The theacher|| Kookjin

XXII

La noticia de la reconciliación entre Namjoon y Jin se propagó rápidamente entre su círculo social, alimentando una especulación frenética y un murmullo constante entre sus amigos y conocidos. Namjoon, con su habilidad para el carisma y la manipulación, se encargó de difundir la versión de que todo había sido un malentendido, una serie de circunstancias desafortunadas que los habían llevado a separarse, pero que ahora estaban más unidos que nunca.

Por su parte, Jin optó por el silencio, prefiriendo no discutir el tema con nadie, ni siquiera con sus amigos más cercanos. Su corazón estaba lleno de dudas y confusiones, pero no podía encontrar las palabras para expresarlas en voz alta. Se refugió en el mutismo, dejando que el rumor se extendiera sin intervenir para detenerlo.

Sin embargo, a medida que pasaban los días y las semanas, Jin comenzó a sentir el peso del vacío dejado por la ausencia de Jungkook en su vida. Extrañaba su risa, su compañía, incluso sus pequeñas peleas y discusiones sobre que película ver esa noche. Era como si un pedazo de su corazón se hubiera ido con Jungkook, dejándolo sintiéndose incompleto y solitario en medio de la multitud.

Jimin, siempre atento a los cambios en el estado de ánimo de Jin, notó la diferencia en su comportamiento cada vez que estaban juntos en fiestas o reuniones. Observó cómo Jin parecía perdido en sus pensamientos, cómo su mirada se desviaba hacia el vacío cuando creía que nadie estaba mirando. Pero por más que intentara sacarle la verdad a su hyung, Jin se mantenía firme en su silencio, negándose a compartir sus verdaderos sentimientos con él.

Así, en medio del murmullo constante y la especulación sin fin, Jin luchaba por encontrar su lugar en un mundo que parecía haberse vuelto del revés. Extrañaba a Jungkook más de lo que nunca hubiera imaginado, pero no sabía cómo hacer las paces con su ausencia. Era una lucha solitaria y dolorosa, una batalla que libraba en silencio mientras el mundo seguía girando a su alrededor.

Luego de una llamada del hospital, Jin sintió como si un valde de agua fría lo mojara. Habían llamado porque Jungkook había sido llevado inconsciente al hospital.

El corazón de Jin latía con fuerza mientras se apresuraba hacia el hospital, su mente llena de preocupación y ansiedad por el bienestar de Jungkook. Con cada kilómetro que pasaba, el miedo se apoderaba un poco más de él, temiendo lo peor mientras se aferraba a la esperanza de que Jungkook estuviera bien.

Al llegar al hospital, Jin se apresuró a preguntar por Jungkook, su corazón latiendo con fuerza mientras esperaba noticias sobre su estado. Finalmente, fue conducido a la sala de espera, donde un médico se acercó para informarle sobre la situación de Jungkook.

Jin escuchó en silencio mientras el médico explicaba que Jungkook había sufrido un golpe en la cara, pero que afortunadamente no parecía ser grave. Un suspiro de alivio escapó de los labios de Jin, su corazón palpitando con gratitud mientras agradecía al cielo que Jungkook estuviera a salvo.

Cuando finalmente pudo ver a Jungkook, su corazón se llenó de alivio y alegría al verlo consciente y relativamente ileso. Sin embargo, la preocupación aún persistía en sus ojos mientras observaba el moretón en la cara de Jungkook, preguntándose cómo había sucedido todo.

Jungkook, con una sonrisa forzada en el rostro, intentó restar importancia al incidente, asegurándole a Jin que no era nada, solo un accidente menor con un cliente del restaurante. Explicó que el cliente se había enojado porque su novia lo miraba y que las cosas se habían salido de control, pero que él estaba bien y que no había de qué preocuparse.

Sin embargo, a pesar de las palabras tranquilizadoras de Jungkook, Jin podía ver a través de la fachada, podía sentir la tensión en el aire mientras miraba a su amigo. Sabía que había más detrás de la historia, más de lo que Jungkook estaba dispuesto a admitir, pero por ahora, decidió no presionarlo más, optando por simplemente estar ahí para él en ese momento de necesidad.