၄၃ - quinze

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° ᡣ𐭩 . ° .

Varios días transcurrieron, para ellos, fueron momentos por completo incómodos y, por alguna extraña razón, vergonzosos.

No habían cruzado si quiera un murmullo, Hongjoong se dió cuenta de que probablemente se estaba comportando como un ser totalmente inmaduro al evitar aquello.

Le agradaba Seonghwa, se sentía muy bien estando junto a él, siendo amigos, pero por un pequeño incidente dejó que prácticamente dejasen de hablar, cosa que para Hongjoong no era del todo agradable.

Estaban tan cerca, y tan lejos. Una ansiedad viváz comenzó a crecer en él, algo que no había sucedido con anterioridad, sobrepensando increíblemente en qué pasaría al pasar de los días.

Hasta que en un recreo, Jeonghan le citó.

Han era muy perceptivo, aunque solía ser tímido anteriormente, se soltó cuando Cheol le presentó a su amigos cuando apenas llegó.

Él era totalmemte calmado la mayor parte del tiempo al menos con Hongjoong, eran algo cercanos y solían hablar seguido, y para el momento en donde se encontraron en las gradas de la cancha de césped, se dió cuenta de un tirón que realmente necesitaba oír aquello que de tanto que le dijo.

"Escúchate y enfréntate"

No lo entendía.

Hasta aquel jueves.

Donde sus dos amigos, Wooyoung y Yeosang, se percataron instantáneamente de que algo no estaba bien con ellos. Se notaba petrificado en clase, no se saludaban como de costumbre, su presidente no tenía aquella sonrisa característica en su rostro de melocotón que disfrutaban ver.

Notaron a Seonghwa exactamente como el primer día, callado, reservado, su mirada inquietante había regresado para todos quienes cruzaban ojos con él.

Hongjoong necesitaba un empujón, y ellos lo harían posible.

Así que, idealizaron un plan junto a Jongho y San para acercarlos. Aunque se les haría imposible.

Woo pensó en raptarlos al baño, encerrarlos en un cubículo para que hablasen y se "reconcilien". Yeosang quiso hablarles a ambos directamente luego de clase, siendo la idea de Jongho la más simple de todas, y que por supuesto, tenía la mayor probabilidad de éxito.

Jongho recordó su asignación de turno de limpieza, quien convenientemente, era con Seonghwa, por lo que, ideó alguna excusa creíble para cambiarle su turno y dejarles solos al menos para ver qué sucedía entre ellos.

Así que, con un montón de seguridad, texteó en el descanso a Hong, diciendo que su padre necesitaba ayuda con alguna cosa en casa y le necesitaba temprano, como era de esperar, este aceptó cuando Choi dijo que le pagaría con algún favor que necesitase.

Dejándolos solos, una vez más. Otro intento a la fila. Tratando de ignorar la presión que empezaba a incrementar fuertemente desde su pecho cuando empezó todo, sin saber como reaccionar, sobre sus orbes aún caía el recuerdo del beso lleno de cariño que de dieron ambos, sin notarlo en ese entonces, solo cerró sus ojos y disfrutó, como si olvidase que eran amigos.

Como si olvidase que le gustaba, sin haber caído en cuenta.

Totalmente rendido ante el choque labios que frenó su mundo y consiencia por un rato, moviéndose suavemente al compás de una armonía desconocida pero tan atrayente al impulso, fundiéndose.

Cayó en cuenta que estaban solos.

En un salón vacío, sin un solo alma merodeando alrededor. Tal vez creyó que la situación lo ameritaba, pero no estaba al cien por ciento seguro de que alguna palabra formulada por el tembloroso cuerpo de Hongjoong le garantice algo más que otro día sin hablar.

Tomando valor, aclaró su garganta y se levantó de su asiento. Percatándose qué, quien estaba parado al principio de las filas, barriendo, siguió haciendo su labor sin esperarle.

