What If - Branch Gris

Solo...Canta

Espero que les guste~

Nota: Por si las dudas, traigan sus pañuelos :3

Hay silencio, un aterrador y agobiante silencio. Los trolls se miran entre ellos, luciendo tan perdidos como los lideres pero mayormente tristes por la perdida de sus colores y Branch siente una punzada de culpa, en especial cuando nota que alguien se le acerca.

-Alcaldesa Delta...- se siente mal al verla. Antes lucia orgullosa, colorida y feliz pero ahora es tan gris como todo lo demás y se siente mal, como si no fuera correcto y es su culpa. -...lo siento-

-Oh, cariño...- la expresión de ella es suave, triste, aunque también hay algo cariñoso y casi dulce en su mirada. Le extiende su mano y él duda solo un segundo en aceptar el gesto, tan cálido y amable como la primera vez que dibuja una muy ligera sonrisa en su rostro. Se aferra a ella por unos segundos, retrocediendo ante la punzada de culpa que llega a su pecho, y baja las orejas. Alguna vez quiso que todos pudieran sentir lo que él siente, ser gris y vivir con ese vacío, que todos dejaran de cantar de una vez pero en ese mismo instante, daría lo que sea si eso significaba que todos podían recuperar los colores y la música.

Un latido de corazón es lo que rompe el silencio entre todos ellos, constante y ligero, sonando desde los parlantes y llamando la atención de los presentes. Cooper es el responsable, sosteniendo un micrófono contra su pecho que brilla suavemente de color rosa por alguna razón. Parece nervioso y tentativo, sus orejas animándose cuando Darnell se acerca para estar a su lado, creando un ritmo con su propia boca.

-Son mis hijos...- Essence luce asombrada mientras los mira, el extraño y repentino ritmo que crean los hermanos siendo llamativo, el primer sonido desde la perdida de las cuerdas. -...están haciendo música- hay una lenta y suave sonrisa dibujándose en su rostro. Branch levanta la vista para mirar a Delta, parpadeando con sorpresa al ver su pecho brillar en naranja. Ella parece pensativa por un segundo, su cabeza asintiendo a un ritmo que pronto marca con aplausos y pronto, se unen sus patas delanteras, zapateando, volteándose hacia su gente que no dudan en imitarla. El pecho de más trolls se iluminan al mismo tiempo que una tonada repentina suena. Hay muchos colores, naranja, rosa, violeta, dorado, azul, verde. Cada troll tiene un color diferente en su pecho en una especie de marca de su tribu y su estilo musical. -Barb no puede quitarnos algo que llevamos dentro...- mira de reojo a la reina del rock, quien luce confundida y perdida. -...porque es ahí donde nace la música- mira a la multitud con ese porte digno de una reina, llena de fuerza repentina que anima a muchos allí.

-Empezó con las cuerdas...- Quincy se mueve para pararse junto a su esposa, mirando a los trolls, esperando que entendieran el mensaje. -...pero ahora, la música es parte de nosotros- un coro que viene directamente de los tecno.

-Surge de nuestras experiencias...- Trollex luce encantado con su pecho brillando en azul, levantando la vista para mirarlos a todos.

-...de nuestra vida...- Delta luce emocionada ante el suceso que presencian.

-...de nuestras culturas- asiente la reina del funk.

-Barb no puede quitarnos eso- Poppy se lleva las manos al pecho, sonriendo ante el tono rosa que puede ver. Ella levanta la vista, su alegría decayendo cuando se encuentra con la expresión triste del sobreviviente, cuyo pecho se mantiene apagado y sin luz. Rompe su corazón pero de alguna manera, se lo había esperado, Branch no estaba conectado a ningún tipo de música. Se acerca, tomando su mano el la suya, mostrando la mejor sonrisa que puede, aunque tiemblan y sus ojos se iluminan con lagrimas que se niega a derramar.

-No te preocupes por mi- Branch no duda en decir, dando un suave apretón a la mano ajena, una sonrisa triste y llena de resignación dibujándose en su rostro. -Te necesitan...- hace un gesto hacia la multitud. -...solo canta- intenta retroceder, esconderse como siempre a hecho pero ella es firme y se aferra a su mano.

-Solo contigo a mi lado- lo mira con suplica y él duda. Fue su culpa que todo sucediera, así que cree que debería solo irse y esperar a que una canción pudiera despertar aquello que destruyo pero el agarre ajeno es fuerte y sabe que ella no lo soltara pronto, así que solo se queda a su lado. La reina luce aliviad y se voltea a ver a la multitud, avanzando un poco con su amigo a su lado, con el corazón acelerado. -Vamos a cantar...- su voz resuena. -...todos muy fuerte, reunidos siempre- una pequeña pausa, respirando profundo. -Lo malo olvidar- voltea a ver a su amigo con encanto y sorpresa cuando escucha su suave tarareo, sonriendo con más animo que nunca. -Cantar, que la nota que falta, se escuche más alta. Alta. Lo malo olvidar, cantar- y su color vuelve, desde su pecho, extendiéndose por todo su cuerpo.

-Tu...- ambos se miran, él aun gris y ella colorida una vez más, algo que ella siente que es cruel y sin sentido. -...te vez mejor de rosa- la reina bufa, dejando escapar algunas lagrimas de tristeza pero manteniendo su sonrisa, dándole un suave apretón a la mano ajena. Los reyes de las otras tribus pronto se unen, iluminándose como lo hizo Poppy y recuperando su color a medida que sus voces toman volumen. Branch no puede negar que toda la escena es simplemente impresionante. Cada troll que recupera sus colores, como de alguna manera los diferentes estilos tanto de las tribus principales como de las secundarias logran encajar en una sola canción, logrando esa unión y armonía que alguna vez se perdió.

En algún punto, Branch observa casi en cámara lenta como la mano rosa se desliza de la suya, viéndola alejarse para unirse a los reyes brillantes y coloridos como ella, bailando como suele hacer en el pueblo, luciendo orgullosa y agradecida por lo que sucedió.

Él aprovecha eso para darle la espalda y alejarse con pasos rápidos, pasando desapercibido.

-Bueno...- se oculta de todas las vistas y mete su mano en su cabello, sacando a la muy emocionada Tina, que salta constante y sin descanso, luciendo dispuesta a buscar a su gente. -...creo que hasta aquí llegamos, ¿eh?-

-¡Aun somos amigos!- lo dice con toda la seguridad del mundo, sin dejar paso a la duda y el troll gris solo puede sonreír. -¡Volveré a por ti con mis amigos, solo espera!- salta al suelo en cuanto el troll de agacha y se aleja con grandes saltos, haciendo sonidos fuertes en un intento de llamar la atención, y él solo puede mirarla por unos segundos.

Una parte de él esta dolida y enojada, porque parece que no importa cuanto esfuerzo ponga, en realidad nada lo hará cambiar, nada parece que traerá sus colores de vuelta a pesar de lo mucho que los extraña pero cuando se voltea a ver a las tribus, todas unidas una vez más después de quien sabe cuanto tiempo, y ve los colores brillar bajo el sol que de repente ilumina ese antes lúgubre lugar, no puede evitar sentir una burbuja de orgullo. Así que sonríe, contento de ver a su amiga y los demás felices, disfrutando después de todo el miedo que pasaron, y solo se aleja.