Amantes [Dekutodo] [FINALIZADO]

Izuku y Shōto (Final)

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DEKU Y SHOTO

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— ¿Te vas a quedar?

— Si. Voy a esperar a Keigo.

— Ah. Mi casa está cerca, asi te cambias de ropa...

— No. Me quedare a esperar... mira si viene y ve que no estoy... se va a preocupar.

— No es una sugerencia. — Shōto agarro su saco y lo observo, sin duda necesita un buen lavado.
La mano de Izuku lo jalo y lo obligó a caminar.

— ¡Oye! Déjame, Izuku. ¡Que no entiendes que no quiero ir! — se detuvieron. — No quiero tu ayuda y mucho menos tu compasión... o pena.

— Bueno... entonces quédate aquí y mojate todo lo quieras. — Izuku escupió esas palabras, pero... — Pero... te resfriaras... y...

— ¿Y eso qué? Prefiero estar resfriado que ir contigo.

— ¿Por qué tienes que ser tan terco? Quiero ayudarte pero tu te empeñas en llevarme la contra... deja que te ayude.

— ¡No quiero tu ayuda, ya te lo dige! Además no podría estar en un mismo lugar que tu. — Shōto se mordió el labio.

Izuku puso los ojos en blanco y sujeto el brazo de Shōto, éste forcejeo durante el camino a la casa del peliverde, cuando entraron finalmente lo soltó y le pidió amablemente.

— Sácate la ropa.

— ¿Para qué?

— Para lavarla. — respondió de manera simple y Shōto chasqueo la lengua, comenzando a desabotonar su camisa pero cuando llegó al anteultimo botón, vio una atenta mirada verde.

— Date la vuelta. — pidió.

— Shōto, somos hombres. — levantó las cejas. — Además conozco tu cuerpo.

A Shōto se le tiñeron las mejillas.
— Eso fue hace mucho tiempo... — susurro.

— Si, pero hay momentos o cosas que uno no podrá olvidar tan fácilmente. — dijo con un tono seco.

— Prefiero estar solo. ¿Hay algún cuarto donde pueda cambiarme?

— Esta bien. — Izuku desapareció por unos minutos y volvió con una toalla en mano. — sube las escaleras, en la primera puerta a la derecha hay un cuarto donde te deje ropa sobre la cama y al final del pasillo esta el baño. — le coloco la toalla en el hombro. — Hay sopa por si quieres.

El bicolor asintió y se retiro.
Cuando estuvo dentro de la habitación comenzó a desvestirse, se miró en el espejo que estaba sobre un mueble pequeño frente a la cama y toco su hombro, su espalda donde tenía unos notables chupones.

Se quedo en bóxer y se fue al baño, para darse una ducha, que duró unos 20 o 15 minutos, al terminar volvió al cuarto para vestirse, pero la ropa le quedaba algo holgada, alzó sus hombros sin importancia y salió.

Secaba su cabello con una pequeña toalla mientras caminaba a la sala, donde hablaron con Izuku unos minutos, pero al no ver a nadie ahí siguió caminando y se detuvo al ver por las ventanas la torrencial lluvia.

— Es un lindo paisaje cuando no hay lluvia. — Shōto dio un salto al escuchar la voz tan cerca, sacudio su cabeza y miró a otro lado. — Te sirve sopa... ven.