Capítulo especial narrado por Leonor madre de Dasha.
Mi respiración sube y baja, miro mis manos llenas de sangre, por primera vez he hecho lo correcto, quizá nunca la querría pero tampoco le iba dar el gusto a él de matarla, estaba cansada de está mala vida y hace mucho el amor que sentía por él se fue, sus maltratos no los iba a permitir más.
— ¡Maldita perra traicionera! — me grita y lo miro con valor, sus oscuros ojos no me dan miedo, no ahora — ¡Me la vas a pagar puta! — yo le sonrio y eso lo enfurece más pero no puede hacer nada, dos policías lo sostienen y esta esposado.
— Espero te pudras en la cárcel Agustín — le digo en burla y los policías lo sacan de la casa, descansando por fin de ese mal hombre.
Observo a la joven destruida a unos metros de mí, hay cuatro paramedicos tratando de estabilizar su respiración con un aparato de oxígeno, su rostro está completamente golpeado, esto sí que dejará muchas secuelas en ella, tal vez no sobreviva esta vez.
— Señora, ¿usted es la mamá? — pregunta uno de los oficiales que antes había visto, no me gusta decir que soy la mamá, sin embargo, solo asiento mi cabeza — Necesito que firme esto para poder trasladar a su hija a un centro hospitalario — me tiende una hoja y yo lo firmo de inmediato — Muy bien, puede acompañarla en la ambulancia — lo veo y niego.
— No, necesito ir a colocar la denuncia a ese infeliz — le respondo.
— No se preocupe, con toda la información que nos dio y con lo que presenciamos podemos entablar la demanda inmediatamente hasta que la llamen a declarar, si tiene un abogado puede presentarse con él mañana temprano a la delegación para que solo firme los papeles y constatar la denuncia — me comenta — por ahora, su hija necesita de su compañía, con permiso — culmina y sale de casa.
Dasha pasa por mi lado, en una camilla, su cabeza va vendada, sus ojos cerrados, la sangre seca está en su labios, tiene un verde en su ojo derecho el cual se ve inflamado, creo que hasta una costilla le rompió segun escuche a uno de ellos, suspiro.
Me monto con ella en la ambulancia sin decir una palabra ni preguntar de más, no entiendo porque vino por su voluntad hasta acá, sabía muy bien que si regresaba esto pasaría.
¿Porque tomar esa decisión? Cuando se veía feliz con la vida que hasta ahora estaba llevando, ese hombre la tenía bien y nos amenazo hasta con la policía, Agustín tuvo miedo porque sabe que el profesor tiene muchas influencias en esta ciudad pero ganas no le faltaban de hacerle daño, cosa que estaba preparando, mas, no contó con que Dasha vendría primero a él.
Me decidí una vez salir por la puerta de la casa y dejarlos solos a tomar la primera iniciativa de mi parte, no porque me importara Dasha quería solo librarme de él.
Muy rápido fui donde la señora susana y llamé a la policía, luego de eso no entré de enseguida, me convenía más que lo cogieran con las manos en la masa por lo que tendría que esperar a que el acabará con ella un poco para así tener pruebas y que se refunda en la cárcel.
Sin embargo, nunca escuche gritos por parte de Dasha, algo que ella siempre hacía, ni quejidos, la señora susana intento entrar pero la detuve no quería que se metiera y simplemente me dio una mirada de decepción y se fue.
Pero la idea de ese silencio no era normal, entonces pensé que la estaba violando y eso era algo que no permitiría porque es su hija y da asco que se atreviera a eso.
Con mucho cuidado entré, sabía que por ella no podía hacer más nada pues se veía muy mal bajo de él, así que tome en mis manos una botella de vidrio que había en la mesa, fui hasta él y se lo partí en la cabeza, el cayó al piso con un chorro de sangre bajando por su nuca del cual se quejo, en la acción me corte un poco la mano pero no fue profundo, no le di tiempo de levantarse y una patada en su parte íntima cobro vida del cual también se quejó y rápidamente la policía irrumpió la casa.
Solté lo que tenia en manos y fui hasta Dasha fingiendo preocupación, un espectáculo digno para que recayera todo sobre Agustín.
Dije que él quería violarla y matarla golpeándolo en defensa propia para salvar a mi hija, ellos al ver la escena me creyeron y ahora por fin me he librado de esa vida de mierda.
Los minutos pasaron, llegando hasta la clínica donde la ingresaron, baje y más atrás la camilla con los paramedicos, llevándola a alguna parte aquí dentro.
Fui a facturación, firme unos papeles para que le hicieran lo que se debía, no se si podrían salvarla pero al menos mi letra en ese papel autorizaba que fuera así que hagan hasta lo imposible por mantenerla en pie.
Si eso pasaba, esperaba que no pasara por más cosas malas, es una joven que ha sufrido mucho.
Dejé una carta a la muchacha que me atendió por si se salvaba se la diera y sin más, salí de ese hospital.
Otra vez la abandone a su suerte, ella arruino mi vida y mi corazón jamás se lo iba a perdonar, no quiero tenerla cerca por más que ella quiera nunca la voy a querer y es mejor que me tenga lejos.
Cojo un taxi para ir a recoger mis cosas, firmar lo que tenga que firmar en la delegación e irme al fin de esta ciudad.
Hola, bueno es corto, hay que tener claro que la mamá de Dasha nunca la quiso y eso por más que ella quisiera no iba a cambiar y no era justo un perdón en la historia a alguien que no hizo nada por ella, fue una egoísta que solo pensó en salir bien librada...
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Te Quiero, Chiquilla
Teen FictionLeón Carvaggio es un hombre de treinta y dos años, un hombre frío, distante a todo lo que le rodea, trabaja impartiendo clases en la Institución Fund Nueva Granada, tiene una vida muy ordenada, es uno de los mejores profesores a nivel nacional, muy...