Un Lugar Especial.

6. Nervios.

Iba a hacer algo diferente.

En estos últimos días no había salido de su casa, más que nada porque sus pasatiempos estaban ahí mismo pero eso no era necesariamente una excusa.

Se.. sentía más tranquilo estando en su hogar, además de que.. no sabía porqué pero siempre que salía de su casa se topaba con una situación peculiar.. como cuando se encontró con Lupa o cuando vió a Liby e intentó "ayudarla", realmente no sabía qué decir. No sentía que le hubiera ayudado.. al contrario, sintió que solo empeoró las cosas con todo lo que hizo.. a lo cual, piensa que de ahora en adelante cada que quisiera ayudar a una de sus hijas.. intentará hacerlo de una forma.. común.. como un verdadero padre lo haría, nada sería raro a partir de ahora.

O bueno.. eso intentaría, siempre que se propone algo termina pasando lo contrario, y.. digamos que eso era algo continúa pasándole hoy en día.. cómo sea, intentaría hacer todo bien.

No podía ser tan difícil, pero de momento, se concentraría en salir de su casa.

Centro comercial de RW

¿Recuerdan lo que dijo anteriormente?, pues bueno.. esto le pasaba por hablador, dando un muy pequeño resumen.. y para que se den una idea, ¿Cuáles eran las probabilidades de que Justo en el momento que quería salir solo.. apareciera una de sus hijas?, si, eso pasó. Su rubia hija Loan.. estaba en la puerta de su casa cuando estaba saliendo.. y, la verdad.. no quería dejarla sola, por lo que se la llevó con él, y no se estaba quejando por estar con su hija, al contrario.. se alegraba de pasar tiempo con ella aunque.. esto hacía que se pusiera a pensar cuanto estuvo esperando ella en la puerta, de antemano sabe que a Loan no le gusta molestarlo..

Y sabiendo lo tímida qué es.. esperaba que no llevara mucho tiempo ahí.

- ¿Quieres qué te compre algo cariño?, traje suficiente dinero para hacerlo, ya que estás aquí conmigo, me gustaría que la pasáramos bien.. o si quieres seguir viendo, bueno eso también está bien, yo aún no sé qué compraré.. llevo bastante tiempo sin salir.—Esto lo decía con honestidad, a no ser de que fuera a comprar un cómic, o tal vez algo que le había gustado específicamente, no salía mucho de casa, se le había aconsejado mantenerse tranquilo, algo que no le molestaba en lo absoluto.

- B-Bueno..—Jugando con sus dedos— me gustaría q-qué me compraras un v-videojuego.. salió hace un mes y-y no he tenido tiempo de i-ir a comprarlo.. y no me t-traje dinero ya q-que pensaba que pasaríamos el r-rato en tu casa..—Dijo un poco nerviosa, no quería ser una molestia para su padre, pero.. tampoco podía desaprovechar la oportunidad de que le compraran un juego, digamos que.. si bien tiene sus medios para hacerlo, en estos momentos no tiene dinero.

- Ohh, de acuerdo, solo dime cuál es y te lo compraré, me gustaban mucho los videojuegos cuando era joven.. pero creo que a partir de los 20 años dejé de jugar, mi vida había cambiado bastante y ni siquiera me di cuenta—Esto diciéndolo porque fue justamente a esa edad donde muchas cosas empezaron a suceder en mi vida, y.. bueno, solo había que pensar un poco para saber qué es lo qué pasó, pero hey, quiere mucho a sus hijas.

- E-Está bien, vamos por aquí.. es una d-de mis tiendas favoritas para c-comprar videojuegos..{entre otras cosas}, tal vez t-te guste algo de la tienda, tiene u-un poco de todo.. peluches,figuras,pósters,ropa y m-mangas..—Se sonrojaba un poco al decir aquello último, sabe que no es una persona precisamente sana, pero.. las cosas que leía por internet, bueno.. digamos que algunas le gustaban, en especial.. cierta categoría, era su favorita.