Sra. Young

Young

Penelope estaba en completo silencio al otro lado del pasillo, Colin Bridgerton había subido las escaleras hacia su habitación sin permiso, había excedido los límites, Varley estaba tras él intentando hacerlo entrar en razón, se quedó estático al mirarla abrir la puerta. Pen estaba de pie, acababa de arreglarse, se iría a Escocia esa misma mañana, pero Colin llegó justo a tiempo para hablar con ella. Y es que luego de dos días de insistir sin ser recibido se enteró que Penelope se iría y por más que intentaba explicarle ella se rehusaba a dejarse ver por él. Ella lo observó tomar aire y mirarla como si se sintiera él ser más miserable de la tierra, en cambio el rostro de ella era estoico, nunca había visto tal cara en Penelope, parecía ser otra persona a quien él estaba muy lejos de reconocer.

-¿Pen?

-Señor Bridgerton no puede subir así, son las habitaciones privadas, no está bien visto -Varley intentó hacerlo regresar, pero él no hizo caso-

-Debe irse Señor Bridgerton -La voz de Penelope salió de la forma más odiosa posible y el solo pudo dar pasos en su dirección, cuando pensó que podría hablarle ella levantó su mano en señal de que no lo quería cerca, dejó de moverse expectante-

-Pen por favor no te comportes de esa forma -Ella exhaló con fuerza y pasó a su lado como si no existiera, Colin se giró y dio largar zancadas alcanzándola -Penelope debemos hablar, no te puedes ir así- Tomó su brazo, ella vio su agarre y luego subió a su rostro-

-Usted no tiene derecho a pisar mi casa luego de arruinarme, si quiera deseo mirar tu rostro. Es la peor persona que he conocido- Se soltó de su agarre y bajo las escaleras con una rapidez que Colin considero insana, pero el logró llegar al último escalón antes que ella y la abrazó, la abrazó con tanta fuerza que ella no supo cómo escapar, era la primera vez que él la abrazaba y aunque se había prohibido volver a llorar, aunque había jurado para sí misma que lo olvidaría y que sepultaría sus sentimientos por Colin, en lo más profundo, no pudo soportarlo, se quebró y comenzó a llorar como una niña ante él. Colin al escuchar su llanto no pudo más que sentir susto-

-Pen lo lamento tanto, yo no quise, yo -La voz de Portia se escuchó fuerte en medio del salón-

-Señor Bridgerton suelte a mi hija ahora -Colin miró el rostro de Penelope, ella parecía aterrada- Salga ahora mismo de esta casa, usted ya ha hecho suficiente para dañar a mi hija así que lo mejor que puede hacer es retirarse de nuestra casa y de la vida de mi Penelope-

-Entiendo Lady Featherington y lo lamento, pero yo necesito disculparme, decirle a Pen lo que sucedió realmente.

-Si no se va ahora lo mandaré a sacar a la fuerza -Varley miraba desde las escaleras el suceso, tenía ganas de reírse, pero a la vez sentía pena por Colin, había sido un total idiota-

-Mamá quisiera hablar con el Señor Bridgerton -Colin la miró limpiar sus mejillas y Sonrió-

-¿Estas segura de ello? -Preguntó Portia, ella asintió y su madre salió del lugar, no sin antes decirle a Varley que debía mantenerse donde estaba-

-¿Podemos ir a un lugar donde sentarnos?

-No, esto será muy breve y solo lo diré una vez -Ella desvío su mirada y comenzó a hablar -Nunca olvidaré la linda amistad que nos unió, y créame que una parte de mí siempre apreciara al Colin de antes, al amable, al que me escribía cartas, al que me salvaba de Cressida -Su voz se quebró- Pero, cuando lo escuché decir ante todos esos caballeros lo que ni siquiera mencionaré porque me parece infame, supe que ya no existía ese Colin que considere mi amigo -Él le tomó la mano-

-Pen no hagas esto -Ella retiró su mano y dio un paso atrás volviendo a esa mirada helada que lo hacía sentir como una diminuta hormiga-

-Sé que nunca me verá como algo más, pero pensé que al menos era para usted una amiga o creí incluso que me quería como a una hermana. Sin embargo, arruinó las pocas posibilidades que tenía para poder formar una familia, y no creo que le importe demasiado -Se encogió de hombros- Al fin y al cabo, es hombre, para ustedes es más fácil. Nadie me mira, ningún Caballero se ha acercado a mi aparte de usted y sus hermanos, si antes no tenía posibilidad de ser desposada ahora seré una solterona.

