Al final no le había quedado otra. Fate había vuelto a acercarse al callejón donde había visto, por primera vez, a un vampiro en Summerfield. El rincón estaba desierto a esas horas de la mañana, pero se sentó en un bordillo y esperó impaciente a que alguien hiciera acto de presencia. El olor que traía la brisa le indicaba que era un sitio frecuentado por vampiros. Con suerte, tendrían alguna información sobre Iva.
Empezó a cruzar las piernas, a dar pequeñas caminatas de lado a lado e incluso se puso a doblar una pequeña barra de metal que encontró tirada por el suelo hasta que apareció el primer vampiro. No era el que se había encontrado la semana pasada, sino otro con una apariencia parecida. Tenía más cabello y parecía más joven. Al verla y olfatear el aire le sonrió con una sonrisa amable.
—No pareces de por aquí, niña. ¿Te has perdido?
—Ah, no, llevo unos cuantos días por estas callejuelas. —Le sonrió con intensidad y decidió ir al grano—. ¿Tú sabes mucho sobre esta ciudad?
—Llevo quince años en este lugar, así que sí, algo sabré. ¿Eres de algún aquelarre?
—Tengo uno, aunque todavía es muy pequeñito. Yo y una amiga, no es vampira y es inmune, pero sabe mi secreto y lo está guardando, pero bueno, que me ando por las ramas, ¿conoces a un tal Ivankov? ¡Ivankov Sixaliyeva! —La chica empezó a hacer gestos y a saltar como loca—. Es incluso más alto que tú, humano, inmune... ¡Más fuerte que un roble!
El vampiro se rascó la barbilla con el ceño fruncido. Sus ojos castaños no parecían expresar mucha simpatía.
—Ni idea, pero yo que tú llevaría cuidado. Este es el territorio de los Becker, así que mejor no hagas nada que puedas lamentar.
—Ah, no, tranquilo, ¡si yo vivo por el bosque! —le dijo con una tierna sonrisa que pareció ablandar al hombre—. Encontré una casita abandonada y la he limpiado un poquito para que no hubiera mucha suciedad. En fin, ¿has visto o sabes de ese humano?
Antes de que pudiera contestarle otro vampiro hizo aparición por el callejón. Fate lo reconoció en el acto, pues se trataba del que había visto en su llegada a la ciudad. Ambos intercambiaron miradas y la chica comprendió que compartían pensamientos entre sí. Tras un interminable minuto el recién llegado se cruzó de brazos y le dirigió una mirada serena.
—Al humano que buscas, por tu descripción, tal vez puedas encontrarlo por el centro. —Su voz era tan dura como mostraba su aspecto—. Le he visto rondando con otro vampiro, aunque no sé a qué aquelarre pertenecen. ¿Tiene el cabello castaño, sonrisa algo bobalicona y agradable a la vista?
—¡Es un gigante amable!
—Entonces debe de ser el mismo que buscas. Pregunta por la calle Quatermain, tal vez tengas suerte y puedas encontrarlo en ese sitio.
Fate no pudo contener su alegría. Saltó de golpe, le dio un beso en la mejilla al vampiro, se despidió de ambos y salió corriendo del callejón. Por el camino preguntó la dirección que le habían indicado y al llegar comenzó a preguntar a los transeúntes por él. No obtuvo grandes respuestas, aunque sí averiguó que un hombre con esas características se pasaba alguna vez por una cafetería cercana.
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Colmillitos Anónimos
VampireFate busca tener la cabeza alta y demostrarle al mundo su valía. Alix desea tener un grupo de amigos que la quieran por lo que es. Kara solo quiere recuperar la vida que le arrebataron aquella noche. Daisy quiere demostrar que no hay nada malo en cr...