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CHAPTER TWO
PELEA

CHAPTER TWO❝PELEA❞

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Hazel Bekett.

Siento que quiero golpearlo, arrogante como él solo. Lo detesto tanto. Aprieto mis cuadernos más a mi pecho cuando salgo casi corriendo de la clase de fisica, no sin antes escuchar su estúpida risa en burla por mi mala suerte.
Arrojo fuertemente los libros a mi
casillero, dándole un fuerte golpe
del coraje. Por qué tienen que haber
pupitres dobles y no solo un banco
individual como las demás materias.
Quiero matarme, preferiría limpiar
toda la escuela a trabajar junto al
señor ego de Tom Kaulitz. Tallo
mi rostro con frustración.

─¿Todo bien?─ Escucho la voz de
Bill, a mis espaldas. Me abraza por
la cintura hundiendo su barbilla en mi hombro.

─No.─ Respondo sin voltear a verlo.

Tomo mis libros de cálculo, para ir
hacia la siguiente clase. Le regalo una sonrisa forzada y lo esquivo para ir al aula.

─Hey.─ Me detiene del brazo. ─¿Qué sucede?─ Pregunta, con
preocupación.

─Tu amigo es lo que sucede.─ Gruño,
soltándome de su agarre. ─Hoy hubo
cambios, y tu queridísimo Tom está a mi lado, somos compañeros en
laboratorio de física.─ Lo informo.

Me doy la vuelta para avanzar con
rapidez a la siguiente clase, dejando a Bill con la palabra en la boca.
Tengo que ver la forma de cambiar de lugar, no quiero tener que soportar a ese imbécil todo lo que resta del semestre.

(...)

Nos reunimos todos en el verde pasto que hay en el instituto. Me siento a un lado de Bill, recargándome en su hombro. Me regala una sonrisa pasándome mi bebida. Los chicos están bromeando y conversando sobre el día que han llevado.

─Has pensando en hablar con el
profesor.─ Dice Bill, cuando ve que no tengo muy buen rostro.
Sabe que estoy molesta por la cuestión de los cambios de asientos.

─No creo que logre convencerlo.─
Digo sin ánimos. ─Además, es una
regla dada por el director, lo única
opción que me queda es aguantarme.─

─Si Tom te molesta, solo dímelo.─ Me dice, sacando un cigarro de su
bolsillo.

─Hoy lo hizo.─ Le confieso,
alejándome un poco de su lado para
no tener que soportar el humo.

─¿Qué fue lo que hizo?─ Pregunta
con intereses, frunciendo un poco su
ceño.

Antes de contarle la maldad del tipo
ese, me veo en la necesidad de
preguntarle sobre algo que me tiene
preocupada desde que lei la nota
que el idiota de Tom pego en mi espalda.

Tomo un respiro y voy directo al
grano.

─¿Le has hablado a alguien sobre
nuestra vida íntima?─

Eclipse | T.K | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora