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Todo bien, pero... Disfruten 😝

Logan:

Tiré mi celular en la cama de Esteban y fruncí el ceño.

—Ay si, iré donde jess porque me encanta, bla, bla, bla —grito frustrado—. Lo odio.

Esteban que estaba concentrado jugando en su PC me mira risueño.

—¿Otra vez estás celoso? —pregunta divertido.

Le levanto el dedo de en medio.

—Tu cállate, ojalá te rechace el que te gusta —lo miro enfadado.

Él se ríe.

—Ya me has rechazado tres veces, ya tus maldiciones no funcionan —se encoge de hombros.

Ruedo los ojos.

—No cuenta, ¿A quien no le gustaría yo? —ironizo.

—Ay yo sé uno —me mira con malicia.

Enarco una ceja, pero en cuanto lo veo sonreír lo miro entre ceja y ceja.

—No te atrevas…

—A Mark.

Le lanzo un zapato a la cabeza. Él logra esquivarlo, pero se echa a reír.

—Tu cállate, pendejo de mierda, ojalá te den —le vuelvo a lanzar otro zapato.

—Ay que rico —se muerde el labio inferior.

Hago una mueca de asco y le doy la espalda.

—Eres un puto asqueroso, ¿Yo por qué me junto contigo? —lo miro de reojo.

Esteban se encoge de hombros con una sonrisa.

—¿Será porque tengo dinero? —bromea

—Yo digo que sí.

Ambos nos reímos. Me echo en su cama y tocó mi celular como si esperara algo.

—¿Por qué no hablas con él? —me pregunta Esteban sin mirarme. Sus ojos se fijan en la partida que hay en su PC.

—¿Hablar qué? —suspiro.

—Pues, a leguas se nota qué te quiere, así que solo dile que estás enojado con él porque salió con ella —dice.

Me siento en la cama.

—¿Para que se de cuenta que estoy celoso? No, no haré eso —me cruzo de brazos.

Esteban suspira, pausa el videojuego y gira su silla par mirarme.

—De igual manera irá a verte ¿no? Notará que estás molesto y tendrás que explicarle, ¿Qué más da que se de cuenta? Ese hombre te adora —remarca.

Hago un puchero con los labios y hundo mis cejas. Mi corazón se comprime y en seguida siento a Esteban sentarse a mi lado.

—Es que no tendría que estar celoso, el tiene derecho a enamorarse —bufo.

Esteban me abraza por los hombros.

—Si, pero dime tú el porqué no podría enamorarse de ti —me mira fijamente.

Dudo en responder y enmudezco.

—Logan, tu también mereces que te amen ¿Lo sabes? Él y cualquier otro chico se darían cuenta de lo hermoso que eres. Tendrían que ser ciegos para no darse cuenta de lo atractivo que te ves —me dedica una sonrisa.

Sonrío levemente.

—¿Y si le gusta más ella que yo? —pregunto desanimado.

Esteban rueda los ojos.

Hasta que seamos solo nosotros Donde viven las historias. Descúbrelo ahora