como los demás- sollozo abiertamente, sentándose. El sobreviviente agradecía estar lejos del pueblo, quienes de seguro lo acusarían de haberlo lastimado o algo así de tonto.

-N-No lo eres- rebusca entre su cabello, sacando un pañuelo, dudando un poco antes de usar su cabello para levantarse un poco y secar con torpeza las lagrimas ajenas. -Entre todos ellos, podía sentir que no tenías malas intenciones, solo decías la verdad...- para él, el troll de extremidades largas solo soltaba comentarios, muchos realistas al decir verdad y no siempre en los mejores momentos pero no hubo insultos de su parte ni dada por el estilo. -...y supongo que seguías un poco a los demás para no sentirte apartado, ¿no?- Cooper asintió y el otro no podía sentirse molesto por ello. La presión sobre alguien como Cooper, quien en realidad vivía en la aldea, habrá sido abrumadora. -Ser diferente no es todo lo que te preocupa, ¿o si?- sus pies volvieron a tocar el suelo, mientras el más alto asentir con cierta vergüenza, las orejas bajas y la cabeza algo inclinada. -¿Son las otras tribus?-

-...uno de ellos se parecía a mi- admitió con un puchero ligero.

-Si, yo también lo note- se rasco la nuca, pensativo. -Supongo que quieres ir a buscarlos- Cooper parecía aprensivo, indeciso, pero termino por asentir, ligero y un poco tenso. -Bueno, en todo caso, te ayudare a prepararte en cuanto alimente a este pequeño- acaricio al murcielago, quien mordisqueo apenas sus dedos en señal de hambre.

-¿En serio?- se animo, las orejas levantándose con sorpresa. -¿No intentaras detenerme?-

-Claro que no- bufo, casi ofendido, subiéndose a su ascensor y haciendo un gesto ligero, el otro tardando unos segundos en entender, subiéndose a su lado. -Si lo que creo es cierto y en realidad eres de otra tribu, significaría que tienes una familia por allá...- acciono la palanca para bajar a su hogar, repasando en su cabeza la lista de frutas que tenía. Solo podía esperar que nada le cayera mal a ese pequeño ser. -...no soy quien para impedirte buscar tus orígenes- avanzo, volteándose al no escuchar al otro seguirlo, enarcando una ceja ante su expresión. -No le diré nada al rey o a Poppy si es lo que te preocupa-

-¡No!- pareció reaccionar, sacudiendo la cabeza antes de avanzar. -No, no es eso- dudo. -¿En serio vas a ayudarme?- parece esperanzado y muy emocionado.

-Claro, necesitas estar preparado si vas a adentrarte al bosque- se adentra a su cocina, buscando un plato algo hondo y dejando algunas frutas pequeñas allí, poniéndolo sobre la mesa y luego colocando al murcielago ahí, satisfecho al verlo comer, algo desordenado pero mejor que nada. -Viajaría contigo si no fuera porque siento que Poppy hará una locura más tarde- hace un gesto vago, haciendo una lista de lo que el otro pudiera necesitar, aunque obligándose a recordar que tampoco le podía dar demasiado.

-¿Crees que ella intentara...?- ladeo la cabeza con curiosidad.

-Es terca y cuando las cosas no funcionan como quiere, encontrara la forma de hacerlo a su manera- bufo con una ligera mueca. -En especial porque estoy seguro de que esta un poco obsesionada ahora con eso de "unir a las tribus"- ya podía imaginar la idea loca y temeraria que seguro estaba cruzando por la mente de la reina. Temía dejarla sola y que se metiera en problemas.

-Eres muy bueno- Cooper sonrío con encanto puro, las mejillas del troll gris ardiendo mientras baja las orejas, poco acostumbrado a los halagos repentinos. -¡Te contare todo lo de mi tribu cuando la encuentre!- decide repentinamente. -¡Y te presentare a mi familia!- y pronto, parece muy animado, dando pequeños saltos y tropezando en su camino, sus ojos brillando. -Apuesto a que podríamos aprender mucho juntos-

-Lo que tu quieras, Coop- Branch sonrío ligeramente. Era mejor ver al menor así, animado y divagando, con su imaginación volando a gran velocidad, que triste y dolido. -Venga, vamos a prepararte una mochila- hizo un gesto y Cooper lo siguió entre saltos, hablando tan rápido que era difícil seguirle el ritmo pero el sobreviviente se contento con escucharlo.