Tragó saliva, apretando la costura de sus mangas del chaleco escolar con nerviosismo. Dirigiéndose directamente hasta donde se encontraba el más alto, dándole la espalda. Suspirando profundamente, sintió sus piernas frías, haciendo fricción con la tela entre sus finos dedos superiores.

Alzando su vista del suelo, con sus pisadas suaves sin ruido sordo, el contrario paró en seco sin voltear. Sintiendo nervios de golpe, sostuvo el objeto en sus manos con presión, ya sabiendo lo que pasaría en ese entonces.

Pero no le dejó empezar.

ㅡ Lo siento mucho, Hongjoong.

Le habló, con tono claro y arrepentido. La reacción petrificada del más bajo se sentía en el entorno, presionándole cada vez más sobre su conciencia.

No esperó más, volviendo a hablar girando su cuerpo para encararlo, sin embargo, Hongjoong estaba cabizbajo, notó sus manos temblorosas y se dedicó a rebuscar lo mejor que pudo en su diccionario mental para evitar herirse mutuamente.

Suspirando, miró una poca de la vista al rostro, su mirada hacia el piso se sentía ansiosa, desesperada y gritando por compasión.

ㅡ Quiero pedirte disculpas. ㅡ empezó, con una voz un poco más suave ㅡ No quiero ser irrespetuoso contigo, no te daré excusas para que me perdones. Quiero aclararte todo y entenderé completamente si estás enojado conm-

ㅡ N-no lo estoy.

Apretó sus labios ante el espasmo que generó aquella vocesita que extrañó ansiosamente, se oía lastimera, intentando amortiguar su sentir a travez de su boca.

Siguió mirando sus largas pestañas tupidas, con su pecho subiendo y bajando pesadamente, notando al instante como Hongjoong atrapaba su belfo inferior con sus dientes.

ㅡ Yo... no siento enojo. ㅡ prosigió, juntando sus manos para regurlar la presión en su corazón.

ㅡ ¿Por qué?

Soltando un pequeño suspiro, alzó su cabeza y le miró, con sus cejas un poquito fruncidas. Detalló aquellos orbes azules que le miraban confundido, buscando respuestas hacia su comentario. Para luego de unos cortos segundos, preparado para emular sus palabras, desvió su panorama hacia sus propias manos entrelazadas.

Debía decirlo. No importaba el resto.

ㅡ Bueno, estos días... ambos estuvimos distantes, de alguna u otra forma es incómodo, y no debes disculparte tú solamente, fue algo que se dió por los dos. ㅡ se sinceró, presionando sus labios un poco, separándolos y relamerlos ante el fugáz recuerdo de la unión que tanto hacía palpitar su corazón desesperado. Tomó aire por la nariz y volvió a hablar ㅡ Aparte de eso... no quiero perder mi amistad por algo así, ¿sabes?

ㅡ Oh... yo tampoco... quería perderla.

ㅡ ¿Es así? ㅡ preguntó, ahora sí, conectándose con una miradita ladina esperanzada en una respuesta positiva ante su sinceridad. Sus mejillas se tiñeron de un leve rosa cuando aquellos orbes arandanos observaron fugázmente sus labios bañados ligeramente en bálsamo que brillaban frente a él. ㅡ Te pido perdón nuevamente, Seonghwa...

ㅡ N-No, perdóname a mi, en serio no sé que ocurrió conmigo esa noche, tal vez necesite una pareja.

Las risas de ambos se oyó ligeramente por todo el salón, haciendo un poco de eco en sus oídos. Tapando su rostro con una pequeña mano, con la derecha la aproximó hacia Seonghwa, con intenciones de estrecharla, después de que se escuchase un último comentario ante aquella situación reconfortante que se ofrecía.

ㅡ ¿Amigos?

Y con una sonrisa mediana, las pieles suaves se juntaron por primera vez.

ㅡ Amigos...

° ᡣ𐭩 . ° .

Les subo esto antes de
que se me vaya la luz :')

con amor,
- kor ⚘️

Hacia ti - ၄၃ - seongjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora