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Espeluznante.
Ese era el único sinónimo que podía usar los dos nuevos semidioses ante la situación de vida o muerte que habían vivido al escapar del autobús cuando la misma furia que los atacó en el museo y que vieron pulverizarse volvió para vengarse.
¿Como era eso posible?
—Si permanecemos aquí en la naturaleza ¿cómo encontraremos un teléfono?—Soltó Percy al aire mientras llevaban más de 15 minutos caminando por el bosque sin rumbo alguno.
A ese punto estaba dispuesto a llamar un uber para que los llevara directamente al inframundo, ahora se preguntaba si aceptarían el pago en dólares o dracmas.
—¿Para qué necesitamos uno?—Preguntó Annabeth confundida para girarse hacia el desgreñado chico que observaba como Rhea miraba todo a su alrededor con admiración.
Amaba la naturaleza, siempre se imaginó que en su otra vida fue una princesa que podía hablar con los animales como Giselle, Cenicienta o Blanca Nieves ¿en esta vida también podría?
—Para llamar al campamento, para conseguir ayuda—Respondió obvio el hijo de Poseidón, a ese punto se cuestionaba si él no era hijo de Athena.
—No necesitamos ayuda, estamos bien—Corrigió la morena sin dejar de caminar y Percy negó con burla.
Genial.
—¿Estamos bien?—Cuestionó Percy con ironía, estaba molesto—Ni si quiera llegamos a Trenton y estamos vagando por un bosque, no sabía que había bosques en Nueva Jersey... oh, ¡Casi dejas a Rhea en la estación!—Exclamó al recordar como su mejor amiga tuvo que pedirle al conductor abrir la puerta cuando el autobús casi se marcha sin ella.
—En primera, creí que la princesita ya estaba con ustedes—Se defendió haciendo que Rhea se encogiera de hombros, quizás si no se hubiese tardado en hablar con el señor de las muestras, se hubiese encontrado con Annabeth en la caja en el tiempo estimado, su culpa.
Percy soltó una risa irónica, por supuesto.
—Segundo, fuimos enviados en una misión para el Oráculo, por los dioses ¿Pensabas que sería fácil?—Inquirió Annabeth ignorando el hecho que el niño seguía molesto con ella, no le importaba, no fue su culpa—Se supone que sea difícil. Por eso solo eligen a ciertas personas. Si llamamos al campamento, es como decir que elegirnos fue un error
—Me parece perfectamente bien eso, todos cometemos errores—Se atrevió a decir Percy con gracia y desinterés—Yo siempre cometo errores
Rhea se quejó.
¿Errores?
—Oh, vamos... sabes que no me gusta equivocarme PJ, apoyo a Anni...Annabeth en esto—corrigió la castaña al ver como la susodicha se volteaba hacia ella cuando supo que intentó llamarla "Annie" por segunda vez en el día
