Un Lugar Especial.

16. Genialidad.

Era un poco obvio.

Y tal vez a algunos no les gustaría pero era hora de que hablara de.. su trabajo, realmente no es algo muy interesante si tiene que ser honesto, aunque le daba la sensación de que eso ya lo había dicho antes, cómo sea, el punto no era ese.

Después de llevar un estilo de vida tan alocado, pensaba que un ambiente tranquilo era lo que necesitaba, y si bien en los hospitales no siempre se está tranquilo, al menos la zona donde trabaja si lo era, además de que eran contadas las veces donde vió cosas graficas, por lo que.. si, le agrada su trabajo. Realmente no suele platicar mucho con nadie, más que nada porque no hay nadie con quién platicar, al principio era un poco extraño pero conforme el pasar de los días fue aceptándolo, a veces hablaba con alguna compañera de trabajo, o una de sus hijas que venía a visitarlo así que no estaba tan mal.

Nunca ha hablado con ninguno de los que llegan para ser atendidos, a veces preguntándose porqué las personas hacían cosas estúpidas, luego recuerda cierta etapa de su juventud y lo entiende en cierta medida, ya cuando ve adultos haciendo tonterías.

Prefiere ahorrarse su comentario, es mejor así.

Hospital de RW

Fue a comprar una soda, a la máquina expendedora, obviamente la prefería fría pero.. tampoco saldría de las instalaciones solo para comprar una a la temperatura que le guste, a veces hay que conformarse con lo qué hay, aunque fácilmente se podría salir del lugar. Cómo sea, ha aprendido desde hace tiempo que no siempre hay que hacer un gran esfuerzo por los placeres momentáneos, ya que.. suelen ser, pues eso, momentáneos, y si bien podían ser repetidos, con el paso del tiempo pierden su encanto, así que.. tomaba su soda para después irse, abriéndola y dándole un trago.

Así procedió a irse directamente a continuar con su trabajo, iba viendo hacia otro lado así que no se fijaba si alguien venía enfrente suyo.. y.. teniendo en mente su suerte, era obvio que así era, chocándose con una persona, de milagro no se derramó su soda.

- Lo siento mucho.. estaba distraído pensando en algo que no me fijé por donde iba.. ¿Te encuentras bien?—Dijo mientras la ayudaba a levantarse— gracias al cielo.. me alegro de que estés bien, una vez más pido una disculpa, estaba.. muy sumido en mis pensamientos—Y estaba siendo completamente honesto, a veces cuando piensa mucho en algo se termina distrayendo y por ende no pone atención a lo que le rodea, escuchando como su contraria le decía que no había problema, de paso observándola.. y wow, se veía linda.

- Agh.. no te preocupes, no me golpeé en la cabeza así que ya es ganancia, además de que estaba pensando en un amigo, le rompí una guitarra en la pierna y vine a ver cómo estaba, afortunadamente no me demandará pero.. aún así tengo que pagar la guitarra ya que solo me la estaba prestando..—Decía mientras se quitaba la bandana de su frente , viéndose su cabello desordenado, a lo que luego peinaba con su mano su cabello volviendo a ponerse la bandana, sacando un espejo de su bolsillo trasero, haciendo un gesto de rock con su otra mano.

Lincoln veía detenidamente a esta mujer, le recordaba a alguien.. aunque no sabría decir a quién, describiendo su aspecto para la gente que observa su vida, además de la bandana en su cabeza, tenía perforadas las orejas, unas pecas en su rostro, y su cabello era un tono.. peculiar de castaño.

Su ropa consistía en un chaleco verde jade junto con una camiseta rosa de alguna Banda de rock que no le cubría el abdomen y que en estos momentos no podía identificar, además de unos jeans azul claro algo.. apretados, finalizando con unos Converse negros con algo de uso.