Capítulo 7 - Prioridades

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Después de que Juliette estuvo en casa ninguno de los dos lo mencionó. Donghae no le cuestiono el porque la había llamado para que fuera a su casa debido a que ya conocía la respuesta y tampoco le pregunto la razón por la que no le aviso ya que también lo sabía. Ambos habían caído en un silencio abrumador, donde hablaban para lo necesario y se veían como fantasmas. Hyukjae contrato por si mismo a una enfermera para que lo cuidara, haciendo que el tiempo que estuviera con Donghae se redujera significativamente a desayunar y cenar en la misma mesa. El omega trataba de hablar pero el mayor no parecía tener interés en conocerlo.


Después el alfa comenzó a ponerse al corriente con los diez años de trabajo que perdió y su tiempo juntos se volvió nulo.

—Idiota—Taeyeon estaba sentada en el balcón de su despacho, llevaba un cigarrillo entre los dedos y expulsaba el aire hacia la intemperie. A casi tres metros de distancia del alfa la beta seguía con la conversación.

Se habían conocido en el jardín de niños y fueron juntos a la facultad así que era casi imposible que no la recordara. Aunque Taeyeon sacrificaría un par de esos años para que Hyukjae tuviera algunos recuerdos de su omega. De su conejito.

—Solo llevo un par de días aquí, es difícil ponerme al corriente—Sigue revisando papeles contratos y años de vida de la empresa familiar. El alfa no recuerda cuando pasó a ser el presidente, cuando tomó las responsabilidades ni que se hace al respecto.

—Me refiero a tu marido. Te estás comportando como un asno, solo espero que cuando recuperes tus memorias Donghae no esté en los brazos de alguien mas—Vuelve a inhalar el tabaco mientras ve de reojo como el alfa deja caer la pluma sobre el escritorio, se frota la cara con frustración y Tae se siente mal por ser tan brusca, después de todo perdió parte de su vida.

—Él esta bien—Se pasa la mano por el cabello oscuro y se deja caer contra el respaldo.

—¿Te refieres a que no lo embistió un autobús? En ese caso: sí, él está muy bien.—Exhala el aire mientras habla y sonríe con el sarcasmo plasmado en el gesto.

Hyukjae se queda en silencio viendo el techo de mármol oscuro que le parece un toque de buen gusto. Cierra los ojos y las imágenes vividas de aquel día que conoció a él chico pasan por su mente.

—Él tiene una vida, no quiero que me cuide...

—¡Tú eres su vida!—Agita las manos y la parte encendida del cigarrillo se apaga. La beta resopla y lo tira por la ventana, cuidando de reojo que Hyukjae no la vea.

—¿Cómo es que salí con alguien tan joven? Juliette me dijo que...

—¿Hablaste con Juliette?—Taeyeon se levantó tan rápido de su lugar que se tropezó con sus propios pies y cayó de nuevo en el sofá, se impulso una vez más hacia arriba y camino los tres metros de distancia en tres largos pasos.—¿Estas loco?—Susurra casi como si le hablara de algo secreto.

—¿Entiendes que en mi mente nuestro compromiso fue casi ayer?—Protesta con cierta indignación.

A Taeyeon no parece importarle menos porque se va dramáticamente y regresa casi de inmediato para sentarse frente a él, su cabello castaño y ondulado le enmarcan el delgado rostro, sus enorme ojos color chocolate lo ven con atención y parece estar enojada, furiosa en realidad.

—¿Toleraste la manera tan despectiva en la que habla de él?—Se inclina frente al escritorio en espera de una respuesta. La mujer se ve tan decepcionada y frustrada.

—No—Es lo único que responde, no fue necesario hacer más para que Taeyeon sonriera.

—Solo imagina a tu marido besándose con otro alfa el que sea, imagínatelo en la cama de alguien más y dime si no te molesta.—Murmura con esa voz misteriosa y esa sonrisa llena de maldad, esta feliz al ver la molestia o miedo en la cara del otro.

LOST (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora