🌸 *:･ﾟ 𝓞𝓶𝓮𝓰𝓪 𝓟𝓮𝓬𝓾𝓵𝓲𝓪𝓻 ﾟ･:* 🌸 YoonMin [ 𝓛𝓲𝓫𝓻𝓸 𝓓𝓸𝓼 ]

🌸 𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓓𝓲𝓮𝔃 🌸

— Te dije que debías quedarte en casa.

— Sí, pero resulta que no me gusta que me den órdenes, ¿bien?

— Eso ya lo sé, a ti solo te gusta dar órdenes, no recibirlas.

Wow.

Qué incómodo se sentía TaeHyung estando en medio de YoonGi, JiMin y la discusión que se tenían, la misma que ha durado toda la mañana y la noche anterior. Lo más extraño de todo no era en sí la discusión, sino que YoonGi parecía estar de tan malhumor que estaba respondiendo a casa cosa que JiMin estaba diciendo, y eso era lo verdaderamente extraño.

— Pues, si te molesta tanto verme aquí, ¿por qué no te vas a casa y dejas que yo haga las compras?

— Lo haría, ¿sabes? Pero son las cosas de nuestra hija lo que estamos comprando y no pienso faltar a ello así me hagas mala cara — YoonGi aclaró — Aunque si quieres que me vaya porque prefieres la compañía del nuevo vecino, ese Alfa con más músculos que cerebro, puedes decírmelo directamente.

— Ya basta contigo, YoonGi.

JiMin se detuvo, dejó el carrito a un lado y empujó un poco a su hermano para que le diera pasada en busca de llegar con él y dejar las cosas claras de una buena vez, porque las estupideces que desde ayer estaba soltando, le parecían de un niño pequeño e inmaduro, no para un Alfa hecho y derecho.

— ¿Cuál es el problema contigo, ah? Si tienes algo que decirme, dilo sin indirectas.

TaeHyung, sinceramente, prefirió irse a otra sección, lejos de ellos y de sus peleas, pues la verdad es que era muy incómodo estar en medio de una discusión de pareja. Lo peor de todo es que era una discusión por celos y de parte de YoonGi, eso significaba que todo podría salirse de control y era algo que JiMin tenía en cuenta, por eso quería dejar las cosas claras y evitar problemas.

— Yo no tengo nada que decirte.

— No tienes nada que decirme porque todo lo estás diciendo por medio de indirectas.

— ¿Qué querría decirte? Más bien, ¿qué quería preguntarte? ¿Cuántos músculos tiene el nuevo vecino o si está soltero? Mejor aún, ¿sí tiene algún interés por un Omega casado? — YoonGi inquirió — Claro, como te vio solito en esa gran casa, de seguro pensó que no tenías un Alfa que pudiera defenderte o amarte, ¿cierto? ¿Siquiera le mencionaste que estás casado?

— No tengo por qué hacerlo. No tengo por qué ir por la calle mostrando mi anillo a todo Alfa que vea, porque hacer eso es demostrar que le doy importancia a las miradas ajenas — Aclaró — Desde que yo salgo de casa tengo en mente de que estoy casado, de que amo profundamente a mi esposo y que lo respeto por encima de todo. Creí que lo sabías, YoonGi.

— Y yo creí saberlo, claro, hasta que te vi tan cerquita de ese Alfa.

— ¿Te estás escuchando? Yo tenía la debida distancia entre los dos, porque tengo en cuenta que no me gusta hacer lo que no me gusta que me hagan — Sinceró — Solo hablé dos minutos con él y fue únicamente para darle la bienvenida al condominio, se llama tener modales, principios y valores.

Tal vez su argumento era válido, tal vez YoonGi estaba exagerando las cosas, pero es que haberlo visto cerca de ese Alfa tan atractivo y perfecto, hablando cómodamente; lo hizo sentirse un cero a la izquierda. No debería sentirse así cuando él los presentó para que las cosas no tomaran otro camino, pero aun así él no pudo evitar sentirse celoso, porque era su pareja hablando con otra persona cuando él no estaba en casa.

— Supongamos que fue así.

— No vamos a suponer nada, YoonGi. Así son las cosas y me enoja que no me creas, que te estés dejando llevar por los celos.