—Feliz Cumpleaños, a ti. Feliz Cumpleaños querido Hae ¡Feliz Cumpleaños a ti!—Eran las seis de la mañana del quince de octubre. Y lo primero que su cerebro registra son las voces en la canción de Cumpleaños. Aprieta los ojos con fuerza y se cubre con la manta, sabía que era en vano, se sentía realmentefeliz.—Vamos hermanito—Siente como Donghwa toma la sabana que le cubre y la jala, dejándolo completamente descubierto. Solo llevaba su ropa interior y la camiseta de las pijamas así que se le puso la piel de gallina.
—¡Cariño! Solo sopla las velas—Llama su madre entre risas. Llevaba su pijama blanca de pantalón y camisa, su cabello fue peinado cuidadosamente y se había lavado el rostro. Ella si tuvo tiempo no como él.
Donghae se sienta en la cama, donde el enorme pastel azul con velas encendidas ilumina su habitación, puede jurar que es de chocolate relleno de fresas y platano, y que fue su germano quien lo decoro porque parece que solo echaron bolas de betún sobre el pan. Para ser el dueño de pastelerías y cafeterías no le puso demasiado esfuerzo, lo termino de aceptar cuando la lámpara se encendió, iluminando aún más el deformado pastel.
—¿No es muy temprano para comer azucar?—Ríe mientras se sienta en la cama como niño bueno, su madre acerca un poco más el pastel.
—Solo pide un deseo—Donghwa le sacude el cabello para terminarlo de despeinar y se sienta a su lado en la cama. A pesar de ser de madrugada el sol comenzaba a alzarse en lo alto del cielo y los primeros rayos lo surcaban volviendo el inmenso mar en un azul más claro.
Donghae cierra los ojos. No puede evitar que las imágenes de su último cumpleaños aparezcan por su mente. Aún así cierra los ojos cpn mas fuerza y sopla las velas, deseando que su vida siga con el rumbo que ha tomado ahora.
Un ruido estruendoso lo hizo abrir lo ojos solo para ver iles de papelitos de colores, quizá quejarse con su hermano pero no pudo porque cuando estaba recuperándose sintió el glaseado del paste en el rostro. Las carcajadas de su madre y hermano eran tan fuertes que solo pudo unirse a ellos. Se levantó de la cama, tomó un puño de pastel y fue tras su hermano que ya estaba a punto de salir de la casa.
Escuchaba a su madre llamarlos para que comieran una rebanada de pastel pero los hermanos Lee no escucharon. Donghae alcanzó al mayor dos metros afuera de la casa, salto sobre el y le lleno la cara de glaseado, sin soltarse, aferrándose al mayor como un koala.
—¡MI OJO!—Gritaba mientras lo sacudía en el aire cual muñeco de trapo. Ambos cayeron en la arena mientras Donghae se deshacía en carcajadas.
—¡Madre! Me quiere dejar ciego—Se queja entre risas mientras trata de quitarse el dulce de la cara. Donghwa trastabilla lleno de arena y glaseado de mantequilla con colorante azul que el mismo había hecho.
—Dejen de jugar ¡Quiero tomar fotos!—Su madre se asoma por la puerta de la casa. Ignora por completo su pequeña riña porque para ella es normal, así que solo vuelve a entrar.
—¡No! Yo las tomare—Donghae se levanta y camina de regreso a su casa entusiasmado por la idea. Hace mucho que no había tocado una cámara por lo que cuando vino de regreso a su hogar y encontró las cajas con sus cosas, también encontró ocho tipos de cámaras diferentes. Recordó lo entusiasmado que había estado con la fotografía pero su ex esposo una vez le comentó que la pintura era más elegante y clásica para dedicarse en el área del arte que la fotografía.
—No puedes tomar tus propias fotos—Donghwa camina con los ojos rojos y la cara y cabello oscuro llenos de betún y arena, no puede evitarlo y suelta la carcajada. Obviamente el no está en mejor condición, Su cara había quedado pegajosa pero el dulce se quedó en la camiseta de su hermano.
—Claro que si, se llaman selfies—Le saca la lengua y camina con una enorme sonrisa en la cara. Donghwa deja salir algo que parece un bufido que se transforma en risa a medio camino.
—Suficiente, acomodense para la foto—Su madre alza la cámara y ellos posan. Se colocan tras la mesa, donde está el paste que parece que tiene dos huecos. Y tras este ellos dos como niños pequeños, llenos de arena, dulce y totalmente desarreglados. Esa fue la primera de las fotos. Porque cuando Donghae encontró la cámara de instantáneas no lo soto hasta que se quedó sin rollos.
Había sido el mejor cumpleaños que tuvo en los últimos diez años. Con su madre y hermano, sin una fiesta grande o una cena elegante. Sólo ellos tres riendo, hablando, jugando y tomando fotografías. Había perdido mucho con él pero ahora había recuperado a su familia, además de una nueva y feliz vida.
Atesoraria los buenos recuerdos, pero solo como fotografías en una pared.
No más.
FIN
●●●Corto. Lo sé. Pero es el final de esta historia. Espero que les guste y se sientan bien con la conclusión.
Los espero en una nueva historia y muchas gracias por su tiempo y paciencia.
Les quiero, cuídense.
💙

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LOST (Omegaverse)
FanfictionUn accidente de auto, un par de huesos rotos y una caída en cadena que te lleva a replantearte toda tu vida. Llegando a la conclusión de que te has perdido entre las mentiras y la verdad ¿Acaso todo era una farsa?