Do you promise...? || YunGi

51. Diferentes perspectivas

—Mingi, tengo que hablar contigo una cosa.

Mingi se acaba de secar el cabello y va rápido al espejo. Se peina bien, se arregla al ropa que se humedeció por su cabello mojado; revisa no tener nada en los dientes, que su aspecto no sea una absoluto desastre. Yunho ha evitado hablarle en todo el día. Ya es hora del almuerzo -dijo que iría tarde a la oficina-, y viene siendo el momento perfecto de iniciar con ese tema en específico.

No fue cualquier cosa: Yunho casi le destruye el cuello de lo mucho que lo mordio. Por lo que quiere decir que él lo quiere como compañero ¿No es cierto? O que cuando esto termine, van a intentarlo de alguna manera. Su mente nunca había volado tan alto con ilusiones e ideas para el futuro. Principalmente porque lo había limitado a Wooyoung.

En un movimiento rápido anota toda esa retahíla de pensamiento alborotados. Es lo que San le pidió. Omitiría la parte de lo que hicieron, tiene que cuidar a Yunho. Sería un poco extraño que le haya hecho algo siendo que lo tiene viviendo de su casa desde que era menor de edad.

Más que extraño, sería peligroso. Es la razón por la que están demandando a Hwanjoon después de todo.

Habiendo terminado cierra el cuaderno, lo esconde debajo una pila de ropa y sale a la sala. Yunho cambiando canales en la televisión, al comida servida en la mesa. Va a sentarse por inercia, con una ligera sonrisa en los labios y el corazón alborotado de emoción.

Yunho se gira y da un pequeño brinco. No lo escuchó cuando se sentó. Por no mencionar que lo sorprende verlo tan feliz y radiante. Sinceramente, le sienta mal. Es la primera vez que lo ve así de radiante aun con los nervios. Como si por primera vez, no hay pánico de que pase algo malo o debe guiar la situación por sí mismo.

Con Wooyoung, hay la posibilidad de que algo salga mal, de que su hermano tenga algún malestar y Mingi guarda esa angustia en su pecho. Con Yunho, en este preciso momento, es de otra manera. Es simplemente radiante.

Yunho se sienta en la mesa, toma los palillos de metal y empiezan a comer. Yunho espera a que termine la comida para hablar. Mingi come más rápido que nunca, dejando todos los platos vacíos y con apenas rastro de comida.

—Espera—Lo detiene de levantarse a llevar todo a la cocina—. Siéntate, es que... hay que hablar algo serio. siéntate. —Insiste y Mingi se vuelve a sentar.

— ¿Pasó algo malo? Hoy no hay audiencia.

—No, no es sobre eso- aunque ahora que lo mencionas: es muy probable que mañana o pasado mañana Seonghwa vaya a visitar a Wooyoung. Debemos intentar que hable o que de un testimonio de su vida con Hwanjoon. Será lo más discreto y cuidadoso posible. San va a estar ahí—Mingi asiente. No lo preocupa. Seonghwa es Omega y una persona muy amable en su opinión, a pesar de tener esa actitud de señora de la mafia—. Lo que quiero hablar contigo de lo que pasó anoche-

—Yo sí quería—Interrumpe y Yunho siente que la lengua se le enrolla hasta el fondo de la garganta. No esperaba esto de él—. E-es... que tú me gustas. Me gustas mucho. A-así que no hay problema. yo quería hacerlo. Es-estoy bien. no me duele mucho el cuello y me siento bien.

—Que bien que estés bien. —dice con una sonrisa incomoda.

—Y no le diré a nadie. Es-

—Es precisamente lo que te iba a pedir—Yunho exhala y es frota el entrecejo—. Escucha—pide y Mingi se muerde el labio inferior—. Eso, no pasó; nada de lo que hicimos anoche, pasó- Acabas de cumplir dieciocho años, hace apenas una semana y dos días cumpliste la mayoría de edad—insiste Yunho y Mingi tiembla en su lugar, nervioso—. Entiendo que quieras tener algo a lo que aferrarte y te doy confianza, pero eso no quiere decir que vamos a ser compañeros. Estas en una situación muy vulnerable y no debí aprovecharme de eso.