-Yo lo lamento, yo había bebido mucho, estaba eufórico y siempre que comparto algún baile contigo alguien dice lo mismo, solo salió de mí y no lo pensé -Penelope bajó su rostro-

-Ese es el Problema Señor Bridgerton

-No es necesario que sigas llamándome así

-Si lo es, porque he comprendido algo que mi cabeza parecía no querer registrar. Yo nunca he significado nada para usted, pudo haberlo dicho de otra forma, pudo haber negado el cortejo sin dejarme expuesta al escarnio publico. A pesar de ello decidió decirlo de forma tan despectiva, como si yo siquiera fuera una opción -Apretó sus ojos- Y si el Bridgerton más popular de la temporada jamás me vería como una opción, a pesar de llamarse mi amigo, nunca nadie me verá como una potencial esposa -Colin acababa de caer en cuenta de la gravedad de sus palabras, había arruinado a su mejor amiga, a la única persona que había estado para él, a la única persona que realmente lo escuchaba y le hacía sentir que no era solo un tercer hermano sin propósito, ella siempre pareció admirarlo hasta ese día, ahora solo veía decepción, enojo y mucho dolor-

-Soy el peor ser humano

-Ya he dicho lo que debía decir, puede irse y espero no volver a verlo nunca más

-¿No volverás?

-Señor Bridgerton no tengo nada que hacer en un lugar donde nadie me desposara, así que espero tenga una linda vida y encuentre a alguien que lo haga feliz -La vio subir escaleras arriba y salió de la mansión Featherington en silencio. Al llegar a casa todos estaban tomando el desayuno y con solo ver su rostro imaginaron lo que había sucedido-

-¿Te disculpaste?-Anthony preguntó desde su asiento-

-Ella se irá, se irá para no volver y todo es por mi culpa -Eloise levantó el rostro y las lágrimas comenzaron a inundar sus ojos-

-Penelope ¿Se irá a donde?

-No lo sé Eloise, pero dijo que no podía estar en un lugar donde nadie la desposaría-

-Y es cierto, nadie nunca se ha interesado por Penelope, ahora nadie lo hará por tu gran boca hermano -Benedict se movió inquieto en su silla- Pensé que tenías al menos algo de aprecio por ella.

-Jamas pensé que dirías algo así de ella -Eloise se puso de pie, se sentía culpable por lo que sucedió, Pen había pasado por mucho en esos días y no concebía la idea de que se iría, tal vez no volvería a verla nunca más, eso era aterrador. Caminó hasta la puerta sin dar explicaciones, salió en dirección a la casa de su amiga y cuando logró bajar la escalinata vio a un Carruaje partir, su corazón se quebró, Portia estaba con un pañuelo en su mano, parecía estar llorando y corrió hasta ella-

-¿Donde esta Pen? ¿Dónde está ella?

-Oh querida, pensé que vendrías antes de que partiera -Eloise miró el carruaje desapecer y sus lágrimas comenzaron a brotar- Lo siento mucho niña, ella debia irse, tú hermano ha hecho imposible que mi pequeña soporte la próxima temporada.

-¿Ella volverá?

-Lo dudo mucho, la envié a casa de mi Hermana en Escocia. Si tiene suerte encontrará un buen partido y se casará. No creo que volvamos a verla pronto -Eloise caminó hasta su casa con las mejillas inundadas, no la volvería a ver tal vez en años, y lo último que pudo hacer fue gritarle, gritarle cosas que realmente no sentía. Al entrar a casa todos seguían sentados desayunando, Colin estaba sentado mirando el piso, no había probado bocado y cuando Eloise se paró en el umbral de la puerta su madre enseguida caminó hasta ella para abrazarla, nunca la habían visto llorar, todos salieron del lugar y cuando Colin caminó a su lado ella no pudo contenerse y le gritó- Perdí a Pen por tu Culpa- Violet suspiró -Si ella no regresa jamás te lo perdonaré- Colin subió a su habitación, todo era un caos por su culpa, sus propias palabras hacían eco en su mente, parecía que en tan sólo dos días se había convertido en un monstruo.

