CAPÍTULO 24

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Viktor

-Hasta hora no hemos tenido noticias de los japoneses- dice Kostya a mi lado.

Hago una mueca y sigo golpeando el saco de boxeo que tengo frente a mi.

-Lo más probable es que Yoshida este planeando algo,no es el tipo de persona que se quedará de brazos cruzados,lo hemos visto durante estos meses- doy dos golpes más con mis puños - tenemos que estar alertas.

-Estoy de acuerdo.

Pongo mis manos en mis caderas y exhalo,voy hacia mi botella de agua y bebo un poco.

Pasaron dos días desde que volvimos de Italia y las cosas están bastante tranquilas.
Alessandro tomo el puesto de Dominico y se que no a dormido nada,se pasa de reunión en reunión para mantener todo bajo control en La Cosa Nostra y que no haya nadie que pueda ir en contra de él.

Por suerte Alina no tiene que involucrarse en eso,la noticia de que es hija de Conor escalo muy rápido en la Mafia Italiana por lo que la ven como una bastarda y no respetan su rango dentro de La Cosa Nostra.

Me enoja demasiado que solo la vean de esa forma pero a la vez me dan aún más ganas de hacerla mi esposa.

Cuando ella se convierta en la Reina de La Bratva todos no tendrán otra opción que arrodillarse ante ella.
Me encargaré que todos la respeten y veneren.

Pero también que sepan que es mía.

Mi Mujer.

Mi Esposa.

Mi Reina.

Sonrio ante la idea y Kostya me mira alzando sus cejas.

Niego con la cabeza y él me habla -Creo que la boda es una mala idea.

Frunzo el ceño pero el continua -No te confundas,no estoy encontra de que te cases con Alina pero creo que una boda pública no es una buena idea en este momento.

Asiento a lo que dice porque de cierta forma es verdad.
-Pero es lo que Alina quiere y se lo daré,ella se merece una boda en toda su altura.

Parece que se resigna a que será de esa forma y termina asintiendo.

La puerta de mi gimnasio se abre y Alina entra.

Lleva su cabello recogido en una coleta alta y shorts deportivos negro con un top a juego.
Hay demasiada piel expuesta y me relamo los labios mientras pienso en la cantidad de cosas que puedo hacerle aquí mismo.

Se gira para mirarme y estoy seguro que sabe lo que pasa por mi mente porque entrecierra sus ojos hacia mi y niega con la cabeza.

Curvo mi boca en una sonrisa con picardia.

Kostya carraspea a mi lado y recuerdo que él también se encuentra en la habitación.

Alina se acerca a nosotros y la tomo por la cintura para besarle la mejilla.

-Hola nena.

Ella me sonrie -Hola cariño- Jamás creí que ese apodo cursi sonará tan bien en sus labios cuando me lo dice a mi.

Veo de reojo al rapado que esta haciendo cara de asco y me carcajeo.

D'Angelo #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora