Capítulo 61

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Tiene que ser un chiste.

—¡Hola, Andy! —Andrew se acerca a mí, dando saltitos y me envuelve en sus brazos. Lo recibo con el ceño fruncido, totalmente confundida.

Y no porque el mejor amigo de mi hermano no me haya abrazado antes.

Sino que esta vez lleva short cortos y música electrónica suena en medio de la sala de su casa.

Retrocedo al reparar en mi hermano, que lleva los mismo shorts cortos pero los suyos son rosas, Bryan y Lucas también están en la sala.

Y llevan la misma vestimenta.

Lucas me sonríe y Bryan sólo levanta su mano para saludar.

Tengo que huir de aquí.

Y cuando creo que puedo escapar, mi espalda choca contra el pecho de Ashton.

—¿Qué hacemos en casa de Andrew? —Es lo único que pregunto. Dios, que no sea lo que yo estoy pensando

—Pues hoy, preciosa, vamos a tachar otro punto de tu lista —explica, poniendo sus manos en mis caderas, ya sea para estabilizarme o para impedir que escape, sin inmutarse por la rara vestimenta que deja al descubierto las piernas de todos los hombres presentes.

Insisto, tiene que ser un chiste.

—Perdón por llegar tarde —mi vista viaja a la puerta principal, lugar por donde está entrando Carla, ¿qué hace aquí? ¿Acaso no la quieren en su casa?—. ¡Ashton! Que bueno verte. —Su mirada se ilumina al reparar en el chico rubio detrás de mí.

Pero rápidamente repara en sus manos y en el lugar exacto de mi cuerpo, donde están situadas.

Eso, querida, llegas tarde.

Alto, ¿qué rayos estoy pensando? Esto no es una competencia.

Pero si lo fuera, ella llegó tarde.

—Bueno—Me recompongo, alejándome a regaña dientes de Ash. Pero no me alejo lo suficiente—. ¿Qué punto vamos a tachar?

De pronto Carla da un saltito y vuelve a sonreír

—Traje la música que pidieron, ¿seguros que es apropiada?

—Pues claro que lo es —replica Andrew, poniendo sus manos en los hombros de Carla, pero ella se sacude y lo aparta. Este, derrotado, levanta las palmas—. En fin. Andy, querida, hoy vas a aprender el hermoso arte del perreo.

¿Qué demo…?

—Es todo —bufo—. Me largo.

Pero Ashton vuelve a detenerme de las caderas.

Y odio la emoción en mi cuerpo al tener sus manos sobre mí.

—Vamos, hermanita, tú lo pusiste en tu lista —dice Will y se lleva una mano al bolsillo de sus pantalones súper cortos y saca una hoja, que desdobla lentamente.

—Dime, por favor, que no tienen todos una copia de mi lista —Ashton me sonríe, culpable.

Dejo salir un suspiro y finalmente me resigno.

—… Aprender a hacer Twerk. —Termina de leer Will.

—Y supongo que Carla va a enseñarme —deduzco, mirándola buscar en la laptop las canciones.

—Ah, no, no, Andy yo también estoy aquí para aprender —dice ella, tímidamente.

—Entonces….

—Ay, querida —Andrew se carcajea con demasiada modestia, diría yo. Casi burlándose de mí y de mi ingenuidad—. Carla, pon la canción.

Ella obedece y una canción que he escuchado, pero no se quién canta, empieza a sonar por las pequeñas, pero ruidosas, cornetas de la computadora.

Antes del Cielo [Wattys 2024]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora