Amor de la nada (Milo Manheim)

CAPÍTULO TREINTAYUNO

Al día siguiente Milo tubo que regresar a Texas, ya que tendría que acabar algunos exámenes que tendrían, no faltaba mucho para el periodo de vacaciones en verano.

Antes de irse, prometió venir el vacaciones para pasarla con ella en toda esta estancia.

...

Una vez que llego a su casa, dejo cerrar su puerta detrás de ella, viendo todo como estaba, en silencio y sola, de nuevo.

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Me sentía sola de nuevo, cada vez que Milo se alejaba de mi, me felicidad se iba con el, pensaba en como poder estar más tiempo con el.

Pero solo haría más problemas, tengo que dejarlo hacer su vida en Texas... eso significa dejar de hacer la mía.

No me gusta depender de él, lo amo, pero no quiero depender más de nadie.

Pensé en hacer cosas que me gustan sola, como escuchar música.

Pero hasta eso me recordaba a él, solo, quiero estar bien para por fin confesarle lo que siento, claro, antes de que alguien más se gane su corazón.
...

Me sente el suelo de mi habitacion a escuchar música, puse mi playlist, y digamos que no me ayudo de mucho, solo pasaban canciones que le encantaban a Milo como a mi.

Solo me hacia recordar más cuando todavía estaba aquí, cuando podía estar con él, cuando estaba empacando, fue en el momento donde me rompió el alma.

Ya no sabia como hacerle para poder seguir con mi vida, el era una parte clave en ella, y se a ido.

Todo el tiempo me daban bajones super horribles, pero esta vez, toque fondo.

...

Me encontraba en mi habitación acostado escuchando música hasta que escuche mi celular y contesté enseguida al ver el nombre de ___ en la pantalla.

- Hola ___

- ...H-hola, este... Ryan

Se le escuchaba algo entrecortada la respiración, esto a Ryan le empezó a preocuparse porque era muy notorio y frecuente, pero no normal en ella.

- Ohh, ¿sucede algo ___? - pregunto sin saber lo que le esperaba.

- Creo que... acabo de hacer una estupidez -

...

Maneje rápido hacía su casa, por suerte no quedaba muy lejos de la mía, pero con lo que me contesto, no era nada bueno.

Sonara o no muy directo, la conozco, ¿Porqué tenía Milo que irse?

Llegue tan rápido como pude y abrí la puerta viendo el escenario.

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Ryan abrió la puerta, vio todo normal, hasta ver a ___ a la par de las escaleras, con un pedazo de lata de Cola rota, vio sus brazos.

Estos chorreando de sangre, no tan escandalosamente, pero no tanto como su rostro, se notaba destrozada.

Sonreía mientras lloraba, al parecer, ya no sabia ni si quiera que sentir, felicidad por sacar todo lo que sentía dentro de ella.

O mal por todo el dolor que tenía en sus brazos por no tenerlo en la mente y en el corazón.

- ... Ryan, perdón, yo- el corrió hacia ella cargándola hacia su habitación, fue por vendas y desinfectante para curar sus cortadas.