Nunca digas nunca (FirstKhaotung 🔞)

Capítulo 8

Khaotung

Corro, huyendo de él. Mis lágrimas empapan mi rostro y me las quito a manotazos, con rabia. Odio ponerme así. Yo ya debería haber superado a First, y aquí estoy, llorando como un imbécil, por alguien que jamás me quiso bien. Subo las escaleras de dos en dos, y sin darme cuenta, llego a la azotea de la universidad. Agradezco el sentir el aire en mi rostro. Me acerco al borde y me subo al murete. Observo a los estudiantes desde mi atalaya. Algunos corren a su siguiente clase. Otros charlan y ríen. Veo varias parejas tumbadas en el césped de campus, mientras se regalan mimos y besos y me siento miserable.

- ¡Joder! - maldigo. - ¿Por qué cojones ha vuelto a aparecer en mi vida? - exclamo mirando al cielo, aún incrédulo de mi mala suerte.

- Amigo, no te tires. No merece la pena - escucho hablar alguien detrás de mí.

- ¡Mierda! Me has asustado - le digo al chico que está sentado contra la pared.

Tiene una sonrisa de medio lado. Se ve a la legua que es un chulazo de manual. Tiene un largo flequillo que se abre a un costado de su frente. Sus ojos denotan que es vivaz y tiene un aura de macho alfa que no se aguanta.

Idiota.

Despacio se levanta y se acerca hasta mí. Me tiende una mano para que baje del murete. Me quedo mirando su mano, pero no la acepto. Me bajo por mis propios medios. Él, retira la mano despacio, sin dejar de mirarme a los ojos y eso me incomoda un poco.

- Gracias por no tirarte delante de mí. No sabría qué hacer... - me dice sin perder la sonrisa petulante que baila en sus labios.

- No voy a suicidarme - le ladro y empiezo a ir hacia la puerta. No me aguanto ni yo, como para aguantar a este cretino.

- Nadie se merece que hagas una tontería como esta - habla pausadamente, pero parece sincero.

- Te he dicho que no pensaba tirarme - gruño.

- Me alegro - sonríe. - Por cierto, me llamo Perth.

Me tiende la mano de nuevo. Rebusco en su cara alguna muestra de que me esté tomando el pelo, pero debajo de esa máscara, sus ojos parecen decir la verdad. Despacio, le doy un apretón de manos.

- Khaotung - contesto de manera escueta.

- Y dime Khaotung, ¿quién ha vuelto para perturbarte así? - me pregunta el muy descarado.

Estoy a punto de soltarle cuatro improperios y mandarle a la mierda cuando continúa hablando, interrumpiéndome.

- ¿Quién mejor que un completo desconocido para desahogarte? - sugiere.

Lo pienso unos segundos, dándome cuenta de que tiene razón. No puedo hablarlo con Gun y Book, y mucho menos con Force y Book. Me dejo caer y me tumbo en el suelo, completamente abatido.

Perth, me imita y en silencio, se tumba junto a mí, dándome tiempo a aceptar su oferta.

Suspiro pesadamente. Su oferta es tentadora, pero decirlo en voz alta va a ser demasiado doloroso y estoy harto de llorar. Mi nuevo amigo, que resulta ser mucho más empático de lo que aparentaba a priori, decide hablar primero.

- Aunque no lo creas, te entiendo perfectamente - gira la cabeza y conectamos miradas. - También hay alguien de mi pasado que ha vuelto para atormentarme - pierde la mirada en el inmenso cielo azul. - Yo lo tenía todo. Tenía al chico perfecto. Nos queríamos y éramos felices. Pero alguien de mi pasado le llenó la cabeza de mentiras. Lo más triste es que le creyó a él en vez de a mí, y me dejó - le fallan las palabras al final.

- Lo siento - le digo torpemente.

- Ya, bueno. En parte es culpa mía - se ríe sin gracia. - Digamos que yo era un Bad Boy que iba de aquí para allá, sin importarme nadie excepto yo mismo, hasta que conocí a Chimon.