Penelope iba en la embarcación con su Doncella, eran varios días de Viaje y no sabía que esperar, no sabía que le depararía el destino. Había dejado a cargo a Madame Delacroix de sus próximos panfletos, en total serían 5, ella había estructurado todo y Delacroix solo debía completar la información con lo que estuviera sucediendo. En el último panfleto se despedía, y hablaba del porqué de su retiro. Estaba cansada, no quería seguir en Londres, había sufrido demasiado en esa ciudad y solo necesitaba otros lugares que ver, que conocer. No había una sola cosa en Londres que no le hiciera infeliz y desdichada, quería expandir sus fronteras, escribir un libro, quizás una novela Romántica, solo quería ser feliz, aunque Lady Whistledown había sido su propósito sentía que era suficiente, no quería ser más la Chismosa oculta tras la Pluma, quería ser la Mujer del libro, la escritora conocida por su habilidad con la pluma.

Después de varios días de Viaje, había llegado con nuevas expectativas, había dejado salir todo lo que la hacía entristecer y cuando piso la casa de su tía decidió ser otra persona. Su tía y su prima Felicity la recibieron gustosas, y Pen llevaba años sin verlas. Ella les contó lo que sucedió y él porqué de su repentino viaje, su tía estaba más que feliz de tenerla y aunque a Penelope no le agradaba mucho el marido de su tía, pues siempre tuvo la idea de que era un gruñón el también pareció estar complacido con su llegada.

-Bienvenida a Casa Señorita Featherington, espero tenga una linda estadía en nuestro hogar y por favor sepa que si necesita cualquier cosa estaremos complacidos en solventar sus necesidades -Eso la sorprendió y solo pudo agradecerle. Subió a su habitación y durmió todo el día, hicieron subir una bandeja de comida para ella pero el cansancio era más fuerte.

Al día siguiente despertó muy temprano y se arregló para salir con su tía al pueblo, ella se ofreció en buscar nuevos vestidos para ella y Penelope estaba demasiado feliz por ello. La temporada casadera en Escocia iniciaba en unas dos semanas, Pen estaba irritada por la insistencia de su tía en conseguirle marido durante esos días, la modista hizo grandes cambios en el talle de sus vestidos y su escote, cosa que la tenía alterada, sentía que se veía tan diferente, en el buen sentido, pero el temor de volver a ser la invisible seguía presente. Durante esas dos semanas su vida había dado un giro completamente, la comida en casa de su tía era muy diferente a la de la suya, eso debido a que el Señor de la Casa "El Señor Pearson" Venía de una familia con una Dieta de solo Verduras, frutas, legumbres y Carne. Jamás había pasado tanto tiempo sin comer pan o Galletas, en lugar de pastel comían granola o algunas semillas secas, lo cual la hizo perder algo de peso, en esas primeras semanas, sin mencionar que ellos daban largar caminatas casi a diario por los prados, lo que se convirtió en su cosa favorita, recolectaban bayas, flores y estudiaban la naturaleza, su tío estaba especialmente interesado en escribir un libro sobre botanica y eso le parecio increible.

Para cuando terminó esa primera temporada Penelope había bajado una arroba y en conjunto con esos vestidos que se ceñían a su figura había logrado ser muy resaltante en la temporada, a pesar de ello los tres hombres que habían intentado cortejarla le parecían muy simples y su tía le había dicho "Si ninguno es de tu agrado sigue buscando, cuando te enamores lo sabras desde el inicio" Y ella le daba la razón, enseguida vino a su mente su amor imposible por Colin Bridgerton.

..

Habían pasado cuatro años, Colin se había dedicado a viajar, su culpa nunca lo abandon, supo tan poco de Pen en esos años que parecía que nunca volvería y con cada día que pasaba sentía que su vida había perdido todo el color, sus viajes eran aburridos pues no tenía a quien contarle cada acontecimiento o descubrimiento y regresar a casa era el eterno recordatorio de que por su culpa ella ya no estaba. Benedict se había casado y Anthony tenía sus hijos con Kate, él por otra parte seguía sin rumbo, su vida ahora se trataba de escribir Diarios, los cuales descubrió que eran la sustitución de las cartas a Pen. Además, ahora bebía, no en exceso, pero si más de lo prudente. Esa mañana Colin recibió la carta que jamás pensó leer en su vida, Eloise se había comprometido, era la cosa más absurda, si no fuera la firma y sello de su querido hermano juraría que era una broma.

