#19

273 16 4
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La atmósfera en el gimnasio estaba cargada de anticipación mientras TN se preparaba para entrevistar a Tsukishima, una estrella del voleibol conocida por su inteligencia y habilidades en la cancha

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


La atmósfera en el gimnasio estaba cargada de anticipación mientras TN se preparaba para entrevistar a Tsukishima, una estrella del voleibol conocida por su inteligencia y habilidades en la cancha. TN, con su micrófono en la mano y su libreta de notas lista, se sentía emocionada por la oportunidad de hablar con Tsukki y obtener sus perspectivas sobre el juego.

Tsukishima, serio y concentrado como siempre, esperaba pacientemente en la parte superior de unas escaleras, listo para comenzar la entrevista. Mientras TN se acercaba a él, un murmullo de emoción recorría el gimnasio.

TN:Hola, Tsukishima. Soy TN, reportera de deportes. ¿Estás listo para comenzar la entrevista

Tsukishima: Sí, estoy listo.

Justo cuando TN comenzaba a hacer la primera pregunta, un repentino empujón proveniente de la multitud la hizo tambalearse peligrosamente hacia atrás, a punto de caer de las escaleras. En un instante, Tsukishima reaccionó con un reflejo sorprendente, extendiendo sus brazos para atrapar a TN justo antes de que perdiera el equilibrio, como si fuera un escena salida de un drama coreano.

El gimnasio se llenó de murmullos y aplausos mientras Tsukishima sostenía a TN en sus brazos, asegurándose de que estuviera a salvo.

Tsukishima: ¿Estás bien, TN? ¿Te lastimaste?

TN, sorprendida pero agradecida por la rápida acción de Tsukishima, se tomó un momento para recuperar el aliento antes de responder.

TN: Gracias, Tsukishima. Estoy bien, gracias a ti.

Sin embargo, mientras TN intentaba ponerse de pie, se dio cuenta de un repentino dolor punzante en su tobillo. Al parecer, el empujón repentino y la repentina caída habían causado que se torciera el tobillo.

Tsukishima, con una expresión de preocupación en su rostro, se agachó para examinar el tobillo de TN con cuidado.

Tsukishima: Deberías sentarte un momento. ¿Puedo ayudarte a llevar tu peso?

TN asintió, agradecida por la ayuda de Tsukishima mientras se sentaba con cuidado en las escaleras. Mientras Tsukishima la apoyaba, TN no pudo evitar sentirse impresionada por su atención y amabilidad en medio de la situación.

Con cuidado, Tsukishima cargó a TN en sus brazos y la llevó con paso firme hacia los vestidores, donde la tranquilidad y la privacidad ofrecían un respiro bienvenido del bullicio del gimnasio. Una vez dentro, Tsukishima depositó suavemente a TN en una silla cercana, asegurándose de que estuviera cómoda antes de sentarse a su lado.

Tsukishima: No creo que puedas caminar con esos tacones, TN. Parece que tu tobillo está bastante hinchado.

TN asintió con resignación, reconociendo la sensatez en las palabras de Tsukishima. Agradecía su atención y cuidado en ese momento de necesidad.

TN: Tienes razón, Tsukishima. Estos tacones definitivamente no son la mejor opción en este momento.

Tsukishima se levantó con determinación y comenzó a buscar en los armarios del vestuario en busca de suministros médicos. Encontró un botiquín de primeros auxilios y regresó con una expresión seria pero decidida en su rostro.

Tsukishima: Voy a vendarte el tobillo para que esté más seguro. ¿Estás bien con eso?

TN asintió, sintiéndose reconfortada por la presencia calmada y segura de Tsukishima.

TN: Sí, por favor. Gracias, Tsukishima.

Con manos expertas, Tsukishima comenzó a cuidar el tobillo de TN, aplicando cuidadosamente una venda para brindar apoyo y estabilidad. TN observaba con admiración mientras Tsukishima trabajaba, impresionada por su habilidad y su atención meticulosa a los detalles.

Una vez que terminó, Tsukishima se sentó a su lado y se tomó un momento para asegurarse de que TN estuviera cómoda y tranquila.

Tsukishima: Espero que te sientas mejor pronto, TN. Si necesitas algo más, no dudes en decírmelo.

TN asintió con una sonrisa, agradecida por la ayuda y el cuidado de Tsukishima en un momento de necesidad.

TN: Gracias, Tsukishima. Realmente aprecio tu ayuda.

Tsukishima asintió con seriedad y se quedó a su lado, ofreciendo su apoyo y compañía mientras TN se recuperaba. En ese momento, TN se sintió agradecida por la presencia reconfortante de Tsukishima, demostrando una vez más que incluso en medio de la adversidad, la ayuda inesperada de alguien puede marcar la diferencia.






Después del incidente en el gimnasio, Tsukishima no pudo dejar de preocuparse por el bienestar de TN. Decidió tomar una acción adicional para asegurarse de que estuviera cómoda y se recuperara completamente de su tobillo torcido. Con cuidado, Tsukishima seleccionó algunas cremas y ungüentos especiales para el tobillo, junto con una selección de flores frescas, y las envió a la dirección de TN.

Cuando TN recibió el paquete, se sorprendió gratamente al ver los productos cuidadosamente seleccionados por Tsukishima. La atención y el cuidado demostrados en el gesto no pasaron desapercibidos, y TN se sintió abrumada por la gentileza de Tsukishima.

A medida que pasaban los días, el tobillo de TN comenzó a mejorar gracias a las cremas y los cuidados de Tsukishima. Se encontró pensando en él con más frecuencia, agradecida por su consideración y su amabilidad en un momento de necesidad.

Entonces, una tarde soleada, TN recibió otra sorpresa de Tsukishima: una invitación a salir en una cita. La nota adjunta era breve pero llena de sinceridad, expresando el deseo de Tsukishima de pasar tiempo juntos y profundizar su relación más allá de las entrevistas y los incidentes en el gimnasio.

TN se encontraba emocionada y conmovida por la invitación de Tsukishima. Después de todo lo que habían compartido, desde el incidente en el gimnasio hasta los cuidados posteriores, se dio cuenta de que había algo especial entre ellos. Con una sonrisa en el rostro, TN aceptó la invitación y comenzó a anticipar su próxima cita con Tsukishima, emocionada por lo que el futuro les deparaba juntos.



Aquí está tu pedido.

Espero que te encuentres bien.

Pueden dejar sus pedidos.

Gracias por leer.

Bye bye 💋💋

Siendo padres -HAIKYUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora