UN SUSPIRO - Country Humans.

~Ave de Paso~

LA GRAN RUSIA (Con URSS)

Al llegar a su territorio, escupió sangre sobre la tierra y dando pasos fuertes ingreso a su oficina para aislarse de todos. Antes de poder explotar de ira, una pequeña mariposa blanca reposo sobre su hombro. Sus puños temblaron, no iba a admitir que le temía. . . Así que con hostilidad golpeó una pared provocando que la mariposa se fuera. Su decepción era superior a su ira, conociendo lo inmaduro que podía ser Rusia lo despojo del cargo de sucesión sin predecir que terminaría por quebrarlo. El no saber como poder controlarlo le frustraba, alguien tan rígido como él jamás podría dejar fluir a alguien como su hijo.

Encendió su cigarro y comenzó a fumar, intentando nublar sus pensamientos y buscar la solución precisa para la rebeldía del ruso. . . No pretendía matarlo, aún no. 

Soldado: Jefe, han reportado el robo de más de una docena de la nueva generación de armas. Requerimos que autorice-

URSS: ¡¿Qué?! ¡Voy a matarlos a todos!— A lo lejos sonó unas sirenas de emergencia que anunciaban el inicio de un simulacro en el hospital central—¿Se ha programado un simulacro hoy?

Soldado: No Jefe, tal vez es una emergencia por robo, ya que no es la alarma para solicitar bomberos ¿Mando una sección?

URSS: ¡Es una orden! Y manda a "Tití" exclusivamente para traer a mi hija.

Todos se movilizaron con velocidad mientras que URSS pensativo veía el mapa, imaginándose que es lo primero que podría hacer su hijo tras ser exiliado. . . Su mente se iluminó, sin perder un segundo más hizo una llamada. . .

(Con Cuba)

Se camufló entre los doctores, quienes apenas habían recibido la noticia de la expulsión del cubano, para poder ingresar sin problemas. Mantenerse dentro era el reto, activar las alarmas de simulacros le daría tiempo para evacuar la zona junto con la hermana del ruso. No solo iba por ella, en su laboratorio se mantenía congelados sus intentos de cura del covid que podría continuar desarrollando en su territorio.

Cuba: ¡Aquí! ¿Cómo guardo todo? La jugada está apretá.— sujeto los tubos de ensayo y con cuidado los guardo en una mochila especial.

La puerta que intentó cerrar con seguridad fue abierta por alguien, de inmediato se escondió y esperó. Los pasos del desconocido eran pausados, débiles y suaves. Un quejido lo alertó, con curiosidad se asomó. Se trataba de Finlandia que había caído al piso intentando buscarlo.

Cuba: ¡¿Chica?!— rápido la tomo en brazos y la sentó intentando revisar que estuviera bien, pero la joven no soltaba su pañuelo blanco, el cual estaba manchado de sangre.

Finlandia: Esto- estoy bien, Cuba sabía que vendrías. . . Antes de que te transfieran, me gustaría que fueras conmigo a ver un show— interrumpida por la tos intento calmar al cubano que preocupado la veía, intentando mantener una sonrisa lo veía— ¿Irías conmigo?

Cuba: Aguanta un mes. . .—limpió la sangre de sus labios notando su color pálido, suavemente contemplaba la hermosa piel de su rostro— ¿Por qué eres tan hermosa como una flor Frangipani?

Sacó una jeringa y pensativo vio sus tubos de ensayos. . . Tal vez podría darle más tiempo de vida a Finlandia si ponía aprueba en ella la cura que había desarrollado o tal vez no. . . Temía por cometer un error.