Querido Hermano, espero te encuentres muy bien. madre y todos te envían saludos. Quería hacerte saber que lo más extraño ha pasado, Eloise se ha comprometido y no es solo eso, se casará en un mes. Has pasado un año fuera de casa y debo decir que si no vienes a la boda de nuestra pequeña agitadora madre te colgará, así que si quieres conservate vivo y sano regresa.

Atentamente Anthony Bridgerton

Posdata: Penelope después de tanto al fin ha regresado.

Esa última parte de la carta lo hizo sentir extraño, ella había vuelto y la vería, ella había vuelto y todo había quedado atrás, podía volver a tener a su Pluma a su lado y esta vez haría lo posible por no meter la pata ni ser un tonto con ella. Después de una semana de viaje al fin pisó el puerto de Londres, extrañaba ese aroma y fue recibido por sus hermanos quienes estaban en extrema felicidad. Al llegar a casa en el carruaje lo primero que hizo fue asomar la cabeza para ver la casa de Pen, no puso evitar sonreír, ella había vuelto. Bajó con rapidez y entró a casa, abrazó a su madre y hermanos y subió a toda prisa a su recamara, tomó un baño y no dudo en salir a ver a su amiga, su madre lo vio cruzar la calle y miró a sus dos hijos mayores.

-¿Ninguno fue capaz de decírselo?

-Él debe enterarse por sí solo -Dijo Anthony-

-Colin siempre ha sido ciego ante las cosas que realmente lo hacen feliz, parece que ahora mismo va a comprender lo que tuvo en sus manos y dejó ir-

Colin traspasó la Calle, llevaba su mejor traje, y un pequeño obsequió para ella en sus manos, era su oportunidad para volver a tener una vida tranquila, sabía que ella lo había perdonado, sabía que ella había superado todo aquello y serían amigos de nuevo. Acomodó el moño de su corbata y llamó a la puerta, la señora Varley lo miró de arriba a abajo y frunció el ceño -¿Se le ofrece algo?

-Quería ver a Penelope ¿Podría por favor decirle que estoy aquí?

-Temo Señor que se ha equivocado de dirección -Colin espabiló sin entender - ¿Se refiere a la Señora Penelopa Young cierto? -Colin se quedó sin habla por un momento-

-Penelope Featherington -Varley agitó su mano-

-La Señora está en su residencia, junto a su marido el Señor Louis Young, puedo darle la dirección si lo desea- Colin agitó su cabeza, había escuchado mal, Penelope no podría estar casada-

-¿Pen casada?

-Si, la Señora se ha casado hace año y medio. Ambos pospusieron la Luna de Miel por la muerte de la Señorita Marina Thompson y ahora después de un tiempo al fin tuvieron su luna de miel y decidieron venir a pasar un tiempo aquí por el nacimiento del hijo -¿Tenía hijos? ¿Pen había dado a Luz? - De la Señora Prudence -

-¿Prudence?

-Si Señor -Colin estaba en Shock ¿Qué diablos había pasado? ¿Penelope casada? Si quiera prestó atención a la muerte de Marina, solo cruzó la calle de vuelta a casa y dejó el ramo sobre la mesa, Eloise apareció de pronto y lo abrazó-

-Colin has vuelto, sabía que vendrías para mí boda -Él se quedó en silencio y ella lo miró con extrañeza-¿No te contenta que vaya a casarme?

-No es eso, soy muy feliz por ello, en especial porque creí que jamás pasaría -Eloise se echó a reír-

-Hay muchas cosas que pensamos que jamás pasarían

-¿Cómo que Pen esté casada?

-Ah si ¿No es lo más bonito?

-¿Bonito?

-Oh Colin ella es tan Feliz, me encanta verla así

-¿Sabías que su esposo es dueño de una Editorial y así fue que se conocieron?

-¿Editorial?

-Pen ha sacado un libro y es un éxito

-¿Pen escribiendo?

-Es la mejor escribiendo Colin. Deberías ir conmigo, ahora mismo voy a casa de Pen, El Señor Young es la persona más elocuente e inteligente que he conocido después de Pen, además es muy guapo, Penelope rebosa de Felicidad y yo agradezco al cielo que todo terminó bien - Era irreal, Penelope no podía estar casada, su Pen no podía, debía verlo él mismo-

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Holis