S|| "Cuida tus espaldas Bill, porque en el espacio que dejaste, Tom y Hazel se acercaron más de lo que imaginabas, cambiando el curso de todo lo que creías seguro."
•Tom Kaulitz Fanfic
•La obra contiene lenguaje vulgar.
•Contenido +18.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Hazel Beckett.
Ingreso al aula de física, y noto la ausencia de Tom casi de inmediato, Sé que aún es temprano, asi que no descarto la posibilidad de que él, se presente. Quisiera no entrar a la clase, pero sinceramente ya tenía demasiadas faltas, por ausentarme estos días, que no quería seguir arriesgándome a que llamaran a mis padres, y bajaran mis notas.
Saco mi celular, y desenredo mis auriculares. Quería tener al menos una excusa para no saludarlo, si llegaba a presentarse, lo cual era lo más seguro. Aún quedaban unos cinco minutos antes de que llegara el profesor para impartir la clase. Quizá no vendría.
Enciendo la música, y selecciono la primera canción que aparece en la lista de reproducción. Y, cuando estoy a punto de descartar que se llegue a presentar, él ingresa al aula. Aparto mi vista de él, antes de que me descubra observándole. Le subo todo el volumen a la música, y finjo estar subrayando algo en el libro. De reojo, observo como deja su mochila en el suelo, y toma asiento a mi lado. Juguetea con sus manos, y veo que mueve sus labios. Coloco el celular en la paleta del banco, para que vea la razón por lo cual no lo escucho.
Muerdo mi labio, cuando se pone de pie, y se dirige hacia las bancas del final, con los que se lleva de la clase Y entre ellos, Ellie. Apago la música, y el profesor ingreso al aula. Me quito los auriculares de mala gana, y guardo todo en mi mochila.
─Buenos días, clase.─ saluda el Sr Thompson, observando como todos con prisa, toman sus respectivos lugares.
Me cruzo de brazos, cuando Tom toma asiento a mi lado. ─Al menos ahora ya no tienes esos auriculares.─ gruñe, entrelazando sus manos al frente. Muerdo mi labio por dentro, y no le respondo nada. ─Hazz, necesitamos hablar.─ dice, dejando escapar un largo suspiro.
─Bueno, ahora estamos hablando.─ murmuro, sin apartar mí vista del frente.
Lo escucho resoplar. ─Hablo, de una charla privada, donde pueda explicarte lo de ayer.─
─Ayer me lo explicaste, creo que ya lo tengo claro.─
─Por favor, Hazel, sé que quieres escucharme, así que, deja de comportarte de esta manera.─ gruñe, inclinándose hacia mí.
─¿De qué manera?─ formulo, tensando mi mandíbula.
─De esa manera.─ señala.
No digo nada. Me mantengo en silencio, y él por su parte hace lo mismo.
Las dos horas de fisica terminan, y doy gracias por ello. Comenzamos a guardar todo, para ir a la siguiente Todos están saliendo con prisa, Tom hace lo mismo, y yo por mi parte me retraso un poco. Por un momento creo que estoy sola, sin embargo lo descarto, cuando descubro al de trenzas, en el marco de la puerta, esperándome. Entra de nuevo, y cierra la puerta, colocándole el seguro.