Ashton8 de mayo: El día que Andy se desmayó en la cabaña.
....
Verla de pie, pálida y ojerosa, cerca de la ventana, hincha mi pecho. Me llena de alegría verla despierta.
Aunque no esté del todo bien.
Andy...
Su nombre quema.
Mi lengua se muere por pronunciarlo. Quiero correr y tocarla, pero temo romperla si lo hago.
—Por favor —pido en una suplica, pretendiendo sonar tranquilo, queriendo fingir que no me duele su presencia. Que cada día que pasa Andy se aleja de mí—. La próxima vez, por lo menos haz una nota antes de irte de esa manera. Vas a matarme un día de estos.
Es tan pequeña y está a tan escasos pasos de mí.
—Lamento arruinar el mejor fin de semana que prometiste —dice, su semblante es triste y sus ojos hinchados son claro signo de que estuvo llorando.
Me acerco con rapidez, la tomo de las mejillas y la beso. Quiero saber si realmente esta de pie frente a mí, si puedo tenerla en mis brazos...
Si sigue aquí. Oh, como duele una alegría a medias.
Sus labios son cálidos y suaves como siempre.
—Te extrañé —Sí, sí que lo hice—. Por favor no vuelvas a irte de esa manera.
No te vayas nunca, amor mío.
.....
10 de mayo
Visitar mi antigua casa se siente extraño. Incluso el aire que respiro lo hace.
No obstante, no puedo vivir huyendo y evitando las cosas.
Aunque es exactamente lo que hago con la enfermedad de Andy.
Hago sonar el timbre para anunciar la llegada de un extraño, la melodía resuena en el interior de la enorme mansión y una oleada de recuerdos me llena.
Lamento que seamos el desastre que ahora somos.
Padre no está en casa, salió de viaje y no regresa hasta el viernes. Parece que es la única persona con la que aún no hablaré.
Aunque no sé si quiero hacerlo.
—Joven Ashton —me recibe Tati, el ama de llaves, impresionada, una vez me ve de pie en el umbral.
Fue un largo tiempo.
—¿Mamá está en casa? —Ella me sonríe con calidez y se hace a un lado para hacerme pasar. Asiento y doy un paso dentro.
El interior luce casi igual a la última vez que vine. Las paredes siguen siendo azul rey y blanco.
El cenicero de papá sigue en el mismo lugar de siempre, junto a sus caramelos favoritos.
Todo es igual, lo único que cambió es la familia.
—¡¿Ashton?! —Giro sobre mis talones con rapidez, al reconocer la voz que grita mi nombre. Aunque no es suficiente mi rapidez, porque Matty prácticamente salta sobre mí, haciéndonos caer.
Por suerte, aterrizamos en el mueble en forma de L de la sala.
Él sobre mí y yo sin aire.
—También me alegra verte —mascullo sin aliento—. No respiro —dramatizo, pero mi hermano menor sólo se limita a abrazarme.
—Mamá va a enloquecer cuando te vea —dice.
Veo que no sabe que mamá está al tanto de que vendría. Que iremos a comer y que él está invitado.
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Antes del Cielo [Wattys 2024]
Roman d'amourAndy Coldwater vive un día a la vez. Una vida tranquila entre estudios, familia, libros y cero amor. Ella intenta tener su lugar en el mundo, aspirar a cambios positivos, convertirse en una escritora famosa, encontrar un buen esposo y quizá, por al...