LOST (Omegaverse)

Capítulo 26 - La verdad no es suficiente

Estaban sentados uno frente a otro, Hyukjae había terminado de hablar. Le dijo todo, lo que realmente sucedió la primera vez que lo "engaño" y sobre Juliette sobornando a la clínica de fertilidad. El alfa sintió como por fin pudo respirar en paz, como si un peso se le hubiese ido de encima. Miraba a Donghae quien seguía quieto con la vista fija en la pequeña mesa de centro. Su rostro había pasado por tantas expresiones mientras hablaba pero ahora solo era un gesto vago en medio de un silencio asfixiante.

—Ibas a acostarte con ella—Su voz es tan suave y ligera como una hoja de primavera sobre el aire. Su mirada no se aparta de donde sea que esté.

—Sí—Responde con simpleza, no había más para explicarse. Ya le dijo que no pudo hacerlo porque no la deseaba.

—Todo este tiempo solo me han visto como un omega de cría defectuoso.—La furia es palpable en cada palabra, reteniendolo y apretando de forma sofocante.

—¡No! Por supuesto de que no simplemente que mi familia...

—¡YA TENGO SUFICIENTE DE TU MALDITA FAMILIA!—Grita con la desesperación desbordandose. Las lágrimas ruedan sin parar y a Hyukjae le duele tanto verlo así. Es la primera vez que le grita, no solo en cinco años de matrimonio, sino en casi la década que llevan de conocerse.

—Te amo—Proclama como si fuese la solución de sus problemas, con toda la sinceridad posible pero Donghae ni se inmuta.

—Y aún así no fui suficiente—Por fin alza la mirada, sus hermosos ojos castaños lo ven como si fuera un desconocido a través de las lágrimas. Le duele pero sabe la razón.

Quiere decirle que el es más que suficiente, que es perfecto y que no necesita un hijo. Pero no va a creerle. Le ha mentido, le ha herido por lo que cualquier cosa que salga de su boca n seria nada mas que palabras vacías para el omega. Su familia y él han tratado de conseguir un bebé ha toda costa, manteniendo a Donghae al margen. Hyukjae ni tiene una idea de como se ha de sentir el menor, quiere recuperarlo pero sabe que no será fácil. Aún así guarda un esperanza, por la unión que tienen, ve la marca en el cuello de Donghae en un deseo profundo de que sea una oportunidad.

—Volví al tratamiento para la fertilidad por consejo de tu madre—Confiesa como si fuera un descubrimiento, dándose cuenta de cómo aún trataban de llevarlo al límite.

—No sabía...

—Sí estoy encinta lo intentaremos y si no es así nos separamos para que hagas tu vida con Juliette y tu hijo.—Se pone de pie y camina hasta la puerta, Hyukjae se pone de pie y se acerca a él, ve los anillos aún en su mano y sabe porque está dándole esa vaga oportunidad.

Donghae lo ama y desea seguir con el a pesar de todo, pero una parte de él se aferra a dejarlo y alejarse de él. Lo cual entiende e incluso el alfa sabe que es lo más sensato por lo que la decision es una moneda al aire que solo espera por ser confirmada.

Se acerca y lo toma por las mejillas, alzándole el rostro, pasa los pulgares por la suave y tersa piel para limpiarle las lágrimas. El omega separa los labios para hablar pero no lo logra, antes de eso Hyukjae lo besa, mete la lengua hasta apoderarse de su boca, saborea y bebe cada cosa que venga de él. Cada lágrima llena de dolor.

Cuando siente las manos del menor aferrarse a la parte trasera de sus bíceps solo lo toma como una invitación. A pesar del dolor y la traición para ambos es una completa tortura el permanecer tan alejado del otro. Uno siente anhelo y el otro dolor pero ambos se alivian con ese momento de debilidad. Son solo unos segundos, unos momentos en los que al más joven se le nubló el juicio.

Cuando un atisbo de razón regresa a su cuerpo, Donghae gira el rostro, terminando con el beso. Se alejo de Hyukjae tratando de recuperar el aire. Pero ya no puede, hay tantos sentimientos que lo consumen en ese momento que se quiebra. Se deja caer por la pared hasta que llega al suelo, las lágrimas caen como cascadas por sus mejillas, le duele todo.

El alfa se agacha a la altura del más joven, extiende una mano para acariciarle pero reside un golpe. Le duele el rechazo pero sabe que se lo merece.

—Quiero que sepas que te amo, eres la única persona a la que he amado realmente en mi vida—Lo ve con la impotencia de no aliviar ese dolor y solo ser el causante, que en un intento vago de protegerlo solo lo lastimo más.

A Hyukjae le dolían los huesos por el accidente, su memoria aún se sentía pesada y borrosa, pero con gusto pasaría ese dolor y regresaría a no saber quien es si así puede tener a su omega. Cuando se one de pie y sale del departamento, quedándose en el exterior para no invadir a Donghae pero sin atreverse a dejarlo solo, se pregunta, si no hubiera tenido ese accidente ¿Su vida seguiría igual?

Cierra los ojos, añorando su relación antes del accidente, así como Donghae lo había hecho.

Realmente ¿todo estaba tan roto entre ellos?