¡Una cocinita!

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Espacio común del edificio de Engfa – Sábado a la mañana

- ¿Puede colocar los juegos al fondo del jardín? No quiero que los niños anden correteando cerca de la mesa de tartas - Engfa estaba dando indicaciones acerca de cómo organizar las mesas y demás cosas para el cumpleaños de su hija – Y de paso dígale a la latina malhumorada que la necesito – la rubia había puesto a su amiga como encargada de los postres y Freen llevaba dos horas gritándole a cualquiera que se atreviera siquiera a echar una mirada a sus preciadas tartas. –Puffff – suspiraba agotada la fotógrafa. La semana anterior al cumpleaños de su hija había sido... intensa, por así decirlo.

Por empezar, después de la noche del "trágico" accidente del parque por el cual Charlotte fue declarada culpable y sentenciada a pasar la noche en su últimamente desalojado departamento, Engfa Waraha despertaba lista para iniciar su semana laboral con una imagen que la desestabilizó emocionalmente... La mismísima Charlotte Austin estaba durmiendo en su sillón. Pero no estaba sola, en sus pies se acurrucaba un pequeño Beagle y entre sus brazos se acomodaba una niña rubia idéntica a Engfa pero que cada vez se parecía más a Charlotte.

Durante el resto de ese día no pudo concentrarse en nada, no lograba enfocarse en su trabajo, no encontraba un lugar para meter todos los invitados al cumpleaños de su hija... no podía hacer nada. Lo único que su mente hizo fue divagar entre varias imágenes: su novia y ella, su novia y su hija durmiendo en el sofá como dos ángeles, su novia y ella en la cama un día domingo jugando con cinco o seis mini Engfa o mini Charlotte. La foto de una familia perfecta la persiguió durante todo ese día. Engfa quería a Charlotte a su lado para toda su vida y lo quería ya.

El problema fue que, al día siguiente, durante la segunda prueba del vestido de Freen y el suyo de dama de honor, a la rubia se le ocurrió la brillante idea de consultar su futuro con la latina, y recibió una respuesta que al parecer ya era común entre sus amigos "¿estás loca, borracha o qué?" Freen, no solo estaba opuesta a la idea de una numerosa familia, sino que pensaba que su amiga se estaba apurando demasiado. La artista se obligó a sacar esa imagen de su cabeza.

Pero Charlotte no ayudaba. Ese mismo día la morena jugaba en su estadio, y a pesar de que la jugadora insistió que Engfa, su hija y sus amigos vieran el partido desde el palco porque no quería que su rubia tuviera que aguantar las cosas que se dicen desde la tribuna, el grupo, liderado por Derek y Freen, no se dejó convencer y se sentaron en la misma fila del primer partido. La fotógrafa le aseguró a su novia que no tenía que preocuparse, pero como la morena no quería pasar otra noche sola en su departamento recurrió a las demostraciones públicas. Y por demostraciones públicas me refiero a que luego de que el locutor del estadio la presentara como "la estrella del equipo" y Charlotte saliera a la cancha lista para jugar, la deportista cruzo varias filas de las gradas para llegar a su novia, agarrarla de la cintura, levantarla y besarla al mejor estilo "¡OIGAN! MIREN TODOS, ELLA ES ENGFA WARAHA Y ES MI NOVIA" Este gesto no sólo hizo que Charlotte sumara puntos ante la JPDE, sino que hizo volver las imágenes a la cabeza de la rubia fijándolas aún más si era posible.

Obviamente esa noche a ninguna revista o diario le importó que Charlotte hubiera hecho 47 puntos rompiendo un récord absoluto en el club, la noticia era otra y los periodistas ya tenían su tapa para el día siguiente.

Los periodistas, otro tema que a Engfa no le sentaba muy bien. Ya no sólo hacían vigilancia en su estudio, sino que también se los encontraba en la puerta de su casa, en el colegio de Kara y hasta Freen se quejaba de haber visto uno que otro rondando por su vecindario. Sin contar que luego de la famosa declaración de amor pública de su novia los celulares de ambas chicas no pararon de sonar. Engfa recibió todo tipo de llamados, familiares, de amigos, empresarios, firmas que la querían para hacer negocios y hasta inclusive amenazas de distintas mujeres, una en especial le llamó mucho la atención porque la voz de la mujer era sospechosamente parecida a la de la maestra Kim.

Cuando, Donde y Como el Amor Quiera ❧ EnglotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora