María
— ¿Querés que me quede?— pregunto lu cuando llegamos a casa.
— estaremos bien, Lu. Anda con cata que capaz te extrañe— entramos a casa.
— los fines de semana está con su papá, así que me quedo con ustedes — sonreí a boca cerrada para subir a la habitación— ¿Hablaste con Julián?—.
— no, nisiquiera regreso— le saque la ropa al bebé para comenzar a cambiarlo— no quiero terminar con él—.
— abrí los ojos, linda. Él estaba cogiendo mientras vos parias ¿Pensas perdonar eso?— me miró intentando convencerme— es tu vida, pero no creo que sea buena idea eso—.
— son mi única familia y no quiero quedarme sola, Romeo necesitará a su papá— termine de cambiarlo para ponerlo en su cuna— solo haré que esto no paso—
— vos misma te lastimas y no te quedarás sola, yo te voy a apoyar en todo— me hizo mimos en la espalda— anda a ducharte— asentí y entre a la ducha. La necesitaba porque sentía que olía mal, mi vientre seguía abultado, no del todo, pero seguía y era raro el no tener dentro a Romeo.
Me di una ducha rápida y salí encontrándome a Lucia dormida con Romeo, peine mi cabello y baje a la cocina encontrándome a Julián en el sofá concentrando en su teléfono.
— ¿Por qué no me esperaron? Yo podría ir por ustedes— dejo su teléfono a lado— tú hermana me llamo para avisarme.
— creí que no llegarías— entre a la cocina por agua.
— cuando entre nisiquiera me viste— se recargo en la mesa que estaba a lado— ya la cague y lo reconozco—.
— ¿Qué querés que te diga?— deje el vaso a lado para mirarlo.
— ¿Podemos estar bien?— tomo mi mano— estaré al tanto de los dos—
— si, pero no quiero volver a Emilia aquí— su cara se torno sería— ¿Fue ella, no?—
— es mí amiga, déjate de joder con eso, ¿Por qué sos tan insegura?— alzó la voz.
— no grites que lu y el nene despiertan— rodo los ojos— no respondiste mi pregunta y en lugar de eso te enojaste, ¿Cómo querés que me sienta si todo mi embarazo me jodió? Vos nunca le dijiste nada simplemente te “disculpaste” por ella, te pregunte mil veces si solo era tu amiga y todas las veces me dijiste que sí, a la primera oportunidad fuiste y te la cogiste—
— vos también te cogiste a otro en tu gira, recordá que no sabías si Romeo era mi hijo y seguimos con la misma duda—.
— hice el ADN y si es tu hijo, ya se que la cague también por eso no quiero joderte tanto con el tema, solo quería que me dijeras si fue ella—
— si, si estube con ella ¿Eso querías saber? Listo, te lo dije— tragué saliva para no llorar— y si, si me sentí bien con ella.
— ¿Por qué estás conmigo?— fue la única pregunta que pude formular.
— por Romeo—
— si querés estar con ella, anda tranqui. Podés venir a visitar rome cuando quieras—
— prometí estar con ustedes y así va a ser, no voy a irme con alguien más aunque estemos separados— salí de la cocina cuando escuché el llanto de mi hijo, pero Lucia ya lo tenía en brazos mesiendolo.
— tiene hambre— me lo paso, salí al patio con el y se senté en el césped. Le di la teta para tranquilizarlo y así lo hizo.
Mire el lago mientras Selena estaba a mi lado al tanto de los movimientos de Romeo. No sabía si sentirme bien con lo de Julián o no. Simplemente quería llorar como todas las noches lo hacía.
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𝑒𝑙 𝑎𝑚𝑎𝑛𝑒𝑐𝑒𝑟
Random-¿De que pueden sospechar si nosotros no tenemos nada?-. La morocha quedó perpleja por la respuesta de su amante. - rompí la primera regla y no se cómo hacer para olvidarme de todo-. La ojiverde a su mejor la cuál escuchaba su lio amoroso.