Me quede perplejo ante lo mencionado, acaso el hermano de Hyunjin no había muerto?. Que hacía este aquí, acaso revivió o como.
Me acerqué a Jinnie bajo su atenta enojada mirada.
-Tu debes ser el príncipe, Felix-pronunció para yo asentir-Soy Sam, un gusto-dijo acercándose y extendiendome su mano en forma de saludo. Sin embargo su hermano, se puso frente a mí negándole el saludo.
-Que haces aquí-preguntó con disgusto Hyunjin-Recuerdo muy bien que desapareciste sin dejar rasto y ahora te apareces así como así.
-Cuando atacaron a los pinkles, yo escapé cuanto antes-se refirió a aquellas criaturas que los acogieron en el bosque-Me alejé de todo el mundo, desde hace bastante años vivo alejado de la sociedad, vengo del oeste.
Podía notar como Hyunjin dudaba de su respuesta pero igual volvió a preguntarle.
-Que haces aquí.
-La noticia que te estabas por casar con un príncipe llego muy lejos, hasta debajo de las piedras se podía escuchar eso-dijo riéndose-al fin de cuentas, vine a felicitarte hermanito.
-Bien, aceptó tus felicitaciones, ahora marchate-demandó chasqueando para que un guardia se acercará.
-Tan rápido vas a echarme-pauso mirandonos a los dos-Acaso no me invitarán a su boda.
-N..-lo interrumpí.
-Claro que sí, como hermano de Jinnie puedes estar-dije sonriendole, en cambio Hyun me miro devuelta entrecerrando un ojo.
-Gracias preciosura-se escuchó un pequeño gruñido de Hyunjin-No puedo creer como alguien como tu, puede convivir con una bestia como él. En fin, viaje mucho para llegar, me gustaría una habitación y poder descansar.
-Jeongin!-llamó Hyunjin-Ve a darle un cuarto donde se quedé.
Dicho esto, Jeongin guió a Sam por unos pasillos para luego perderse en la oscuridad.
Finalizado esto, mi pareja tomó mi mano y me jaló hasta el cuarto, podía notar como estaba enojado, ya que al ingresar me soltó bruscamente.
-Oye que te pasa.
-Una maldita cosa te pedí Felix, una sola maldita cosa, y no pudiste ni siquiera esperar-gritó frustado para apoyarse en la cama con sus manos tapando su cara.
-Lo siento si, solo me preocupe-dije tomando asiento a su lado-por que estas enojado.
-No me agrada para nada que este aquí, justo apareciendo días antes de nuestra boda verdad.
-El dijo que escuchó sobre esta, además es tu hermano, no era que lo extrañabas.
-Si pero, el muy descarado armo un alboroto al entrar y...
-Comprendo lo que sientes, estas frustado que aparezca después de años verdad-pase mi manos sobre la espalda de Jinnie dándole que caricias.
-Puede ser...
-Bueno no te preocupes, descansemos ahora y mañana arreglas todo lo que tengas que arreglar, te quiero sí, descansa-finalicé dandole un beso para volver a dormir sobre el cómodo colchón.
A la mañana siguiente, cuando los cuervos empezaron a graznidar, yo solo me levanté para comenzar un nuevo día.Últimamente a Oliver lo estaba cuidando Jisung para que yo pudiera organizar el casamiento que pasaría en tan solo tres días.
Ya había elegido la decoración y el lugar, sería en el gran jardín y su temática sería de colores dorados.
Tan solo quedaba probarme mi vestido, el cual lo haría mañana.
Ahora me encontraba en una parte desusada del jardín prácticando con mi buen amigo, el arco. Hace bastante no lo usaba, pero mi puntería seguía intacta. Estaba dándole a pequeños barriles rotos que casi más le doy a Sam. El cual justamente pasaba por ese lugar.
-Es asombroso como lo dominas, pareces uno solo con el arco y flecha.
-Gracias-dije para poder continuar practicando. Pero su hermano seguía ahí, mirandome como si me estuviera inspeccionando.
Decidí irme para estar alejado de este, si Hyunjin llegaba a verme a solas con su hermano, no se que pasaría.
Al entrar al palacio ya había gente decorandolo de tonos dorados, mi padre se encontraba diciendoles donde poner cada cosa y en cambio Jisung estaba hablando entre momentos con Minho. Algo me decía que en un futuro serían una pareja, si es que ya no lo eran.
Pase por todos los pasillos hasta las escaleras y subí de nuevo a mi recamara, Hyunjin seguía durmiendo luego de la intensa noche, yo sin embargo quise ir al balcón de la habitación a apreciar las vistas.
El horizonte deslumbraba con su belleza, el cantor de los pájaros lo acompañaban. Era tan hermoso que me quede perdido en este, pero al mirar a mi precioso jardín, detrás de un pino vi a Sam, pero no estaba sólo, si no que estaba prácticando con su espada dando golpes a la madera.
Me quede mirándolo fijamente sus acciones que derepente unas manos largas recorrieron mis caderas tomándolas.
-Apreciando las vistas?-preguntó Hyunjin dejando pequeños besos en mi cuello.
-El atardecer es muy bonito.
-No tan bonito como tu, pequitas.
Ante esto dicho me di vuelta y le di un profundo beso, pero entremedio de este el estómago de Hyunjin gruñó en señal de hambre.
-Creo que tu estómago quiere algo-pronuncie divertido viéndolo separarse de mi.
-Ire comer un poco de lo que quedó del almuerzo-dijo para darme una última sonrisa y salir en busca de su comida.
La brisa golpeó mi pecho y mire otra vez al horizonte hasta que recordé algo, o más bien a alguien. Baje mi mirada para aquel pino pero Sam ya no estaba.
♚Graciass por leer, acuérdense de dejar su estrellita☆
ESTÁS LEYENDO
𝓔𝓵 𝓻𝓮𝔂 𝓭𝓮 𝓵𝓪𝓼 𝓽𝓲𝓷𝓲𝓮𝓫𝓵𝓪𝓼-ᴴʸᵘⁿˡⁱˣ
Fantasía𝐄𝐧 𝐞𝐥 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐁𝐚𝐬𝐟𝐢𝐞𝐥𝐝, 𝐚𝐬𝐜𝐞𝐧𝐝𝐢ó 𝐚𝐥 𝐭𝐫𝐨𝐧𝐨 𝐮𝐧 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐡𝐞𝐫𝐞𝐝𝐞𝐫𝐨, 𝐞𝐥 𝐩𝐫í𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐋𝐞𝐞 𝐅𝐞𝐥𝐢𝐱. 𝐌𝐞𝐝𝐢𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐞𝐥 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐞, 𝐬𝐮𝐜𝐞𝐬𝐨𝐬 𝐞𝐱𝐭𝐫𝐚ñ𝐨𝐬 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐧 𝐞𝐧...