LEVIHAN HISTORIAS CORTAS

Un puck y un libro (5)

La madre de Hange la fulminaba con la mirada, sus manos apretadas en puños temblaban de furia. La bochornosa escena de Levi colocándose el bóxer, con su hija tapándose con las sábanas, era demasiado para ella. Hange se encogía avergonzada bajo las sábanas, deseando desaparecer. Pensaba en cómo escapar de la mirada fulminante de su madre, sus mejillas ardían de vergüenza.

- Señora, nosotros... 

- Sal de aquí muchacho, ahora debo hablar con mi hija.

Levi se movía con torpeza, mientras abrochaba la camisa. Su rostro estaba completamente rojo, miro a Hange y con ,  la voz entrecortada, dijo: 

-Adiós Hange, señora. Espero no sea muy dura con ella, no es su culpa.

Hange lo observaba con ojos llenos de lágrimas, sintiendo una mezcla de vergüenza y tristeza. Se preguntaba ¿Qué estaría pensando su madre en estos momentos sobre ella? Vio a Levi salir, lo escucharon abrir la puerta y abandonar la casa.

- Vístete y ven a la sala, ahora vamos hablar seriamente.

La castaña se coloco su pijama, aún en su cuerpo mantenía la fragancia de Levi, además sentía sus piernas temblar. Bajo hasta la sala encontrando a su madre en el sofá, está visiblemente nerviosa, jugueteando con sus manos.

- Hange, cariño, sé que esto puede ser un tema un poco incómodo, pero es importante que hablemos sobre el sexo, después de lo que acabo de ver -Menciono controlando su tono de voz.

-  Sí, mamá, lo sé.

- Primero que nada, quiero que sepas que puedes hablar conmigo sobre cualquier cosa. No hay nada que te dé vergüenza o que no pueda contarme.

- Lo sé, mamá. Gracias.

-  Bien, entonces, empecemos por lo básico. ¿Qué sabes sobre el sexo?

- Bueno, sé que es... ya sabes, cuando un hombre y una mujer...

- Sí, eso es cierto, pero hay mucho más que eso. El sexo es una parte natural y hermosa de la vida, pero también es importante hacerlo de manera responsable y segura.

La madre de Hange procede a explicar los detalles de la anatomía humana, la reproducción y los métodos anticonceptivos.  Habla con franqueza y comprensión aunque en el fondo deseaba patearle abofetear a ese chico. Hange escucha atentamente.

- Y ahora, quiero hablarte sobre Levi.

- ¿Qué hay de él?

- Me preocupa tu relación con él, Hange. No me gusta su forma de ser. Es demasiado... brusco, arrogante, se que es tu primer novio, pero mira esta yendo demasiado deprisa ¿Te forzo a querer tener sexo contigo?

- Pero mamá, yo lo amo. No me forzó, Levi puede cambiar, no siempre es brusco.

- El amor no es suficiente, Hange. Necesitas a alguien que te respete, te valore y te haga sentir feliz. Levi no parece ser ese tipo de persona.

- No lo sé, mamá. No quiero dejarlo. -Sus ojos se llenaron de lágrimas. 

- Sé que es difícil, Hange, pero tienes que pensar en lo que es mejor para ti. Mereces estar con alguien que te haga feliz. Aún tienes 16 años, eres muy inteligente, la madre de Nanaba me contó que Levi es muy raro, además agresivo, tu amiga esta preocupada por ti. 

- Es una chismosa, esta celosa porque tengo nuevas amigas. Levi no siempre es así, debes creerme a mi, no a los chismes...

- Escucha jovencita, no vas a quedarte a solas con él en esta casa, si quieres continuar esa relación puedes hacerlo, pero si veo que se porta mal contigo, voy a intervenir, es una mala influencia, para ti.