Capítulo 3 - La Criatura Más Hermosa

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Hyukjae entró a su casa y sintió una extraña sensación de confort. No reconocía absolutamente nada pero le gustaba. Era un apartamento en uno de los edificios más exclusivos del país con vista al río Han. Na sabia cual de los dos la había querido pero no se quejaba en absoluto. El lugar era de dos pisos, enormes ventanales en la sala de estar y un elevador que llegaba directo sin atravesar un pasillo, aún así había una puerta para invitados no deseados.

Las paredes eran blancas y en ellas colgaban cuadros con colores exóticos que parecían abstractas por las figuras haciendo que resultarán en la sobriedad del lugar, por otro lado los sofás eran de un tono beige suave y había alguno que otro mueble de cristal. Unas lámparas, un televisor de pared y cerca del ventanal un piano. Del lado izquierdo la cocina, sofisticada, simple y con lo necesario. Bastante minimalista, no está seguro si fue su esposo o el, hay diez años de su vida en blanco por el accidente de auto. No tiene idea de qué tanto pudo cambiar. Enfrente de ellos estaban las escaleras que llevaban al segundo piso.

-La habitación principal está arriba, pero hay una aquí donde puedes quedarte y no te sea complicado moverte ¿Está bien?-El chico rubio camina hasta el enorme sofá, deja las cosas ahí y avanza hasta que esta de pie frente a él.

Llevaba puesto un enorme suéter gris, pantalones de chándal y calzado deportivo que ya se había quitado, ahora estaba descalzo. Su cabello estaba teñido de un rubio casi blanco, su piel se veía de un bronceado suave y parecía de constitución delgada, pero era casi igual de alto que el. Curioso. Jamás había visto un rostro como el de él, era hermoso. No había otra forma de describirlo, no era un rostro típico, era uno que notabas y memorizabas, era exquisito.

-Está bien ¿Dormirás conmigo?-Pregunta con total curiosidad.

La pregunta toma por sorpresa al omega, quien parpadea confuso y lo ve con esos enormes ojos castaños. Parece que se descoloca y ni siquiera había pensado en ello.

-¿Tú quieres que...?-Le extraña que l hable de "Tú" parece un chiquillo por la diferencia de edad, pero están casados. Quizá no lo recuerde, no tenga idea de nada pero es su esposo, por algo está con el, tenía que reconstruir su vida. Además los doctores dijeron que si volvía a su rutina todo sería más fácil.

-Sí, si te parece bien-Sonríe y parece que eso le alegra al mas joven quien le devuelve la sonrisa provocandole una calidez y satisfacción soberbia. No tiene idea de cual es la razón pero le agrada. El chico se veía bastante triste, decaído y perdido, era su esposo y omega después de todo tenía que intentarlo.

Tener una conversación con el o saber de que hablar le resultaba algo complicado. Se mantuvo en silencio durante el trayecto ya que no quería distraerlo de la conducción, no quería volver al hospital ya que apenas salió. No lo conocía, no sabía que decir siempre fue alguien tan cerrado y serio que simplemente se quedaba en blanco.

-Háblame de ti, Donghae-Mar del este, curioso nombre para un ser tan exquisito. Cautivante en realidad.

-Ahmm-Se tambalea de un pie a otro, siguen en el recibidor pero a Hyukjae no le importa, realmente tiene interés en conocer a su esposo-Tengo veinticuatro años, soy libra, nací el quince de octubre estudie artes en la universidad de Seúl, me gradué con honores y hago presentaciones, exposiciones y talleres. Tengo un estudio cerca de aquí...-Se queda en silencio, no sabe que más decir.

-¿Tú familia?-Pregunta Hyukjae. Ayudándolo a continuar.

-Papá falleció cuando yo tenía cinco años, mi mamá es socia de un hospital en la ciudad y hace consultas ocasionales en Mokpo, mi hermano vive a las afueras, tiene una cadena de cafeterías esta por abrir la número cuatro.-Se mordisquea el labio sin saber como continuar.

LOST (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora