30 de julio 1980
El viento susurraba suavemente a través de los árboles mientras la luna llena iluminaba el cielo nocturno. En el interior de la casa, Lily y James se miraban el uno al otro con una mezcla de anticipación y nerviosismo.
Lily, con su cabello rojo brillante y sus ojos verdes llenos de emoción, sostenía la mano de James con ternura.
Lily: -No puedo creer que pronto conoceremos a nuestro hijo- dijo con una sonrisa radiante iluminando su rostro. -Nuestro pequeño bebé-
James, con su característica sonrisa traviesa y sus lentes redondos ajustados, le devolvió la mirada con amor.
James:-Ya quiero tenerlo en mis brazos- dijo feliz
Lily: -Ya has pensado en el nombre?- dijo muy adolorida
James: -¿Qué te parece Harry?- respondió, su voz llena de emoción contenida.
Lily: -Harry Potter... ¡suena perfecto para nuestro hijo!- dijo emocionada
Mientras la noche avanzaba lentamente, las contracciones de Lily se hicieron más frecuentes y más intensas. James la acompañaba con palabras de aliento y caricias reconfortantes, prometiéndole que todo estaría bien. Fue una noche muy larga para ambos, ya que las contracciones de Lily no cesarían hasta el día siguiente.
31 de julio 1980
Finalmente, con un suave suspiro de alivio, el llanto de un bebé llenó la habitación. Lily y James intercambiaron una mirada de pura felicidad mientras les entregaban a sus dos pequeños: dos preciosos gemelos, un niño y una niña, envueltos en mantas suaves y cálidas.
-¿¡Son gemelos!?- exclamó Lily, con lágrimas de felicidad en sus ojos.
James sonrió ampliamente, su corazón lleno de amor y asombro.
-Los gemelos Potter- dijo James con orgullo, su voz resonando en la habitación. -Ahora debemos pensar en otro nombre- agregó, visiblemente emocionado y nervioso ante la idea de elegir un nuevo nombre para la bebé.
Lily asintió, su expresión algo nerviosa mientras consideraba sus palabras.
Lily: -No hace falta... yo... estuve pensando en que si en algún momento tuviéramos una niña, la llamaría Cristine...- confesó tímidamente, revelando un pensamiento que había guardado para sí misma durante mucho tiempo.
James la miró con ternura y le plantó un tierno beso en la frente, transmitiéndole así que todo estaba bien.
James: -Cristine es un nombre muy hermoso- afirmó con orgullo, repitiendo el nombre en voz alta. -Cristine Potter y Harry Potter- dijo una vez más, disfrutando del sonido melodioso que formaban juntos.
Pasaron algunos minutos y James jugueteaba con las manos de los gemelos, su rostro iluminado por una sonrisa juguetona. Sin embargo, de repente su expresión cambió, tornándose seria y melancólica.
Lily, notando el cambio en su esposo, se sintió inquieta. -¿Te pasa algo?- preguntó con preocupación.
James tomó una profunda inspiración antes de dirigirse a Lily con seriedad. -Debes prometerme algo, Lily. Escúchame, no estamos seguros en el mundo mágico. Corremos mucho peligro y quiero protegerlos. Prométeme algo...- dijo con tristeza en sus ojos.
Lily asintió, esperando la petición de James.
-No revelaremos esto a nadie. Hasta que estemos a salvo- comenzó James con determinación. -Haré todo lo que esté en mis manos para que nadie descubra que tenemos gemelos. No permitiré que les hagan daño- concluyó con ternura mientras los miraba, su compromiso reflejado en cada palabra..
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Bajo el manto de las sombras 🩶
FanfictionEn un rincón olvidado del mundo mágico, en las sombras de la historia, se oculta un misterio que podría cambiar el destino de una joven hechicera. Cristine Snape, hija de Severus Snape, desconoce por completo su verdadero linaje y el legado que lle...