࿐ ࿔*:･𝐔𝐍𝐊𝐍𝐎𝐖𝐍 | LA HISTORIA EN DONDE, A TRAVÉS DE los años, 𝐏𝐄𝐑𝐂𝐘 𝐉𝐀𝐂𝐊𝐒𝐎𝐍 descubrió que sería capaz de nadar por un lago de fuego, siempre que la recompensa sea volver a su hogar en ese par de ojos violeta.
• PERCY JACKSON X MALE...
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PERCY NI SIQUIERA NOTÓ EN QUÉ MOMENTO SE aferró a la mano de Allyn, solo supo que no podía soltarse. El brazalete que Allyn le obsequió se sintió tibio cuando sus pieles chocaron, parte del deseo creciente de ver a Medusa también desapareció. Annabeth seguía murmurando cosas sobre ella cuando Percy dio un paso hacia adelante, llevo a Allyn consigo.
—No te acerques a ella, Percy —repitió Annabeth—. Es un monstro.
Bajo el agarre firme de Percy, Allyn se tensó.
—Un monstruo. —Medusa saboreó la palabra con diversión—. Me gustaría saber cuáles considera que son las diferencias entre un monstruo y una víctima la hija de Atenea.
Annabeth frunció el ceño.
—Esa será una discusión para otro momento —continuó Medusa—. Tomen su decisión, Alecto los espera para llevarse a Percy Jackson y destruirlos a ustedes. Yo solo les estoy ofreciendo una comida caliente.
Percy se detuvo a considerarlo, lo cual podía llegar a parecer tonto, pues Allyn fue el primero en reaccionar. Él caminó hacia Medusa con la mirada lejos de ella, arrastrando a Percy con él. Annabeth lo llamó entre gritos bajos y ofendidos, más no recibió respuesta alguna. ¿Quiso cuestionárselo? Claro que sí. Si aquella era realmente la medusa de los mitos e historias, Percy tenía más de una razón para creer que Allyn había enloquecido al caminar con tanta calma junto a esa mujer.
—Adelante, querido. —Medusa abrió la puerta para él, Percy pasó después—. Deben estar hambrientos.
—Lo estamos —asintió Allyn.
Medusa rio dulcemente.
—Dejé algunos aperitivos en la mesa, coman lo que deseen —señaló—. Hay algunas latas para el sátiro también.
Grover y Annabeth entraron después. Los ojos del sátiro se iluminaron al ver la cantidad de latas que Medusa había acomodado en un plato para él. Se sentó en la mesa antes que el resto y colocó dos enormes piezas de pollo en su plato también.
—¿Qué les sucede? —Annabeth golpeó la mesa—. ¡Podría estar envenenándolos!
Percy observó primero a Grover y luego a Allyn, echándose a reír con este último. Allyn había tomado una tarta de uvas y cerezas con merengue e hizo un intento inútil de meterla por completo en su boca, manchando parte de sus mejillas con la mermelada de la fruta. Percy acortó la distancia entre ambos y limpió su mejilla con el pulgar.
