✨buscando formas✨

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Veinticinco.

Los días seguían pasando y el pequeño Mimi estaba mucho más feliz después de arreglar las cosas con su kookie, Jungkook siempre había estado pendiente de su pequeño ya que temía que nuevamente apareciera ese hombre desconocido para llevarse a su pequeño, pero por el momento no había visto rastros de ese tipo y eso le alegró un poco, pero no bajaría la guardia por ningún motivo.

Jungkook: cariño ya te he dicho que no te alejes mucho de mí, temo que nuevamente alguien pueda alejarte y esta vez no pueda llegar a tiempo para salvarte.

Jimin: mi kookie aún no te olvidas a ese tipo verdad, no era tan malo como piensas por qué desconfías mucho de las personas, ese señor solo estaba perdido y me pidió ayuda es normal que la gente pidan ayuda cuando no pueden salir de un lugar tan peligroso como él bosque no lo crees mi kookie.

Jungkook: mi hermoso príncipe sé que eres muy noble y no ves las cosas malas en el ser humano pero te puedo asegurar que no todo es bueno en esta vida, siempre hay personas que están al acecho dispuesto a lastimar a otras personas y más si son unos niños tan hermosos como tú.

Dijo mientras abrazaba a su pequeño quien gustosamente se dejaba querer pasaban más tiempo juntos que sus padres no sabían cómo explicarles que aún no era tiempo pero el pequeño Jimin se había acostumbrado darle un beso en los labios a Jungkook todos los días a lo que antes no solía hacerlo.

Jimin: gracias por cuidar de mí, eres mi héroe, un caballero que siempre protegerá a Mimi verdad, porque que nada me va a pasar cuando tú estas a mi lado, te amo mucho mi kookie.

Ante esas palabras jungkook no pudo evitar la emoción y simplemente beso los labios de su pequeño disfrutando del delicioso sabor a cereza que tenían los labios de su pequeño, ya que él pequeño Mimi estaba comiendo justamente ese fruto, no quería evitar besar sus labios a cada momento, era una costumbre que había iniciado de un pequeño accidente y que ahora ninguno quería dejar de hacerlo.

Jungkook: no sabes cuánto te amo mi pequeño, solo quiero cuidarte y así lo haré, Bueno vamos pues necesitamos ayudar a papá o se enojara mucho, ya que nos ha dicho que no pasaramos jugando en el río cuando hay mucho trabajo.

Jimin: tienes razón mi kookie vamos no quiero que papá Yoongi se moleste.

Jungkook: sabes que papá no se va a enojar contigo verdad, eres su consentido va a decir que yo te llevé a ese lugar y te hice jugar.

Jimin: no me digas que estás celoso mi kookie porque papá me quiere más a mi que a ti.

Jungkook: sí estoy un poco celoso pero no porque papá te quiera más a ti, sino que me dan celos cuando papá te abraza no me gusta que nadie te abrace porque yo solo puedo abrazarte a ti, pero no le puedo decir eso a papá Yoongi o se va a poner de dramático ya sabes cómo es.

Jimin: jajaja si aún recuerdo cuando le dijiste que me dejara de abrazar y se puso a llorar diciendo que su hijo le había gritado que ya no quería que abrace a su pequeño niño fue difícil que se calmara jamás lo había visto de esa manera pero luego nos enteramos que solo había hecho una broma y papá Hoseok solo se reía al ver como papá Yoongi seguía con su drama.

Jungkook: quién lo diría que mi papá Yoongi fuera tan dramático ya que a los ojos de la gente parece un hombre serio que jamás muestra algo de alegría pero es todo lo contrario simplemente es una fachada para ocultar su verdadero ser.

Jimin: tienes razón mi amor, bueno vamos o esta vez sí se va a poner pero de un dramático real.

Dicho es el pequeño Mimi tomo de la mano a Jungkook y fueron corriendo en dirección a dónde estaba su padre Yoongi trabajando, ya que eran tiempos de cosecha y no podía desaprovechar o si no los animales terminarían comiéndose todo lo que había sembrado, cuando Yoongi vio que los niños habían llegado los miró muy serio pues como siempre se habían demorado demasiado.

lágrimas de luna 🌜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora