La manzana envenenada

Episodio 3

Tras un cielo despegado teniendo un buen día para pasear, me había preparado con mi vestimenta negra se vía muy tenebroso de vista pero aun así tenía que salir.

—¡Muy bien, con esto estoy listo! -Dice Davian.

—Te ves muy, pero sabes, ¿Como planeas conseguir dinero?

—Mmm! Con la gran cantidad de cosechas de manzanas las venderé por ahí.

—Haaa! [Suspiro.] —Ni siquiera sabes donde lo vas a vender, escucha bien fija mi mirada directa en el espejo y te mostrare el camino hacia un pueblo cercano, hay te ayudara a vender la ganancia de las manzanas.

Como me indico el pequeño espejo mágico, atravesando el oscuro y sombrío bosque pude ver detalladamente un vasto cielo azul claro rebozando de aves a su alrededor, la camina hacia el pueblo más cercano fue un poco larga ya que valió la pena ir porque pude vender mis cosechas de manzanas a un buen precio. Ocultando toda mi vestimenta un poco andrajosa con una capa negra pude escabullirme por los alrededores del pueblo observando los grandes puestos de comida, ropa, joya entre otros que muchas personas promocionaban a vender.

—Ven echa un vistazo~

—¡Las cosas de hoy son geniales! ~

El bullicio de las gentes era demasiado era sorprendente de ver ya que había pasando 3 meses entero encerrado en un bosque hablando únicamente con un pequeño espejo parlanchín.

—Oye! Chico ¿Que vino a comprar? -Le pregunta un comerciarte.

—Eh? ¿Me está hablando a mí? -Le dice Davian un poco confundido.

—Así es. Ha, Ha, ¡Tenemos un buen precio de carne de pollo, patas de pollo e incluso pechuga de pollo!

—Oh, ¡Seria bueno cambiar mi dieta de manzanas a comer algo de pollo!

—Eh? ¿Tu vendes manzanas?

—Si, Solo me quedan unas pocas Y-

—¡Genial! Hagamos una cosa, dame dos de tus manzanas y yo te daré 3 kilo de cada carne de pollo. ¿te parece bien?

—Bueno yo-

"Murmullo" —Si hazlo Davian, después de todo no sobrevivirás si no comes algo de carne de animal. -Le dice el espejo sin que lo notaran.

—¡Bueno si es así, tenemos un trato señor!

—Excelente, iré a prepararte la carne.

Haciendo un buen negocio cambie dos de mis manzanas por una gran cantidad de carne, y tras mi búsqueda de otras cosas me había topado con buenas personas en intercambiar manzanas por algo de ropa, zapatos utensilios de cocina y demás algo de comida para sustentar mis días de hambruna. Era emocionante como la gente del pueblo era tan amable con los extraños con las manos llenas de bolsas me dirigí de nuevo a casa atravesando de nuevo el bosque llegando a mi pequeña cabaña que yo mismo había construido.

—Haaa! Fue un día tan agitado.

Bribar, bribar, bribar.

—Ha! Lo siento espejo mágico, casi me había olvidado de ti.

—Huaaa! ¿Hasta cuándo me ibas a dejar encerrado dentro de tu bolsillo? -Exclama de enojo el espejo.

—Lo siento mucho espejito, espejito. ¡Pero mira! Conseguí muchas cosas gracias a mis manzanas.

—Si, de eso te felicito. Por la poca información que eh obtenido en dirigirme a los espejos de otros pude optar que las manzanas son muy valiosas.

—¿Mas valiosas que el oro y la plata?

—¿Porque dices eso?

—Pues, al dirigirme a una última campaña una señora se alegró tanto de ver las manzanas que se le brotaron hasta las lágrimas, me conto que.... Después que la reina ascendiera al trono que destruyeran toda cosecha de manzana ya que las odia.

—Mmm! Ya veo la razón de la misma. Pero antes de eso, debes tener mucho cuidado si quieres seguir vendiendo tus manzanas, no queremos sospechar nada.

—Está bien, espejo mágico. Y.... una cosa más. ¿Como se cocina todo esto?

—¿Ha? ¿Me estas tomando el pelo? ¡Siendo un hombre sin memoria que sabe cómo construir una casa ¿No sabe cocinar? -Le grita en forma de enojo.

—Hiiick! Lo siento tanto.

—¡Ahh! Por dios, te ayudare. Pero a partir de hoy tendrás que empañártelas tu solo.

—Yes, My lord.

—¿Dónde escuchaste esas palabras?

—Lo escuche en el pueblo cuando un señor de alta grama caminaba con un gran grupo de guardias o algo así.

—Está bien, empezamos. Coge el cuchillo por el mango y suavemente rebana la parte del medio de la pechuga para luego limpiarla con agua fría.

Esa noche fue una de las mejores cenas que haya comido, por primera vez en la vida me di la sadicfacion de comer algo que no sea manzana en la cual, a mi hora de acostarme y sumergirme en el mundo de los sueños, esta vez soñé con algo diferente.

Desde mi punto de vista me vi como un fuerte e corpulento hombre obrero que trabaja en una especie de construcción, "¿Ese soy yo?" Me llegue a preguntar, notando el uniforme naranja con rayas negras entre brazos y rodilla con un casco rojo llevaba con guantas kilos y kilos de cemento para construir un gran edificio. Nos llevaba casi todo el día terminar la primera parte del edificio pero aun así me sentía a gusto con mi trabajo, regresando a casa después de haber pasado por un puesto de comida rápida me sentía a gusto de comer carne a la parrilla.

—Mmm! ¡Es tan sabroso! ¡Este sabor es único! Y no hay nada mejor que beberse una buena lata de cerveza como acompañante.

Esa noche era de las mejores comidas que haya probado en mi vida, y más que todo había un secreto que no permitía que nadie lo descubriera.

—Atención lectores, se ha subido el episodio final de <Blancanieves y la bruja Roja.>

—¿Oh? ¡¿Ya ha terminado?! ¡Debo leerlo ahora!

Y era que soy un fans de un novelista seguidor de novelas ligeras para chicas que tienen un toque de B'L +19 a ninguno d mis compañero le podía contar ese secreto, ya que me considerarían como demente o gay por leer esas eróticas novelas que fascinaban cada noche después de un arduo día de trabajo laboral.

—¿Que pasara con el Príncipe? ¡Ese malvado brujo del bosque encanto al príncipe con manzanas sádicas y lo mantiene encerrado como un prisionero! ¡Pobre, no puede salir!

Toc, Toc. [Tocan la puerta.]

—¿Uh, Quien será a esta hora? -Me llegue a preguntar después de haber escuchado el sonido del llamado.