LEVIHAN HISTORIAS CORTAS

Luz y Sombra (3)

En el Bosque

Hange se encuentra explorando la laguna, buscando especímenes de peces para su investigación. Se adentra cada vez más en las aguas profundas, fascinada por la vida que observa bajo la superficie. Un resbalón inesperado provoca que  pierda el equilibrio y cae de lleno al agua. El pánico se apodera de ella mientras lucha por salir a la superficie.

Erwin, que la observaba desde la orilla, reacciona con rapidez. Se lanza al agua sin dudarlo y nada con fuerza hacia Hange. La encuentra ahogándose, inconsciente y a punto de perderse en las profundidades.

Sin pensarlo dos veces, Erwin toma a Hange en sus brazos y la lleva a la orilla. La coloca sobre la tierra y le da la vuelta para que expulse el agua que ha tragado.

Hange tose y jadea, recuperando poco a poco la consciencia. Erwin la observa con preocupación, asegurándose de que se encuentre bien.

En ese momento, Levi llega al lugar. Se detiene en seco al ver a Erwin inclinado sobre Hange, dándole respiración boca a boca. Un torrente de celos recorre su cuerpo, aprieta los puños y observa la escena en silencio. Su mirada es una mezcla de furia y dolor, no quería que nadie mas profanara los labios de Hange. Finalmente se recupera por completo. Se incorpora y mira a Erwin con agradecimiento.

Erwin le sonríe con alivio.  - Te ves mejor -

Hange se sonroja levemente.  - Gracias por salvarme, pensé que era mi final

- Por suerte estuve cerca Hange, es bueno verte bien, debes tener cuidado.

Levi, sin poder contenerse más, se acerca a ellos con paso firme.

- Brujo, con tu magia podías sacar el agua de su cuerpo, no había necesidad de darle el beso de la vida...

- Solo estaba ayudando a Hange. - Menciono Erwin en tono apacible-

- No vuelvas a hacer algo así-  Levi aprieta los dientes y mira a Erwin con una mirada desafiante. 

Erwin frunce el ceño. ¿A qué te refieres?  

Levi camina por el bosque, furioso consigo mismo. No quería actuar de esa manera, pero la imagen de Erwin besando a Hange lo había cegado de celos. Se sentía como un animal salvaje, listo para atacar a cualquiera que se interpusiera en su camino. Se sienta en un tronco y toma un trago de la pócima antisol. La amarga bebida le ayuda a calmarse un poco, pero la ira aún arde en su interior.

Arroja una piedra contra un árbol con fuerza. La piedra se desintegra en mil pedazos, liberando parte de la tensión que lo consume. Cierra los ojos y respira hondo. Intenta calmar su mente y pensar con claridad. Debía solo cumplir su propósito, robar la magia de la elfa, pero no podía evitar sentirse celoso.

Hange se acomodo el cabello en una coleta, se quito parte de su atuendo para que se secara, recordó la expresión de molestia de Levi con una sonrisa, aquel pequeño vampiro estaba celoso y no podía controlarse. A ella no le gustaba Erwin, lo encontraba interesante, pero no se veía un futuro con él brujo.

Camino por el bosque buscando a Levi, lo encontró reposando en un tronco con los ojos cerrados, movió algunas hojas con telequinesis, para que cayeran en el rostro del contrario, vio como abrió sus ojos grises para encontrarse con los suyos. Se acerco a él con una sonrisa.

- ¿Estas bien? 

- Supongo que sí, solo que no me gusta que toquen lo que es mío. 

- Yo no soy tuya, no soy una cosa Levi -Soltó una pequeña risa- estas celoso