Prov Cristine Snape
"Cristine... tu padre ya no estará contigo. ¡Estarás sola! ¡Corre!", continuaban resonando las voces de esa mujer en mi cabeza. Ya no me sorprendía escucharlas; de hecho, estaba un poco cansada de siempre escuchar lo mismo. Jamás había tenido sueños sobre mi futuro o cualquier otra cosa, gracias a mi mente.
Al despertar, di un salto al no encontrar a las otras chicas en la habitación. Noté que mi despertador no tenía pilas. "¿Acaso olvidé ponerle baterías?", pensé, intentando recordar. Decidí cambiarme y arreglarme rápidamente, ya que era mi primer día de clases.
"¡Genial! ¡Primer día y llegaré tarde!", pensé, enojada conmigo misma.
"¿Por qué no me despertaste, Grimble?" le pregunté a mi lechuza, pero solo me miró con curiosidad.
Salí rápidamente y corrí hacia mi primera clase. No pude comer, así que esperaba no desmayarme o quedarme dormida en clase. Mientras corría, revisaba mis útiles y me di cuenta de que no llevaba mi pluma. Estaba tan concentrada en buscarla en mis bolsillos que, distraída, choqué fuertemente contra un niño pelirrojo que al parecer también lleva prisa.
Yo: -Lo siento, no te vi- dije apenada mientras observaba todo lo que había caído al suelo conmigo.
X: -No, yo debería disculparme. La verdad es que pensé que tú te ibas a detener- respondió, mientras su amigo me ayudaba a levantarme.
Sin embargo, cuando vi los ojos de la persona que me estaba ayudando a levantar, sentí un dolor punzante en la cicatriz que me había causado en el lago el día anterior.
X: -¿Estás bien?- preguntó preocupado mientras ajustaba sus lentes.
Yo: -Estoy bien, muchas gracias...- respondí mientras sacudía mi túnica.
Harry: -Soy Harry, Harry Potter, y él es mi amigo Ron- dijo amablemente.
Yo: -Un gusto. Yo soy Cristine Snape- respondí, mientras ellos asentían con una sonrisa. Pero de repente, comenzamos a correr al mismo tiempo.
"Qué bueno que ahora yo no soy la única que va tarde", pensé aliviada mientras corríamos.
Cuando por fin llegamos, no dudamos en abrir la puerta rápidamente. No me sorprendía que los demás nos miraran. Al entrar, noté que las chicas con las que compartía habitación me miraban con malicia. "No puede ser, fueron ellas. Yo que pensé que nos llevaríamos bien, pero creo que lo hicieron a propósito", pensé abrumada. Traté de mirar a otro lado y vi a un gato en el escritorio.
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Bajo el manto de las sombras 🩶
FanfictionEn un rincón olvidado del mundo mágico, en las sombras de la historia, se oculta un misterio que podría cambiar el destino de una joven hechicera. Cristine Snape, hija de Severus Snape, desconoce por completo su verdadero linaje y el legado que lle...