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Las noticias de que Stella Solein había hecho todo un espectáculo con su perro se escucharon durante quizá una semana, por lo que Bloom y Sky, habían decidido salir públicamente después de esa semana, para que su noticia tuviera impacto. Ninguno de los Bridge había visto a la rubia desde la última vez en su hogar. Pero Sky claro que había ido a visitarla, ella y Lady Aisha habían salido a dar un paseo donde gracias a kail había terminado dentro del lago y en consecuencia tenía una terrible gripa.

Sky le había dicho eso a la matriarca Bridge, que había enviado una cesta de panecillos a la rubia y Bloom le había enviado una carta donde intentaba ponerse al día claramente llenandola de mentiras al estar "robándole" al pretendiente, Riven se había aparecido en la propiedad Solein para contarle algunos chistes a la rubia y uno que otro chisme de las debutantes de esta temporada y como pensaban que la rubia podia estar embarazada, Miele le habia enviado un dibujo, Brandon simplemente habia ignorado su existencia.

Sky había decidido pasar esa tarde por completo con Stella, así que había movido algunos compromisos y había mentido en algunos más para que Brandon no se enterará que estaba rompiendo una de sus reglas.

Pero antes de que pudiera salir de su casa camino a la Solein Manor una carta llegó a su poder, Marion lo estaba invitando a pasar el día con los Bridge.

De igual forma decidió que debía visitar a Stella antes de irse con los Bridge, sería su forma sutil de protesta por todas las reglas que había puesto Brandon.

Ingreso a la habitación a la que le había indicado el mayordomo, donde estaba Stella y gracias a su llegada también el ama de llaves.

La habitación estaba repleta de pinturas y dibujos regados por todos lados, la rubia estaba en medio de la habitación con su concentración en un lienzo que tenía un paisaje mientras terminaba de pintar los últimos detalles.

Sky camino hacia ella cuidando no pisar nada, y dándose cuenta que todo estaba demasiado desordenado, incluso ella, que solía tener una apariencia impecable estaba fuera de lugar, con unos pañuelos al lado y estornudando de vez en cuando.

—¿Aún no has tomado el remedio?— preguntó Sky cuando estaba más cerca de ella.

—Lo hubiera hecho si dejara de oler a pies— un estornudo la interrumpió, tenía la nariz roja y unas ojeras prominentes —Además, estar enferma tiene sus ventajas.

—¿No más bailes?

—No más bailes y sobre todo, dejarte conquistar a la señorita Bloom— Sky se tenso en su lugar, ese era un tema que aún no habían hablado porque Sky no podría mentirle a la cara —¿Cómo se lo tomó lord Bridge cuando decidiste cortejar a Bloom?

—Se puso histérico— confesó Sky mientras una sonrisa de satisfacción iluminaba la cara de Stella —Pero después lo permitió.

—Era obvio— murmuró ella —Sinceramente Sky, ¿Haces esto por qué te sientes flechado o por qué la idea de casarte conmigo es tan mala en tu cabeza como en la mía?

El ama de llaves se removió incómoda.

—Cualquiera de las dos es útil.

—Pero estoy segura que solo lo harías por una, sobre todo si seguimos con el antigüo duque de Montessori en mente.

—Yo no nombró a tu padre cuando necesito que respondas algo.

—Sabes que es diferente.

—¿Por qué? ¿Por qué tú padre se adelantó a morir?

Sky dió un paso atrás y Stella volvió la mirada hacia su lienzo.

—Tal vez deberías irte, se te hará tarde para tu cortejo de hoy.

Los BridgeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora