Capítulo 42 : El Reino de las nieves

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Si Cinder tuviera que decir algo es que dormir encima de plumas cálidas a cientos de metros del suelo ha sido lo más arriesgado y tonto que ha hecho.

Sabe que el cuervo no lo va a dejar caer y si lo hace sería atrapado, pero a muchos sin duda por ese mero temor de caer les impediria que durmieran.

Kjerag es el objetivo y ubicación del abismo más cercano, viajó por las nubes encima del gran cuervo negro siendo su forma principal de viaje, una forma no convencional pero siendo mejor que caminar.

Este pais es muy distinto a los demas y con un gran motivo, en lugar de estar encima de una gigantesca estructura móvil esta se encuentra en una gran cuenca en las montañas.

Esa zona geográfica les protegía de las catástrofes, por lo que perfectamente podían construir comunidades sin temor a que una tormenta de originium lo destruyera todo el infectara a los ciudadanos.

Un bonito lugar que sin duda recorrería durante su estancia, pero antes de siquiera empezar a hacer turismo debía cerrar el abismo.

Por ganar más poder y para proteger a los kjegarianos como objetivo secundario el cuervo descendió por las montañas, adentrándose en una ventisca de nieve que sin duda cubriría su llegada al país.

Por ganar más poder y para proteger a los kjegarianos como objetivo secundario el cuervo descendió por las montañas, adentrándose en una ventisca de nieve que sin duda cubriría su llegada al país

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Saltó del cuervo y se deslizó par de metros por la montaña llenándose de nieve, se quitó el exceso de la misma y se preparó para lo que sería un viaje frío por el país.

El frío no sería mayor problema, nada le impedía hacer una hoguera o usar piromancias para calentar su cuerpo para sobrevivir a bajas temperaturas, encendió una bola de fuego común y se la llevó al pecho adquiriendo algo de calor.

Camino unos cuantos kilómetros solo para darse cuenta que se había perdido en la zona montaña, trató de seguir el sendero pero este fue casi imposible de distinguir por la nieve, sabía que debía ir al pueblo más cercano por información del abismo pero no poseía idea alguna de donde estaba el más cercano.

Trató de deducir el camino pero la gran ventisca le dificulta viajar, ni siquiera quería imaginarse viajar por la noche.

Sin embargo la tormenta lentamente se fue calmando, algo raro, no sabía mucho de ventiscas pero sabe perfectamente que algo así no puede simplemente desaparecer tan rápido, no era tonto, algo raro estaba ocurriendo.

Vió lentamente como la tormenta se desvanecía de su alrededor, solo para que una presencia apareciera detrás suya.

El no muerto clavó sus ojos en aquella figura femenina, la cual si hubiera estado más cercana habría visto su rostro cambiar por haber sido descubierta.

Al darse cuenta de que ella era el objetivo de atención decidió empezar a hablar, acercandose lentamente al humano.

??? : un forastero, te ví llegar montado en ese animal, ¿ Es alguna mascota tuya ? - preguntó con interés

Arknights : Cenizas De La Maldición LatenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora