Con tan solo esas palabras, mi piel se erizo dejando mis pezones más duros de lo que estaban.
Allí se encontraba él, ya despojando tan solo la parte superior del traje.
Sin pedir permiso quedó enfrente de dónde estaba acostado, y este lentamente empezó a acariciar mis muslos apretandolos. Se quedo un rato en eso hasta que sus traviesas manos se escabulleron en mi corto vestido.-Te vestiste asi para mi, pequitas?-murmuró escaneandome con detenimiento.
-Si...-trague suavemente haciendo que mi manzana de adán suba y baje delicadamente.
-Estás precioso...-fue lo último que susurró antes de comenzar—Tan preciosamente mío y solo mío.
—Solo tuyo...
Frente a esto, él empezó a quitar lentamente el vestido indicándome que me sentará y logrará sacarlo pasándolo por mis brazos para luego tirarlo lejos y volver a recostarme solo con aquella lencería, el tan preciado collar de oro con la esmeralda y la joyería de perlas.
Hyunjin de nuevo bajo sus manos pero a mi cadera para luego empezar a dar un extensa lamida desde mi pelvis hasta mi clavícula dejando chupones en esta.
Solo con este gestó ya empecé a emitir leves gemidos soltandolos al aire.
Jinnie continúo dejando esas marcadas marcas sobré mi blanca piel para luego dirigir su mano a mis pezones y lamberlos con suma delicadeza, como si estuviera desgustando algún postre.
Sin intención alguna mi cuerpo reaccionó y empecé a pegar mi pelvis a la de Hyunjin.
-Ya estas tan apurado y recién empezamos-Pórtate bien y deja que haga mi trabajo-pronunció ante mi oído.
Una vez que termino de degustar, bajo volviendo a lamber mi cuerpo hasta donde estaba mi fina lencería.
Jinnie con todo el tiempo del mundo sacó con sus dientes lentamente aquellas bragas blancas que hacían juego con mi lechosa piel.
Al apenas dejarlas hasta mis rodillas, acercó su cara a mi parte jamás tocada por nadie. Una ladina sonrisa apareció en su rostro al levantarlo para mirarme desde ahí abajo. Parecía un hambriento dragón apreciando a su indefensa presa.
Con tan sólo su lengua empezó a hacer maravillas, estaba otra vez lamiendo mi impaciente entrada dejando saliba en esta para adentrarse profundamente con su larga lengua.
Una corriente paso por todo mi cuerpo haciendo que tomé una gran bocanada de aire trantando de controlarme. Mi miembro ya estaba empezando a palpitar y él tan solo esta jugando conmigo.
Una pequeña gota de pre-semen se hizo visible mojando un poco su cara. Pensé que iba a molestarse, pero este tan solo tomó aquella sustancia con sus largos dedos y sin pensarlo empezó a acariciar mi agujero.
Mi cuerpo ya necesitaba más. Y perdiendo mi cordura le dije;
-Jinnie-ee, necesito tu ayuda-pronuncie súplicandole con mi boca entreabierta.
—Lo que ordenes, su majestad.
Cada vez su dedo aumentaba la profundidad en mi cavidad logrando que me contrajera ante este.
-Mueve tu pelvis de arriba a abajo mi vida, complacete a tu gustó-ordenó.
Y cómo el dijo, lo hice, él metió otro dedo para dejar su mano quieta y dejarme autocomplacerme a mí mismo pero aunque daba todo de mí, algo me faltaba para sentirme completo.
-De en serio te necesito, por favor-ya no sabia que más suplicar para que lo haga.
-De en serio eres tan putita para querer aún más-dijo agachandose a mi oído-entonces luego no llores cuando no puedas más, por que haré todo lo que me pides, te complacere, esposo mío.
![](https://img.wattpad.com/cover/363397293-288-k416709.jpg)
ESTÁS LEYENDO
𝓔𝓵 𝓻𝓮𝔂 𝓭𝓮 𝓵𝓪𝓼 𝓽𝓲𝓷𝓲𝓮𝓫𝓵𝓪𝓼-ᴴʸᵘⁿˡⁱˣ
Fantasía𝐄𝐧 𝐞𝐥 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐁𝐚𝐬𝐟𝐢𝐞𝐥𝐝, 𝐚𝐬𝐜𝐞𝐧𝐝𝐢ó 𝐚𝐥 𝐭𝐫𝐨𝐧𝐨 𝐮𝐧 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐡𝐞𝐫𝐞𝐝𝐞𝐫𝐨, 𝐞𝐥 𝐩𝐫í𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐋𝐞𝐞 𝐅𝐞𝐥𝐢𝐱. 𝐌𝐞𝐝𝐢𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐞𝐥 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐞, 𝐬𝐮𝐜𝐞𝐬𝐨𝐬 𝐞𝐱𝐭𝐫𝐚ñ𝐨𝐬 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐧 𝐞𝐧...