RESILENCIA (Lgbt)

Un gusto verte

—solo nos divertiremos un poco-dijo el idiota- no te hagas la difícil, es lo que todas quieren.

Acercó su rostro hacia mí, soltó una de mis muñecas, y fue mi oportunidad de proporcionarle un golpe, justo en su ojo, cayó del otro lado de la cama y eso me dio oportunidad salir de la habitación. Todos seguían disfrutando de la fiesta, mientras yo busco la salida para irme directo a casa, saque mi celular para llamar a Roger, pero alguien me tomo por el hombro, el cual mi instinto de supervivencia salió, me di la vuelta y con mi brazo lo empujé hacia la pared, tan fuerte que pude escuchar el sonido de sus huevos al chocar.

—Morgan, espera-dijo-soy yo, Valentina

—Vale??—dije atónita, pero me alegraba verla, al fin una cara conocida, me aparté de ella con cuidado y está se quejó del dolor, eso debió de doler, pero no me culpen, estaba en alerta.

—Vine para llevarte a casa, ¿estás bien???- dijo, ignorando el hecho de que casi le quiebro la columna.

—¿por qué estás tú aquí? —pregunte

No le dio tiempo de responder por que Leah apareció de la nada.

—Jaime, por Dios—dijo sonaba preocupada—¿Dónde te has metido?

—Yo...—dije—debo de volver a casa

—te llevo—dijo Leah

—Yo me haré cargo—dijo la pelirrosa, apartándola

—¿y tú? ¿Quién eres? —pregunto Leah

—Es una amiga—dije antes que la pelirrosa respondiera— está bien, me iré con ella, gracias por esta noche

—no tienes que agradecer—dijo, lo único que quería era salir de este lugar, quería vomitar, ya no quería estar aquí

adiós—dije haciendo un débil gesto, mientras Valentina me ayudaba a no caer

—Jaime—Me llamo Leah

— ¿sí? —dije mientras me detenía

—Me gustaría volver a verte—dijo y me extendió una tarjeta de presentación

La tomé y asentí.

El auto de Valentina estaba aparcado enfrente de la residencia, abrió la puerta del copiloto y entre, me arre coste, ella subió al auto.

¿Te ves fatal, segura que estas bien? -pregunto un tanto preocupada

Lo estoy, solo quiero volver a casa- dije, tenia mucho sueño, eran pasada las 3, ¿Valentina, estuvo todo este tiempo en la fiesta o solo vino a buscarme? Por qué era ella la que me llevaba a casa, ¿Cómo supo donde encontrarme? ¿acaso me está espiando?

El resto del camino no supe más, me quede dormida como una beba, cuando llegamos, estaba mas dormida que despierta, lo ultimo que recuerdo fue que baje del coche y que me había acostado en la cama. Al día siguiente no quería despertar, cerré con fuerza los ojos para poder seguir durmiendo, pero unas voces no me lo permitían, un aroma peculiar hizo que al fin abriera mis ojos, todo era borroso, ¿es normal seguir sintiéndote ebria al despertar?, me senté en el respaldar de la cama y talle mis ojos para poder ver con claridad, me asuste al darme cuenta de que este no era mi cuarto.

—Has despertado—dijo la pelirrosa, tenia un vaso de jugo de naranja y un plato pequeño con pastillas—espero no te moleste que te allá traído a mi casa, me pareció buena idea. Toma esto, te ayudara con la resaca

Extendió y dudando lo tome, ¿debía de agradecerle, por traerme aquí?

—Gracias—dije tomando de la pastilla

—No hay nada que agradecer—dije, camino hacia su armario y busco algo de ropa, la coloco al pie de la cama—En esa puerta esta el baño, deberías de darte una ducha, tu ropa aún no se seca

—Eh— pregunte confundía, mire mi ropa que no traía, y me di cuenta que solo tenia el top y mi bóxer a juego que traía el día anterior, y me tape rápidamente— ¿Cómo?

—Anoche te vomitaste—dijo sonriendo—pero no pasa nada, a cualquiera le pasa

—Lo lamento, enserio—dije sonrojada, realmente estaba apenada, que te vean tus amigos es Re normal, pero que te vea la chica que... te odia o odia es otro cuento

—No tienes por que avergonzarte—dijo, y eso me hizo sentir peor—date una ducha, luego baja para desayunar, mi familia espera

Dijo esto y salió, dejándome ahí en su habitación solita.

Me cambien y me mire en el espejo, al menos no me miraba tan cruda, deje todo en orden y cerré la puerta de la habitación

—Alex—escuche mientras terminaba de cerrar, apreté fuerte la cerradura y lentamente me gire

—Emily, que gusto verte—dije sonriendo, como si no me acabara de ver salir de la habitación de su hermanastra, ella bajo su mirada a mi atuendo

—¿Qué hacías en la habitación de Valentina? —pregunto, pero su rostro reflejaba no querer saber la respuesta

—Bueno, es una explicación larga, demasiado diría yo—Dije nerviosa, y la verdad no sé por qué lo estaba, ¿es alguien que no merece ninguna explicación o sí?

—Salimos de fiesta y no pudo volver a su casa—dijo junto a tiempo la pelirrosa—fin de la explicación. Vamos la comida esta lista

Caminamos incómodamente hacia el comedor, al menos yo lo estaba.

—buenos días, Jaime—dijo la madre de Emily—Valentina ya nos explico lo de anoche, que bueno que te encuentres mejor, es triste perder una mascota

Fruncí el ceño, no entendía a qué se refería, Valentina me hizo seña para que le siguiera la corriente.

—Claro, claro, gracias por permitir quedarme—dije, nos sentamos todos en la mesa

—Eres bienvenida siempre—dijo mientras me daba la comida, se veía tan apetitosa que no dude en llevarla a mi boca

Y aunque sentía un poco de tención de parte de las hermanas, yo me permití disfrutar de la comida.

HOLA... lamento demorarme tanto en actualizar, espero sea de su agrado, y me gustaría que dieran su opinión de que tal les cae la historia, buenas noches, nos vemos pronto.