Infierno en el campamento

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Acciones/estados
##Comentarios##
Diálogos (personajes): Buenas
**Pensamientos (personajes)**
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##Una semana y media más tarde##

Nuestro protagonista y sus amigos se encontraban entrenando como ya acostumbraban durante estos días, llegando a sus límites y superándolos día sí y día también.

Aparte de eso y que debían cocinarse su propia comida, los alumnos se lo pasaban bien y aprovechaban los pequeños momentos que tenían para relajarse y descansar para conocerse entre ellos y mejorar la convivencia de ambas clases; a pesar de las negativas y quejas de cierta rubia castrosa de la clase B.

Por otro lado, los héroes estaban contentos con los avances y la gran evolución que habían demostrado los alumnos. A su vez, los tres entrenadores del peliverde se habían integrado bien con el resto de los profesionales y los alumnos, alegrándose por la buena gente con la que el peliverde se ha rodeado e incluso llegando a conocer a los más cercanos a este; siendo Arisu el que mejor se llegó a acomodar entre los alumnos, principalmente por las caricias que recibía.

No solo eso, pues el pequeño Kota parecía haber reflexionado después de la conversación que tuvo con el peliverde y su relación con su tía y los Pussycats mejoró en gran medida, lo cual los alegró a todos; pero dicha conversación también hizo que este se pegara al peliverde cada vez que este no se encontraba entrenando, hablando con él sobre diferentes cosas, hobbies y jugando de vez en cuando como si fueran hermanos. Cabe aclarar que eso le parecía tierno a todos los que los veían, excepto los alumnos que pensaban que los niños eran una perdida de tiempo.

(Tose fuertemente) Bakatsuki (Tose aún más fuerte)

Debido al buen desempeño de los alumnos, tanto los profesores como los entrenadores decidieron que estos merecían divertirse un poco y es por eso que ahora nos encontramos con esta curiosa escena.

Kyoka: (Algo nerviosa) ¿Una prueba de valor?

Mandalay: Exacto. Primero, la clase B será la que de los sustos, mientras que la clase A debe atravesar el camino designado; luego, será el turno de la clase A de asustar.

Tiger: (Haciendo una pose de fisicoculturista) La clase que más pantalones moje, gana.

Mina: (Superanimada) ¡¡Qué bien, una actividad propia de campamento!!

Aizawa: (Le pone la mano sobre su hombro) Lo siento mucho, Ash'do, pero los suspensos tendréis clases de refuerzo ahora.

Mina: (Desinflándose completamente) P-pero, prueba de valor.

Aizawa: (Atando a los suspensos en su bufanda) Mejor vamos yendo, cuanto antes empecemos antes acabaremos. (Caminando hacia el interior del edificio)

Mina: (Estirando su mano hacia sus compañeros, llorando cómicamente) Prueba de valor.

El resto de los alumnos veían con pena esto, pero no podían oponerse a lo que sus profesores decían.

Mandalay: Bien, (mostrando una caja) coged todos una pelota y juntaos los que tengáis el mismo número. Mientras tanto, la clase B puede ir ocupando sus puestos.

Uno por uno, los alumnos fueron cogiendo una pelota y juntandose con su respectivo compañero. Algunos de ellos se alegraron al ver quién era su compañero, otros se decepcionaron un poco, aunque nuestro protagonista...

Izuku: (Mirando a la nada mientras sujetaba una bola completamente negra) Esta es mi suerte.

Mandalay: Lo siento, Midoriya-kun, parece que tendrás que ir solo.

Izuku Midoriya: Cero Level HeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora