S|| "Cuida tus espaldas Bill, porque en el espacio que dejaste, Tom y Hazel se acercaron más de lo que imaginabas, cambiando el curso de todo lo que creías seguro."
•Tom Kaulitz Fanfic
•La obra contiene lenguaje vulgar.
•Contenido +18.
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Hazel Beckett.
Mi risa inunda la pequeña sala. Enarca sus cejas tornando su rostro serio. ─¿Piensas que te creeré?─
─Tienes que hacerlo.─ Balbucea.
─No.─ le digo con firmeza, colocando mi mano en la cintura. ─No tengo por qué hacerlo, tú crees que después de todas tus artimañas por querer que termine mi relación con Bill, yo voy a creer una sola de tus palabras.─ Chasqueo la lengua. ─Estas muy equivocado, así que hazme un enorme favor y lárgate ahora mismo de mi casa.─ mi voz ya esta elevada a este grado. Él no se mueve, no se ve con intención de querer irse.
─La fiesta es este viernes, date cuenta por ti misma.─ murmura con pesadez antes de pasar por mi lado y salir con furia de mi casa.
─¿Quién era él?─ escucho preguntar a mi madre desde el marco de la entrada a la cocina.
─Nadie.─ Le respondo yendo con rapidez hacia mi habitación.
No creeria en nada de lo que ese chico me dijo, no tenía por qué hacerlo, sus menciones solo podrían ser una más de sus tantas falsedades que dice con tal de ver destruida la relación que mantengo con Bill. Sin embargo una pequeña parte, una muy demasiada pequeña parte, estaba en duda. Por lo cual mañana le preguntaría yo misma a Bill sobre la fiesta de este viernes.
Tom Kaulitz.
Cierro con malhumor el casillero sin importarme el gran estruendo que provoca, llamando así, la atención de varios de los chicos que me rodean en el pasillo de la escuela.
─Alguien no se levantó con el pie derecho.─ Murmuro una voz a mis espaldas. La verdad no estaba de humor para nada.
─Me levante con mis dos pies, idiota.─ Le respondo, dándome la vuelta para verlo.
─Uy.─Se rie, alzando sus brazos. ─Solo fue un comentario, no te enojes─ Ruedo los ojos. ─¿Es por Hazel?─ me cuestiona tomando más seriedad.
─Supongo.─Le respondo encogiéndome de hombros.
─No te creyó, ¿Cierto?─ puedo sentir su burla.
─Ella me creerá.─ Le aseguro tensando mis labios. ─Y ahora, si me disculpas querido Gustav, tengo que ir a Inglés.─
Lo dejo en medio del pasillo sin escuchar lo que tenga para decirme y me apresuro en ir al aula. Por el camino me encuentro con Georg, me saluda pero a la vez me detiene.
─¿Qué quieres?─ le pregunto sin paciencia.
─Advertirte sobre lo que sea que esté pasando entre tú y Hazel.─ menciona llamando mi atención. ─No querrás tener que enfrentarte a un Bill realmente molesto. Hazel es su vida y no dejaría que alguien como tú se la quite. Así que antes de que él se entere de lo que está pasando, aléjate.─ Tiene su mano en mi pecho.
